XLII

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JOAQUÍN

Después del mes de descanso que se tomó Emilio, las cosas volvieron a la normalidad dentro de la empresa, el único y mayor cambio es que ya tenemos una hora de comida, esto a raíz de una deficiencia de nutrientes que mostraron los estudios que me hicieron, no es nada grave pero si debo cuidarme. Por el resto de cosas, todo sigue igual, yo sigo viviendo en mi departamento (aunque esta ya es mi última semana ahí antes de mudarme por completo con Emilio), mis padres siguen un poco molestos por haberme casado, Emilio me explota laboralmente, David y Amalia me dan apoyo moral para no renunciar y yo en verdad no se como es que he soportado un año aquí y bajo estas condiciones. En verdad soy un idiota.

Amalia: (se sienta en el escritorio) Propuesta, tu, David, yo y un bar, ¿Aceptas?

Joaquín: No tienes idea de lo mucho que lo necesito, pero tengo demasiado trabajo hoy, tal vez luego los acompañe

David: Eres el que más trabaja, por un día que no termines todo nadie va a morir

Amalia: Además, te casaste con el jefe, eso debe tener sus ventajas

Joaquín: En realidad no, el trabajo y el estar casados son cosas muy diferentes, lo único que conseguí con eso es que ya no me lleve trabajo a mi casa, fuera d eso no hay ninguna ventaja

David: Entonces te ayudamos a que termines a tiempo, pero si o si iras con nosotros

Amalia: Tómalo como un festejo de aniversario, yo acabo de cumplir un año aquí, pero ustedes ya lo tienen y no lo festejamos adecuadamente

Joaquín: Tu ganas

Amalia: Perfecto, yo me llevo esto (toma unas carpetas) y ustedes hacen lo que queda

Los tres nos mantuvimos tan enfocados en terminar todo el trabajo que no nos dimos cuenta de la hora hasta que Emilio salió de su oficina en punto de las 8pm, lo primero que hizo al vernos fue regalarnos porque debíamos salir a las 7pm ya que él no nos pidió quedarnos más tiempo, pero luego Amalia y su gran poder de convencimiento hizo que se le olvidara todo el regaño y hasta logró convencerlo de acompañarnos al bar. Al llegar David, Amalia y yo pedimos cerveza mientras Emilio solo una limonada, también ordenamos papas fritas y alitas para comer algo mientras platicábamos.

David: ...Le llevé serenata a mitad de la noche y ahora somos novios

Amalia: Ay que lindo, yo también quiero algo así, ¿Saben lo triste que es ver a todos felices en pareja y yo aquí sola? (mira al guardaespaldas) ¿Hasta cuando me harás caso guapo?

Joaquín: (susurra) Es casado

Amalia: ¿Es neta?

David: Era obvio, el 95% del equipo de Emilio tiene una edad mínima de 30 y son casados, dicho en otras palabras, nosotros somos los más jóvenes y que no tenemos un compromiso serio, bueno Joaco ya no cuenta pero me entiendes

Amalia: Que deprimente

Joaquín: Ya encontraras a alguien que te quiera

Amalia: Con el exceso de tiempo libre que tenemos, obvio lo conseguiré jajaja

Joaquín: Si David lo logró, tu también, solo confía

XX: (se acerca a Emilio) ¿Podría invitarte algo de tomar?

Emilio: (lo mira) Yo no bebo

Ramón: Mantenga su distancia por favor

XX: Lo vi a lo lejos, me pareció muy atractivo y decidí acercarme, mi intensión no es incomodarlo, pero si me gustaría conocerlo

ExigenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora