57: Motivos

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Todo era oscuro,infinito y...vacío...

Muere —

—Pudrete —

—¡Te odio! —

—Te mereces lo que está pasando —

—¡Ojalá y te maten! —
 

   

Las decenas de manos oscuras agarrando mis brazos y piernas,mi ropa,hombros,hacían todo lo posible para arrastrarme con ellos.

Una de esas manos me tapo la boca impidiendo me gritar,sus maldiciones contra mi,gritos desesperados de dolor y agonía.

Así que este es el fin,no pude lograrlo,el peso de los hombros sobre los demás incremento,al final nada valió la pena.

Pero...

Yo prometí no morir,caí en poco tiempo,entonces...¿Por qué?

Ya estaba muerta,pero no era posible,lo había prometido.

—¡¡Levántate!! — gritó Kuro desde la luz al otro lado.

—Ahg — chille cuando una mano me desgarro el brazo —duele.

—Debes hacerlo — grito parado sin hacer nada,sabía que está era solo mi lucha y que me ayudara no aportaría nada —¡Recuerda tu motivo de vida!

Logré liberarme para hablar,mire a Kuro que no se movió.

—¡A pesar de estar separados siempre fui feliz! — grité intentándolo hacer entrar en razón —¡Siempre fui feliz y ese fue el motivo de mi vida!

—Hermana...¡Tu puedes! — dijo volteando a la luz.

De repente sentí una desesperación por impedir que Kuro se vaya,a pesar de que las manos me arrastraban con ellas luche casi alcanzando a Kuro.

De repente las manos me arrastraron otra vez,mi motivo de vida estaba más que claro,quería vivir,pero no de esta manera. Soñaba con vivir como lo hacía antes,siendo una persona ordinaria,común y corriente.

Pero por otra parte sabía que no podía volver,por un momento pensé en dejarme caer en la oscuridad pero volví a pensar de manera racional.

«Necesito...¡No,quiero salir de aquí!» pensé determinada,luche contra las manos que me retenían logrando librarme de la mayoría...

...

Necesitamos darle más veneno — Alex se escondió junto con Mei y Fa para idear algo mejor.

—Lo puedo distraer,Alex,necesitamos que por lo que más quieras no mueras — Fa se levantó y corrió a dónde Gerardo.

Él se deslizo por el hielo que el mismo creaba atrapando a Gerardo que rompió el hielo y fue detrás Fausto,este lo esquivaba como un juego de niño.

Alex suspiró y creo una cortina de humo para luego clavarle el cuchillo en el pecho,el cuchillo bañado en el veneno que Rumiko hizo y su propia sangre.

«Esto debe de ser suficiente para acortar su tiempo de vida» Alex hizo los cálculos y entonces solo tendría que aguantar 45 minutos...

...

Pero de repente sentí como algo frío atravesado por el estómago,no se cuándo le dió tiempo de sacar el cuchillo de su pecho y clavarme el cuchillo a mi.

Preso de pánico y saque el cuchillo y rece para que la herida se cure...

...

Logré liberarme de la oscuridad,y corrí a la luz,el calor de la luz me relajo pero seguí caminando,mi hermano me seguía por detrás con una sonrisa.

Pero seguí adelante,hasta que la luz fue tan brillante que cerré los ojos,el brillo disminuyó hasta que pude abrir los ojos. Me encontré con uno de los dioses,no sé cuál es pero él sonrió con un espejo en manos.

—Este espejo es especial — hablo con serenidad.

Pero mire mi yo pasada,cuando era Rin,me sorprendí pero enfrente al Dios,se vio sorprendido al principio pero sonrió de amenra enigmática.

—¿Cuál de los tres eres? — pregunté.

—Soy un Dios — soltó una carcajada de manera burlona —el Dios que sea no importa.

Dejó el espejo en un lado y se acercó a mi haciendo movimientos exagerados y muy mal coordinados.

—Si importa — dije —¡Quiero saber quién eres!

—Soy la representación de la vida — sonrió dejándome solo claro quien era —soy un buen jugador del escondite.

—Edes, necesito volver, necesito pelear — me puse de rodillas y le reze,nunca me había puesto a rezar pero... —necesito luchar.

—Me lo pides como si me fuera a negar,pero necesito un favor tuyo — Edes no perdió ni un segundo y sonrió.

—¡Lo que sea! — exclamé,de repente Edes mi limpió las lágrimas,no me había dado cuenta que estaba llorando.

—No vuelvas a ponerte en peligro — sonrió arrodillándose a mi lado —se que no he sido muy amable contigo pero tampoco soy tan malo.

—Lo se,lo se,no lo puedo prometer por completo pero intentaré vivir — sonreí agradecida con Edes...

...

Lamentaba no poder luchar, escondido en la oscuridad de un callejón intenté detener el sangrado,llorando de la desesperación  limpie las lágrimas y tosí sangre.

«¿Que hago ahora?» cuestione,morir en un callejón a oscuras y en medio de una batalla no es muy bueno.

«No quiero ser otra víctima de él,quiero vivir,deseo llegar a tener una larga vida...» la desesperación me abrumaba,lo irónico es que antes quería morir.

—Alex,mente fría,Alex,mantente concentrado,Alexandru,recuerda que te llevo a esto — susurre calmando un poco la situación,por lo menos había vendado la herida con mi abrigo —Alexandru,ese soy yo...

...

Abrí los ojos,lo primero que sentí fue el dolor,luego la sensación de volver a respirar con tranquilidad. Me levanté y busque alrededor,pero el corazón se me cayó a los pies cuando ví la destrucción de la ciudad frente a mis ojos.

Las casas se habían convertido en cenizas y las gente estaba huyendo,solo unas pocas casas quedaban en pie,corri a la ciudad.

«¿Cómo fue que llegamos a esto?» la crueldad del alrededor no me sorprendió.

—¿Alex? — pregunté a una sombra familiar,solo ví sus alas,no entendía que pasó —¡Alex!

Los Mestizos Y La Princesa Asesina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora