XXXV

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EMILIO

España fué sinónimo de exceso de trabajo, suelo trabajar demasiado según lo que me han dicho, pero sin duda esas tres semanas allá estuvieron repletas de trabajo, eso sin contar las situaciones incómodas como dar entrevistas, Joaquin me ayudó en algunas ya que el respondía por mi y lo único que debía hacer yo era posar ante sus cámaras, pero hubo unas que no pude evadir y debía responder todo por mi cuenta; adicional a eso mi abuelo, mi tia, su esposo y mi primo estuvieron una semana y fueron una completa tortura, mi abuelo a diario queria reportes y ver cómo manejaba la tienda, mi tía sigue molestando con el tema de mi matrimonio y como 3 veces a la hora de la cena llegó con personas para presentarmelas y convencerme de elegir a uno para casarme porque ella sigue con los preparativos de la boda y mi primo estuvo queriendo meterse en asuntos de mi empresa y muy insistente con mi abuelo diciendo ser mejor que yo con el principal argumento de que el si habla con otros empresarios y periodistas.

Cuando vi que todo estaba en orden volvimos a México, afortunadamente tengo un equipo de empleados muy competentes que me redujeron considerablemente la carga de trabajo y retomar mis actividades fue mas sencillo de lo que imagine, David y Amalia en verdad son buenos con su trabajo, tanto que en unos meses podría asignarlos en otra área como jefes con la garantía de que todo el trabajo estaría bien hecho. Por otra parte Joaquin también es muy eficiente y estoy seguro que en muy poco tiempo el tendrá todos los conocimientos para formar su propia empresa si eso es lo que desea.

En un plano más personal, estoy enloqueciendo, ya tuve varias "citas" con las personas de la lista que Joaquin está haciendo pero simplemente ninguno está capacitado para poder ser quien se case conmigo y la fecha de la boda está cada vez más cerca, en verdad no se que voy a hacer si Joaquin no consigue a alguien totalmente capacitado para entender que se casará conmigo pero lo único que existirá entre nosotros es un papel firmado porque no se involucrará con mi hijo, no podrá tocarme para nada y no dormiremos en la misma habitación, ¿Es muy difícil entender eso?

Realmente en este tiempo la única buena noticia es mi hijo, cuando le hicieron la prueba de embarazo a la mujer que le ayudará a llegar al mundo dió positiva y cuando me llegó el sobre con una tira de fotografías del bebé supe que la tortura que soporte en esa clínica valió la pena por ahora solo que da esperar unos pocos meses y podre tenerlo en casa, aun no sabemos qué sea, pero eso realmente no es importante, solo quiero que esté sano y por eso le puse un equipo completo de seguridad, médicos y ayudantes a la mujer que lo lleva en su vientre para evitar que sufra cualquier complicación durante el embarazo.

Como estas últimas semanas las cosas no están tan en orden ni están saliendo justo como yo quiero, mi tranquilidad se ha visto considerablemente afectada, es por eso que agende una cita con mi psicólogo, había estado tan ocupado con el trabajo que no había podido verlo y ahora realmente necesito hablar con él. En general no tengo tiempo disponible, pero Joaquin se encargó de concretar la cita para la hora de la comida, yo no necesito ningún alimento durante el día, sin embargo se que no todos pueden mantenerse así, por tal motivo se reservó un área privada en un restaurante para podernos encontrar ahí, y como siempre, yo llegué primero al lugar y ordené una botella de vino.

Henry: Siento la demora, había trafico, ¿Esperaste mucho?

Emilio: Solo unos minutos

Henry: Mientras me guiaban a esta zona me dijeron que pediste una botella, creo que con eso es suficiente para hablar así que nadie vendrá a interrumpir

Emilio: ¿No comerás?

Henry: No, ya había comido antes de salir

Emilio: Comprendo

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