🗡EPILOG🗡

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SAN PETERSBURGO, RUSIA.
UN AÑO Y MESES DESPUÉS.


Serví una copa de vino y la puse hacia la placa de Papá en el templo familiar. Hace tiempo no venía, y necesitaba hablar con él. Estoy tan llena de odio y rencor... Siento que en cualquier momento perderé el control.

—Me haces tanta falta... —susurré quebrada—. Hace unos días... Nació tu primer nieto, papá... Tú primer nieto de sangre. Mi hijo.

Miré su fotografía, imaginándome como sus brazos me rodeaban y me daban esa seguridad sombría que solo él podía brindarme.

Y entonces, solté todo lo que tenía guardado desde hace meses.

Tal parece que la vida siempre será caótica para nosotros. En menos de un año tuvimos muchas pérdidas así como ganancias, si hablamos de lo emocional, claro está.

Miré la fotografía de mis padrinos que estaba entre mis manos, la había traído para mostrarsela a Papá... Y en dónde estábamos todos como familia. Ese día habíamos decidido hacer un paseo familiar, y Davian insistió tanto en hacer la fotografía, que buscamos un lugar en césped para poner mantas y hacernos la fotografía.

Mis padrinos estaban en el centro con el pequeño Harlen en sus brazos, hijo de Daegan. Al lado de Dahak estaba Daegan con Valkyrie entre sus brazos. Al lado de Iryna estaba mi Sapfirovyye glaza conmigo entre sus brazos mientras yo abrazaba a mis sobrinos, Mads y Calen, hijos adoptivos de mi hermano. Khalil y Davian estaban sentados frente a nosotros, sosteniendo la cámara para sacarnos la fotografía que era tipo selfie. Era una fotografía hermosa...

Quien iba a pensar que días después mis padrinos iban a morir... Justo en el bautizo de Harlen.

Ese día... Sentí mi segunda muerte. La primera fue con Papá y Anette... Y la segunda fue aún más dolorosa al ver a mis padrinos. Sufrimos un atentado en medio de la carretera, a mi madrina le llegó una bala directo al corazón... Y mi padrino no soportó vivir sin él amor de su vida... Y se disparó.

Si para mi fue algo fuerte y desgarrador ver porque fue como volver a vivir la muerte de Papá, me imagino como lo fue para Daegan... Él estaba completamente ido. Vacío. Sombrío. Inexpresivo.

Ese día volví a jurar jamás dejarlo solo. Iryna en su lecho de muerte nos hizo jurar jamás dejarnos solos y protegernos, alegando que éramos hermanos. Tal vez no lo somos de sangre, pero si de juramento.

Y ese mismo maldito día, me enteré de mi embarazo. Pero como mis padrinos habían muerto... No se lo quise decir a nadie. Tampoco lo haría después hasta no tenerlo en mis brazos. Tenía miedo de volver a perder un bebé, así que me callé.

A lo lejos escuché una celebración. Y me despedí de Papá para levantarme y salir del templo familiar Shcherbakov. Salí al jardín, sintiendo el frío césped en mis pies descalzos. Y caminé de forma calmada a través del jardín, viendo el hermoso y oscuro bosque que nos rodeaba. Ya era de noche, hacía frío, pero amaba pasear en medio de la oscuridad. La calma de la noche era una sensación increíble. Rodeé la mansión, admirando su estructura gótica. La mansión Shcherbakov fue construida en 1897. Y era una reliquia familiar.

Me fijé en un ventanal que daba a la sala de estar, en dónde Davian servía trozos de pastel hacia todos. Mi Sapfirovyye glaza no estaba, seguramente estaba en su despacho atendiendo una reunión importante. Sonreí al ver a Daegan levantando a su hijo, ellos habían llegado esta mañana a Rusia para celebrar el primer año de Harlen. Valkyrie aplaudía feliz a su lado, cantando para Harlen.

LA FLOR DE LA MUERTE ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora