ᝰ 10

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Ya era hora de salir así que como habían quedado anteriormente Hyunjin estaba esperando por el menor fuera de la escuela. Alumnos salían y pudo observar a muchos de ellos, algunos tristes solitarios y otros felices acompañados, se preguntó cómo se miraba él a los ojos de los demás. Sus pensamientos fueron interrumpidos al observar a un castaño que se acercaba a él sonriendo a quien se encontrara y viéndolo se dio cuenta que el menor podía brillar mucho por cuenta propia y eso era asombroso.

- ¿Cómo sigues? - fue lo primero que preguntó el menor al llegar a su lado.

- Me siento igual, vamos a mi casa y ahí tomaré algo.

- ¿Estás seguro de que quieres que vaya? posiblemente te sientes mal.

- Yang si no quieres ir solo dímelo.

¿Por qué suena molesto? Pensó Jeongin.

- Quiero ir contigo pero también quiero que descanses lo necesario, no me gustaría que te pusieras peor, porque me preocupas y si... - Jeongin detuvo sus palabras al notar la mirada que recibía por parte del otro.

¿Por qué se preocupa tanto por mí? Minho y Changbin ni siquiera notaron que estoy por enfermarme. Sus pensamientos fueron en aumento.

- Estaré bien, solo quiero que conozcas a Kkami.

Palabra clave, Kkami fue lo que Jeongin necesitaba escuchar para que sus ojitos brillaran como si estuviera a punto de conocer a un ser divino.

- Sí, hablaré rápido con mi mamá para avisarle y nos vamos, no hay por qué perder el tiempo verdad - Jeongin sonaba tan emocionado.

EL menor sacó su celular y se dispuso a marcarle a su mamá.

- Mami linda, quería pedirte permiso para ir a la casa de Hyunjin y conocer a Kkami, ¿puedo?

- No me digas que por fin están saliendo, Jeongin por qué no me lo habías contado, yo te di la vida.

- No mamá, solo vamos a estudiar.

- Ajá estudiar, ¿sabes lo que yo hacía con tu papá cuando le decía a mamá que iba a estudiar?

Al escuchar tal cosa no pudo evitar que sus mejillas se tornaran de un color rojizo por la vergüenza de imaginar en una situación muy íntima a él y su mayor. Hyunjin pudo notar el sonrojo de Jeongin y le hizo señas preguntándole si estaba bien por lo que el menor solo asintió.

- Mamá no es lo que piensas, así que ya sabes que llegaré en la tarde. Nos vemos luego no quiero hacer esperar más Hyunjin.

- Ay no hijo, no hagas esperar a mi yerno, seguro ya estás muy rojito. Te dejo mi vida.

Y con un beso tronado a través del teléfono Jeongin se despidió de su mamá. Cuando Changbin le había dicho que era muy obvia su atracción hacia su mayor no mentía, su mamá se dio cuenta los primeros meses y a pesar de no estar muy convencida de que su hijo accediera a ese trato lo apoyó pues sabía que con el tiempo el famoso Hyunjin podría gustar de su niño.

- Listo hyung, vámonos.

Los dos se dirigieron al auto del mayor en medio de una divertida plática, ante las atentas miradas de todos, incluso de sus amigos, aunque no habían puesto atención a ello. Pasaron a una farmacia por unas pastillas para el más alto y al llegar a casa y abrir la puerta, el sonido de unas patitas acercándose sonaron.

Era Kkami, era tan lindo como en la fotografías y a pesar de que era muy serio con las nuevas personas Jeongin pudo ganar su confianza rápidamente por lo que estaban en la sala de la casa del mayor jugando mientras él tomaba su medicamento.

consigue un novio pɑrɑ mí ✧ hyuninDonde viven las historias. Descúbrelo ahora