A la mañana siguiente despertamos el uno junto al otro. Fue una sensación diferente ya que nunca había sentido una felicidad de tal manera. Me viré para quedar de frente a él y aún estaba dormido, y parece que lo que sea que estuviese soñando era muy bueno porque sonreía entre sueños. No pude evitar sonreír y recorrer con uno de mis dedos su nariz. Esto hizo que él se moviera y me abrazara con más intensidad. Así que le di un corto beso en los labios, lo que ocasionó que se echase a reír y por fin se levantase.
-Buenos días.- me dijo con esa voz ronca y suave que al parecer tiene por las mañanas.
-Buenos días a ti también.- le dije sonriendo. Él inhaló una bocanada de aire para después volver a cerrar sus ojos.
-Ey, no te duermas. Tenemos que ir a trabajar, he estado mucho tiempo fuera.- le dije
-No quiero.- dijo y escondió su rostro en mi pecho como un niño pequeño.
-Sí, si quieres. Además, sabes que el jefe Lee me tiene el ojo encima y si se entera que me dieron de alta y no he regresado a la oficina, buscará una razón para quejarse de mi falta de compromiso para con la empresa.- Al escuchar esto, Sunghoon no pudo evitar refunfuñar, pero soltó su agarre, lo que me permitió poder levantarme e irme a preparar para el trabajo. Cuando estuve a punto de salir de la sala de estar pude escuchar que decía: "Malditos, viejos buitres". La verdad es que yo pensaba lo mismo, pero hasta que no pudiese obtener una victoria por mi mismo, no podía hacer nada. Todos esos viejos de la compañía lo único que buscaban es que fracasara porque todos querían quitarle la compañía a mi abuelo. No sé si mi abuelo es muy inocente o simplemente goza de ignorar los asuntos, pero yo no puedo. No puedo sentarme a ver como le roban la compañía que tanto sudor le ha costado. Así que con Sunghoon desayunamos y nos fuimos a la empresa. Cuando llegamos, él apagó el carro y no pudo evitar hacer un puchero porque no quería venir hoy.
-Amor, solo recuerda que esta noche es nuestra primera cita.- Le dije mientras ponía mi mano sobre la suya, antes de salir del auto.
En la oficina se sentía un aire de tensión. Al parecer mientras no estuve, algunos empleados le dieron dolor de cabeza a Sunghoon y este fue tan amable y no me dijo nada. Estaba furioso con ellos por haberlo hecho pasar malos ratos solo por ser mi secretario. Estas faltas de respeto no las toleraría y como consecuencia decidí que era hora de presentar un poco del proyecto que me aseguraría mi lugar en la empresa. Sí, sé lo que piensan. ¿Por qué tiene que asegurar su lugar en la empresa si es el nieto del dueño? Porque, en primer lugar, no me gusta que me regalen las cosas, prefiero ganármelas y en segundo lugar, mi abuelo dejó en claro que no me daría la empresa si no demostraba que la podía sacar adelante y que no causaría su cierre. Por tal razón, llamé a Sunghoon y le pedí que reunir a todos los ejecutivos en la sala de conferencia. Cogí mis cosas y me fui a ella, dispuesto a dar la mejor presentación que esos hombres hayan visto.
-Buenos días, como todos saben soy Kang Tae Moo y hoy les vengo a presentar mi proyecto. Nuestra compañía como es de conocimiento general se encarga de producir productos congelados que ayuden a los ciudadanos a poder tener algo de lo que comerían en cualquier establecimiento. Hemos producido todo tipo de comidas congeladas, pero nunca hemos producido alguna bebida. Por eso propongo hacer smoothies envasados como si fuesen jugos, para que las personas puedan tenerlo en la comodidad de su hogar sin tener que salir a comprarlos.- Era una idea genial que llevaba pensando desde que vi algo similar cuando vivía en los Estados Unidos. Sin embargo, algo en la mirada del jefe Lee me decía que no me lo iba a hacer para nada fácil.
