Capítulo 11

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Luego de comer decidimos dar un último paseo por los alrededores del parque para luego regresar al apartamento cuando entonces lo supe, eso era lo que necesitaba.

-Sunghoon, eres un genio. Gracias por traerme aquí. Vamos a casa ahora.- le dije y lo tomé de la mano para salir corriendo al estacionamiento. En todo momento él me miraba confundido, pero no decía nada. Extendí la mano para que me diera las llaves del auto y muy pronto ya estábamos de camino al apartamento. Cuando llegamos corrí al apartamento, necesitaba sacar la idea de mi sistema antes que la perdiera, por eso no había hablado desde que salimos del parque. Entramos en el elevador y tan pronto las puertas se abrieron, salí disparado hacia el apartamento de Sunghoon. Puse el código, 1225, nunca lo olvidaría porque es la fecha de mi cumpleaños. Aún recuerdo la primera vez que Sunghoon me dijo cuál era el código. Ya llevábamos una semana yendo y viniendo de los apartamentos del otro y se me habían quedado unos papeles en el suyo. Él no estaba cuando llegué así que lo llamé y le pedí que me diese el código para entrar. Cuando me lo dijo, me sonó a que ya conocía esos números, pero no le di tanto pensamiento porque andaba apurado para una reunión. A la tarde, cuando regresé al apartamento, volví a poner el código y me di cuenta que claro que sabía esos números, era mi fecha de cumpleaños. Sunghoon no me lo dijo, pero yo lo sabía, y no pude evitar pensar en lo tierno que era.

Una vez dentro del apartamento, encendí las luces y busqué la pizzara. También busque mi computadora y la encendí. Sunghoon entró a la habitación y se quedó parado mirándome mientras yo iba de un lado a otro hasta que no lo aguantó más.

-¿Acaso piensas decirme que sucede Tae Moo?-me preguntó. Fue en ese momento que levanté mi cabeza y con las ideas ya todas reunidas, me dispuse a explicarle todo. Fui a donde estaba, lo cogí de la mano y lo senté en el sofá mientras me dirigía al pizarrón.

-¿Recuerdas que la fecha límite del nombre y el logo del producto es ya y no teníamos nada?-Él asintió, pero se veía que estaba inseguro de por donde iban mis pensamientos.

-Esta mañana todavía no tenía un nombre, pero tuviste la brillante idea de llevarme al parque de diversiones y de así surgió el logo. Como esto es una bebida familiar y para que los padres pasen un buen rato con los niños, ¿porqué no llamarla Rollercoaster Smoothie? Rollercoaster es el nombre en inglés de montaña rusa. A su vez poner como una montaña rusa de logo y una familia en un vagón encima de ella. Eso es atractivo y divertido, y como los sabores son combinaciones de fruta, llamaría la atención. Ya hemos decidió en sabores como smoothie de fresa y banana, otro de ellos es el de piña colada y también tenemos unos de mango-piña. ¿Qué te parece la idea?- Me quedé mirándolo mientras él miraba el pizarrón y no decía nada. No soy una persona que busque segundas opiniones, pero las de Sunghoon siempre suelen ser acertadas y gracias a eso hemos podido librar varias batallas juntos. Por eso estaba un poco nervioso cuando no recibía una respuesta. Después de un rato que pareció una eternidad, pude ver que él abría la boca para decir algo.

-Me parece una buena idea, Tae Moo. Lo que te aconsejaría es que el envase sea transparente para que el color dependa del color del smoothie y sea más llamativo.- Era una excelente idea ya que entonces tendríamos envases de diferentes colores y como buen comerciante, sabemos que una buena apariencia atrae al consumidor. Así que una vez todo pensado, nos pusimos manos a la obra para crear las diapositivas y presentarlo mañana en la reunión de progreso. Claro está que además de eso, hicimos una videoconferencia con los demás empleados del equipo que eran los encargados del desarrollo del producto y los sabores. Ellos eran los expertos en todo lo que tenía que ver con alimentos mientras que Sunghoon y yo hacíamos todo lo relacionado con la comercialización. A eso de las diez de la noche ya teníamos la aprobación del resto del equipo al igual que la presentación terminada. Así que lo que restaba era descansar, por primera vez en cuatro semanas, nos íbamos a dormir en una hora decente. No nos quedábamos dormidos en la mesa de la sala de estar, sino que podíamos ir a dormir en un lugar más cómodo. Esto trajo una situación que no había ocurrido con anterioridad, dónde dormiría cada cual. Anteriormente no había problema porque alguno se quedaba dormido en la sala de estar y el otro se iba a la habitación o yo me quedaba despierto toda la noche, pero hoy no pasaría eso. Además esta es el hogar de Sunghoon no es como que tenga derecho a elegir.

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