꧁꧅ 𝓗𝓮𝓻𝓶𝓸𝓼𝓪 𝓬𝓸𝓲𝓷𝓬𝓲𝓭𝓮𝓷𝓬𝓲𝓪 ꧅꧂
No podía creerse que llevará dos meses ya siendo amiga de Mirio, se sentía tan feliz de que al fin haya encontrado un amigo que la querían mucho, y le emocionaba saber que ese cumpleaños no lo pasaría sola, sino acompañada de ese chico que cada día la hacían reír con sus locuras, la pasaría con el chico que le gustaba y que no podía dejar de pensar en él; había aceptado que Mirio le gustaba y que al ponerse molesta al verlo con alguien era por sus celos que ya supo controlar muy bien
Aún no le dice nada porque no quiere ser rechazada, sin embargo tarde o temprano tendrá que decírselo y quizás lo haga cuando vayan al acuario esa tarde como Mirio le había prometido que irían por su cumpleaños, tenía tantas cosas que decirle que no sabía por cuál comenzar, aunque si quería decirle lo que sentía debía de comenzar por dar indirectas, ¿O cómo se supone que debería de ser?, No tenía idea de cómo decírselo era la primera vez que alguien le gustaba y no tenía idea de cómo decirlo, además ¿Que dirá Mirio cuando se lo diga?, Un rechazo es todo lo que espera, aunque eso lo verá cuando se lo diga
Salió de la habitación ya lista y con unos terribles nervios que la estaban matando, tomo a su pequeño Tommy y le pidió que le diera suerte, a lo que el gato sólo maullo como si le hubiera entendiendo y en realidad le hubiera dado esa suerte que deseaba la castaña, sonrió dejando al gato en el suelo después de darle un pequeño beso sobre su cabecita y se sentó en el sofá a esperar a Mirio, su padre quien estaba a su lado le dió un abrazo sin poder creerse que su pequeña ya tenía 20 años
La castaña sonrió correspondiendo el abrazo de su padre y se dejó llevar por el lindo momento que estaba teniendo con su padre olvidando a Mirio, hasta que escucho el claxon de su auto sonar, se despidió de su padre y salió de la casa emocionada, Ian sólo soltó un suspiro pensando que debía de dejar que se divirtiera, debía de soltarla al fin pues ya no era una niña y sabía que Mirio le gustaba pues podía notarlo en su mirada cada vez que hablaba de él o cada vez que le tocaba revisión con él, no podía negar que su pequeña se había enamorado al fin
La castaña saludo a Mirio con una sonrisa que él le devolvió, bajo del auto y le entrego un ramo de rosas hermosas, con una caja de chocolates y una caja que la abrió por ver a Mirio emocionado pidiéndole que la abriera, y con una gran sonrisa la abrió observando que en ella se encontraba una hermosa cadena de oro que llevaba su nombre, miró a Mirio sin poder creer que fuera una hermosa cadena con su nombre y emocionada le dió un abrazo agradeciéndole el hermoso detalle
—No debiste de hacerlo —dijo al separarse de él mirando la cadena
—Lo mejor para mi mejor amiga, es tu cumpleaños déjate consentir
—Jaja bien, gracias Mirio
—De nada, ¿Te la pongo?
—Por favor
Mirio sonrió tomando la cadena y se la colocó aún sin borrar su sonrisa, le quedaba muy bien y se veía más hermosa de lo que ya era, más saco esos pensamientos de su cabeza y le abrió la puerta del auto para que pudiera entrar y dirigirse al acuario, la castaña le pidió esperarla un momento para dejar sus regalos en su habitación, Mirio asintió y la vio ingresar a su casa, soltó un suspiro mirando el cielo azul con algunas nubes, un perfecto día para salir con ella, ¿Desde cuándo no ve los días tan hermosos?, Ese día era especial aparte por ser el cumpleaños de la castaña, no sabía lo que era pero ese día era aún más hermoso que los anteriores
Cuando finalmente bajo la castaña subió al auto de Mirio y este subió después, colocó un poco de música y se dirigió hasta el acuario preguntándole a la castaña que le gustaría hacer después de ir al acuario, ella no lo sabía pero quizás después se le pueda ocurrir algo, y tenía que ser después de decirle lo que siente a Mirio.
ESTÁS LEYENDO
𝓗𝓮𝓻𝓶𝓸𝓼𝓪 𝓬𝓸𝓲𝓷𝓬𝓲𝓭𝓮𝓷𝓬𝓲𝓪 ~ 𝓜𝓲𝓻𝓲𝓸 𝓣𝓸𝓰𝓪𝓽𝓪 𝔂 𝓽𝓾
FanfictionHaru _______ siempre ha sido una chica muy alegre, siempre llenando de felicidad a los demás, pero con problemas de salud, casi toda su vida se la ha pasado en el hospital debido a su enfermedad, creyendo que nunca conocería a alguien que pudiera qu...