-¿Smoothies envasados? ¿De dónde sacaste una idea tan absurda? ¿Al menos sabes si funcionaría en el mercado coreano?- dijo el jefe Lee tratando de aplastar mi proyecto, pero para su mala suerte, yo si me había informado.
-La idea la saque de un producto parecido que se vende en los Estados Unidos y que es muy popular entre los jóvenes, parejas y familias con niños pequeños. En cuanto al estudio del mercado coreano, mi equipo hizo encuestas y entrevistas a varios sectores de la sociedad y los resultados demostraron que estaban interesados en un producto como este. Muchos dijeron que sería un alivio porque les permitiría tener una bebida dulce y refrescante en sus hogares para ocasiones especiales.- dije triunfantemente. La sonrisa del jefe Lee se desvaneció al ver las estadística que se presentaban en la diapositiva. Así que 1-0 iba el marcador.
-Bueno, parece una idea muy buena pero aún así arriesgada. ¿Qué te parece si te damos tres meses para que la tengas lista para presentarla en el evento de aniversario de la compañía?- Eso si que había sido un golpe bajo, él sabía que todos los productos nuevos al menos tardaban seis meses en poder salir al mercado y me pedía que lo mostrase en el aniversario de la compañía. Sin duda alguna esperaba que renunciase a la idea y que me diese por vencido, pero no lo haría. Si tenía que trabajar hasta tarde por los próximos tres meses, lo haría, pero nunca le daría la satisfacción a ese viejo de verme rendirme.
-Muy bien, tres meses serán más que suficiente.- Con eso la reunión terminó y todos se fueron a sus labores. Yo regresé a mi oficina pensando en cómo me había metido en este lío y que más vale que mi valentía no fuesen puras palabras.
-¿Acaso vistes como te miraba el jefe Lee? Estaba buscando humillarte frente a los demás ejecutivos y ¿qué es eso de tres meses? Él sabe muy bien que esto no se puede apresurar.- dijo un furioso Sunghoon. Lo amaba por querer defenderme, pero tenía que mantener la mente fría si quería vencer al oponente.
-Cariño.-dije en voz baja para que solo él me pudiese oír.-Sabes muy bien que el jefe Lee no me tiene ningún aprecio, desde el primer día ha querido deshacerse de mí para obtener mi puesto. Ya estaba seguro de que algo como esto pasaría.-le respondí.
-¿No puedes hablar con tu abuelo? ¿Al menos decirle lo que está sucediendo para que intervenga con el jefe Lee?-
-Hoon, sabes que no puedo hacer eso. Hacerlo sería admitir que estoy derrotado y que simplemente tengo este puesto por ser el nieto del dueño de la compañía. Quiero ganarme mi lugar por mis propios méritos.-
-Lo sé, pero aún así me enoja ver como te amenaza y se regocija de intentar hacerte quedar mal.- Aw, que tierno es cuando intenta defenderme. Sé que quiere lo mejor para mí y por eso sé que todo estará bien. Así que le cogí la mano y lo acerqué a mí para poder mirarlo a los ojos.
-Hoon, todo lo que necesito es a ti a mi lado, contigo, sé que puedo lograr todo lo que me proponga.-le dije.
-Siempre estaré a tu lado.- respondió.
-Ahora, nada de caras largas que esta noche es nuestra primera cita y ya lo tengo todo planeado.-
-¿Cómo es posible que hayas planeado nuestra cita y también la presentación?-
-Por eso soy el jefe.-dije en un tono burlón que me ganó como respuesta el que Sunghoon virase los ojos antes de salir de la habitación.
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Solo tú
Fanfiction¿Y si las cosas hubiesen sido diferentes? Si la respuesta a aquella pregunta hubiese sido una mentira? Creí que eramos solo amigos, pero tal vez somos más que eso. Esto es un fan fic del drama Business Proposal. No se aceptan copias.