✦ ZeYu - Ocean Eyes ✦

capítulo 43

[Etapa 3 - Negociación]

ZeYu se quedó callado ante mis palabras, sé que sonó duro, pero en cierto modo era cierto.

No sabía que me había atraído de él, aún sabiendo que era la peor persona de la cual enamorarse. 

Pero el amor es ciego ¿no?

Sabía que la situación en sí era mi culpa, pero nada habría sucedido si él hubiera pensado un poco y tirado o roto la carta. 

Oh, esa carta.

Esa estúpida y desgraciada carta. 

Ojalá nunca se la hubiera dado.

T/N: -suspiré- Lo siento, nunca quise que pasara esto.

ZeYu: Es tarde para pensar eso, ambos estamos en problemas ahora. 

T/N: Yo... No quiero perderlos, a ninguno, ni a los chicos ni a tu novia, sé que tendré que hacer mucho para arreglar esto pero lo haré sin problemas.

ZeYu: Bonita, eso será muy difícil -se me acercó-

T/N: ¡No me llames así! Se que es difícil pero tienes que ayudarme -pedí- 

ZeYu: Sabes que siempre te quise mucho, pero creo que las cosas deben parar aquí. -me miró y salió del lugar- 

No. Esto no podía terminar así...

Pero al parecer no había más que hacer. 

Lo perdí, los perdí a todos, ¿era posible perder tantas personas importantes en un día?

Me sentí tan mal, no podía terminar de creerlo, pero sabía que era momento de aceptarlo, por el bien de ambos. 

El resto del día, tuve que vivir ignorada por las personas que más quería.

Incluido ahí alguien que yo no esperaba. 

Si bien en el segundo receso me la pasé con mis otras tres amigas, nada podía animarme.

No podía creer todo lo que habían causado mis sentimientos. No es mi culpa haber caído por la dulce personalidad de Yu, mucho menos de haber quedado hipnotizada con su belleza.

Pero si es mi culpa el no haber amado en silencio. 

Y sí, a veces es peor guardarte el amor, pero las consecuencias de abrir tu corazón...

Ni hablar.

Mientras me dirigía a la salida, me encontré a Mei, al parecer ella no me ha visto aún.

Dudé un par de segundos si hablarle era una buena opción, pero en serio tenía que disculparme. 

¿Qué debía hacer?

Una vez lo hube pensado bien, decidí irme sin molestarla, pero hice ruido con mis zapatos, a lo cual ella volteó. 

Me miró, sus ojos cambiaron de tranquilos a llenos de rabia. 

Mei: ¿Qué haces aquí? -preguntó-

T/N: Nada, yo... Yo ya me iba -contesté intentando ignorar mis ganas de explicarle todo-

Iba a irme sin más, pero no se sentía correcto.

Debía pedir perdón, así que volteé.

T/N: Mei, quiero decirte algo.

Mei: ¿Ahora qué? -suspiró cansada- 

T/N: Mira, de verdad siento much...