Tentaciones ✔️

Capítulo 22

Eva

Observé todo el lugar y solo había escombros, los bomberos estaban buscando entre los escombros si había algún rastro de personas atrapadas bajo la rutina del edificio, pero no había nadie, todos habíamos alcanzado a salir, afortunadamente.

Derlon estaba dando instrucciones a los soldados para que se fueran a la central y protegieran a Brandon, después de lo del atentado no podían descuidarlo, era blanco fácil.

Caminé hacia Derlon y me planté frente a él.

—Necesito ir a la central, tengo que hablar con Brandon.

Con frustración se frotó el tabique mientras me observaba fijamente.

—Ahorita no es tiempo de andar en amoríos, señorita Smirnova, Brandon está bajo protección de la Marina ya que por si no se dio cuenta un psicópata se quiere deshacer de él. Así que amablemente le voy a pedir que se retire de aquí y vaya para su casa a descansar.

Este tipo era tan nefasto que no dudaría dos veces en abofetear su maldito rostro.

—No me voy a ir sin haber hablado con él—dije con furia—. Le guste o no voy a ir a verlo, señor.

—Daré la orden para que no la dejen pasar.

Paciencia.

—Haga lo que quiera, igual siempre consigo todo lo que quiero—Le guiñé el ojo y me dí la vuelta corriendo hacia la autopista central.

Estiré mi mano alcanzando un taxi y subiéndome con  rapidez, le dí las indicaciones para llegar a la central, una vez llegué allí me di cuenta que el lugar estaba repleto de hombres con uniforme azul oscuro, eran demasiado altos.

Caminé hacia ellos con postura recta y mentón en alto para que supieran que no le dejaba intimidar con facilidad.

—Trabajo aquí, necesito entrar.

—No—contestó uno de ellos.

—Es enserio, necesito hablar con el General.

—¿No entiende que estoy diciendo que no?

—Y yo le estoy pidiendo amablemente que me deje ver al general, porque es un maldito asunto de vida o muerte.

—Y eso a mi no me importa, devuélvase por donde vino y déjenos hacer nuestro trabajo.

Bien, perdería aquí la maldita paciencia.

—Nos vemos más tarde—Sonreí alejándome de la central y desviando el camino por un callejón que daba hacia mi oficina, tenía que escalar.

—Bien, lo haremos—Murmuré para mí misma quitándome los tacones.

Observé algunas ventanas que estaban abiertas y comencé a treparme con cuidado de no caerme, suspiré profundo siguiendo el paso hasta que llegué a mi oficina. Abrí por completo la ventana y me tiré hacia el interior del lugar, las luces estaban apagadas así que estaba un poco oscuro, pero se podía ver entre las penumbras del sitio.

Abrí la puerta saliendo de la oficina para ir a la de Brandon, pero estaba vacía, no estaba allí.

Si no se encontraba en la oficina, estaba en la habitación de pánico.

Bajé las escaleras llegando al primer piso hasta llegar al final del último pasillo, alcé la alfombra y encontré la puerta que estaba oculta. Giré la materia que estaba hacia un lado y puse el código que tenía sonando en mi cabeza desde que Brandon me lo enseñó. La puerta se abrió por completo y bajé las escaleras cerrando con seguro, una vez estuve dentro las luces se encendieron y me encontré con Brandon, Sylvia, Mariah y Stoner.