Exigencia

XXVII

AMALIA

Un nuevo día iniciaba y tristemente debo ir a trabajar, no es que odie mi trabajo, solo odio entrar temprano y debo salir de mi casa cuando el sol aun no sale, debería ser ilegal irte al trabajo antes de que salga el sol, si el cielo está oscuro significa noche y la noche significa cama calientita, eso es lo normal en la existencia humana, pero mi jefe es un robot asi que no lo entendería. Llegué al edificio 5 minutos antes de las 7am y yo solo deseaba seguir en mi cama, sin mucho ánimo entré y fui hasta el piso en que trabajo, ¡Era la primera en llegar! Eso debería ser aún más ilegal.

En el primer escritorio había una pila de carpetas a las que debíamos ponerles orden antes de que el jefe llegue, tomé algunas y las llevé a mi lugar para empezar a trabajar, unos minutos después llegó David y repitió mi acción, mientras nos ocupabamos de los papeles platicábamos un poco ya que este puede ser el único momento que tengamos para hablar en un volumen normal y no susurros.

Revisé el reloj y ya marcaba las 7:30 y Joaquin aun no llegaba, eso es muy raro en el ya que es tan puntual que llega antes de las 7 o a las 7 en punto, revisé su última conexión y había sido a las 8pm, eso me estaba preocupando, le llamé en repetidas ocasiones pero ninguna fue atendida, David y yo ya estábamos entrando en pánico porque si el no llega el jefe se puede poner de muy mal humor, peor que el que tuvo ayer, el acuerdo entre nosotros es que Joaquin se encargue de la oficina del jefe y nosotros del trabajo que llegue, pero el no está y nosotros no sabemos exactamente como ordena la oficina del jefe.

David: Un disparejo, el que pierda entra a la cueva de medusa
Amalia: ¿Y si esperamos un poquito más?
David: Faltan 15 minutos para que cruce esa puerta, no podemos esperar más, lleva un orden meticuloso y no podremos hacerlo en 2 minutos, ni el podrá hacerlo
Amalia: Ya qué, yo voy, soy más ordenada que tú
David: Yo hago el café
Amalia: ¿Y si nada le gusta?, vamos a perder el trabajo por culpa de Joaquin
David: Nos debe la vida ese hombre, ya ve a hacer eso que se acaba el tiempo
Amalia: Ya que...

Como siempre, la agenda del jefe estaba sobre el escritorio de Joaquin, la abrí y quedé impactada, ese hombre tiene anotado hasta las veces que debe tomar agua, yo a veces olvido hasta ir al baño; busqué el día de hoy y vi tenia algunas llamadas, un par de reuniones importantes y más cosas, ¿En verdad no conoce algo llamado "descanso"? Ya que la tenía decidí entrar a su oficina o mejor conocida por David como "la cueva de medusa".

Abrí la puerta con intensiones de entrar a ordenar todo pero me encontré con que el jefe estaba ahí y el idiota por el que nos creímos despedidos también estaba ahí, Joaco estaba dormido en una silla y con varios papeles en el suelo alrededor de él, por otro lado el jefe también dormía recargado sobre su escritorio que también se encontraba lleno de papeles sin orden alguno...

David: ¿Qué te pasa?, parece que viste a un fantasma
Amalia: Están aquí...
David: No existen los aliens jajajaja (se acerca a ella)
Amalia: Están aquí...
David: (mira dentro de la oficina) Ay no... ¿En que momento?...
Amalia: Pobre de mi Joaco, la bestia lo tiene preso
David: (la mira) No vallas a llorar
Amalia: Es tan joven (limpia sus lagrimas)
David: ¿Deberíamos despertarlo para que se valla a su casa a dormir?
Amalia: No, medusa estaba de la chingada ayer, yo me fui a las 11 a mi casa, si se va a su casa lo va a matar
David: Entonces hay que despertarlo para que salga de ahí, si el jefe lo ve en su espacio será su fin
Amalia: Buena idea

Dejé la agenda sobre el escritorio de David y sin hacer ruido el recogió los papeles del suelo mientras yo intentaba despertar a Joaco sin hacer mucho ruido, se sentía como una misión imposible, la adrenalina recorría mi cuerpo y casi podía escuchar la sangre corriendo por mi cuerpo, Joaco parecía muerto porque no movía ni un músculo, seguí hablándole y moviendolo hasta que logré que reaccionara y abriera los ojos.

Amalia: Vamonos de aqu...
Emilio: ¿Qué hora es?
Amalia: Ay no...
David: Son las 8 jefe
Amalia: (se arrodilla a un lado de Emilio) Por favor no valla a correr a Joaquin, en 2 minutos su café estará listo, solo hubo un pequeño inconveniente pero le juro que es un buen chico, es muy trabajador y...
Emilio: (oculta una pequeña risa) ¿De que hablas?
Amalia: (susurra) Joaco se quedó dormido en el área de trabajo, (toma la mano de Emilio) No lo valla a correr, le juro que trabaja bien
Emilio: Lo se, (mira a Joaquin) Si quieres puedes irte a descansar
Joaquin: No es necesario, deme 10 minutos y estaré listo para trabajar
Emilio: Te quedaste toda la noche
Joaquin: Usted también
Emilio: Tienes 15 minutos, David, pide algo de comer, quiero un capuchino de vainilla con leche entera y un poquito de canela, una crepa de Nutella con fresas y enchiladas suizas con pollo, ustedes pidan lo que quieran (le da su tarjeta) que hagan el cargo a ella
David: Si señor
Emilio: (Suena su celular) Qué lleven todo a la sala de juntas 2 (atiende la llamada) Te veo en la entrada (termina la llamada) lo del escritorio déjenlo así, yo me encargo de eso (sale de la oficina).