XXIV

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Capitulo 24 "Jugada sale mal"

— ¿Ya te dije que estoy feliz de que hayas regresado a la universidad? —. Ni-ki quien desde que se lo tomó en la universidad hace una semana no lo dejaba en paz, estaba jugando con su cabello en el cesped del campus.

— Sí, mil veces y ya deja mi cabello que luego se pone feo —. Sunoo le dio un manotazo y se recostó otra vez en su mochila. Quería tomar aire después de la extenuante entrega que tareas atrasadas que había entregado. Se había pasado toda las semana entregando prácticas, trabajos, poniéndose al día y exponiendo, pero todo valía la pena. Solo necesitaba descansar.

Ambos observaron al alfa de Kim cruzar por el campus con sus compañeros de carrera, todos alfas pero el más destacado del grupo era el de cabellos oscuros con un perfil envidiable. Captaba con rapidez las miradas de todos los omegas y betas presentes en el ambiente y siempre provocaba que más de uno soltara sus feromonas inconscientemente. Para Sunoo era nuevo, él no pudo disfrutar su amor universitario debido a lo sucedido y aquello le cayó como piedra al zapato, molesto pero nada que no pudiera resolver. Sonrió con aires de grandeza. CLARO QUE EL ALFA ERA ATRACTIVO. Pero era suyo.

Ni-ki detectó los celos de Sunoo y sabía que algo tenía planeado, se tiró de espalda al grass sintético esperando por la acción del pelinegro. El menor dio un vistazo a los omegas sentadas en una mesa bajo una sombrilla sonriendo coquetas y queriendo llamar la atención de los estudiantes de administración, sobretodo la de Sunghoon. «Claro que se ve sexy con esa ropa, yo la elegí y yo se la quito todas las noches»

Escuchó un murmullo de la mesa de las necesitadas de atención, iban debatiendo quien coquetería con el más guapo de administración, Park Sunghoon, y si lograban llevarlo a la cama. Solo el pensamiento le hizo querer vomitar e ir a tirarles de los pelos por desubicadas que veían a su alfa como un niño a un dulce.

— Lo que sea que vayas a hacer, hazlo rápido porque ahí va el primero — . Escuchó desde su espalda, un omega pequeño y delicado como una diamante se acercaba con una mirada coqueta al grupo de administración que conversaban amigablemente mientras esperaban a su amigo que pedía comida. Primero quería ver hacia quién iba, y acertó cuando lo vio observar a SU alfa, para luego establecer conversación con el grupo. Su novio estaba ignorándolo y seguía haciendo plática con quien conocía de nombre, Jay Park.

Separó los labios indignado porque el pequeño se sentó en la mesa con los alfas y jugueteaba con algunos como si fueran amigos ¿o era que sí eran? Pero Sunghoon no le había comentado sobre ningún omega amigo, y menos que se juntara con ellos. Frunció el ceño y se volteó hacia el alfa de diseño.

—Te dije que actúaras rápido.

—Ya cállate o te golpeo—. Refunfuñó y tomó su mochila, siendo seguido por el rubio. Caminó decidido a presentarse como el omega del príncipe de administración, hasta que cruzó mirada con su alfa quien le sonrió burlón. Un hastío creció en su pecho, él sabía que estaba celoso y le hacía gracia. Sunghoon siempre había sido consciente de lo que provocaba en los demás y tener a su omega presenciándolo le subía el ego, pero quería ser reclamado por el omega frente a todos. Por lo que esperó que el menor continuara su camino. Pero no lo hizo, en cambio el menor le sonrió de regreso y tomó la mano del alfa rubio, logrando que el castaño se tensé en su lugar y perdiera la conversación del omega que ni conocía.

Ni-ki estaba confundido pero le siguió el juego al menor ¿no se suponía que le haría una escena de celos a su alfa? El menor afianzó su agarre y sonrió en su dirección una mirada de complicidad. Él entendió el mensaje y sonrió devuelta, dándole una mirada a su hyung quien ya se veía irritado por la cercanía de los amigos. Sabía que eran solo amigos pero por su naturaleza territorial no podía evitar pensar que Sunoo era suyo y Ni-ki lo estaba invadiendo.

Roomie ; SunSunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora