40: Paz

63 6 0
                                    

Falta mucho tiempo para eso,puede que sea más tarde o más temprano,mientras me iba preparando sentí una presencia buscándome.
  
Preparé un rayo entre mis dedos y salte sobre la presencia.

—¡Ay! — mire mejor y solo era Tao que vino a darme una carta de Takeo,aunque por su miedo parecía que lo estaban amenazando a muerte para que lo haga.

—¿Quieres algo? — avergonzada le ofrecía té que aceptó con gusto.

Un rato después se calmo y termino si té,entonces me explico.

Takeo se había enterado que sus dos hijos mayores querían matarme así que organizo una charla para hacerles entender que matar a su medio hermana es ilegal y podrían ir a la cárcel por asesinato.

—Ya veo — me tomé mi tiempo mordiendo una galleta de chocolate,mire con discreción a Tao que parecía nervioso —¿Tao,siempre fue así?

—¿Así como?,si lo dices por nuestros hermanos no pasa nada...siempre fueron algo difíciles por no decir malcriados — se explico en voz baja temeroso de la vida.

—No,¿Tu siempre fuiste así? — cuestione.

El color se fue de su cara y de un blanco fantasmal cambio a un rojo intenso.

—Reiko y Zhen siempre fueron más fuertes que yo así que solo hago lo que me dicen — respondió atemorizado con la vista fija en el suelo.

—Okey,pero...¿No te gustaría ser fuerte?¿No te gustaría dejar de temerles a tus hermanos? — esa duda me invadió,aunque él tan solo tenía 14 años y Reiko y Zhen 15 años,así que debería aceptar el consejo de su hermana mayor.

«Aunque ya casi tengo 16,¡Dios mío!,el tiempo pasa volando,recuerdo como si fuera ayer cuando tan solo era una pequeña bolita de odió absoluto a la organización,ahora soy una gran bola de odió absoluto a la organización y a Gerardo,el tiempo hace milagros» reflexioné un poco para luego soltar una risa de burla nada disimulada.

—Pero si hago eso me matan — contradijo aún mirando al suelo.

—¿Eres idiota o te haces? — cuestione —¡No puedes temerle a unos idiotas toda la vida!¿Acaso tienes idea,tienes idea que es sentir cuando eres tan fuerte que ya nadie te molesta?

—¿Y tú cómo has de saber eso? — levantó la mirada del suelo y me miró directo a mis ojos —por lo visto tú nunca viviste como la sombra de alguien,jamás supiste lo que era llorar en los brazos de tu padre porque nadie se dió cuenta de ti,o peor,que te comparen con los talentos de tus hermanos y te pregunten,¿Y tú qué eres?,en frente de todo el mundo y no saber que responder.

—No lo comprendo pero puedo darme una idea — me cruce de piernas pensativa,nuestras situaciones eran similares,siempre fui la sombra de algo más grande,un objeto que cuando fue considerado inútil fue abandonada como si nada —aunque tú nunca lo tuviste fácil,tampoco puedo decir que tu vida fue una tragedia.

—Hipócrita — musitó con rabia.

—Puedes llamarme todo lo que quieras pero es verdad,siempre lo tuviste todo,puedes decir lo que quieras pero la verdad tu debilidad no te deja pensar con claridad — intenté provocar a Tao,provocar esa bestia interior que necesitaba ser liberada.

—¡Cállate! — gritó.

—Ves,frente a ellos no eres nada,pero internamente sí puedes — lo hice entrar en razón y miró al suelo estático.

Luego de varios minutos levantó la mirada y con un "lo pensaré" se fue.

Eso me dejó con más tiempo para estudiar,¿los vampiros al parecer son invencibles o que?,mientras más leía más confundida estaba.

Los Mestizos Y La Princesa Asesina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora