11 | LO QUE MATÓ AL GATO

140 18 3
                                    

-¿Qué haces levantado? Sentí que había mucho espacio en la cama y me desperté.

-Lo siento, Ani, solo tuve una idea.

-¿Y para qué miras un mapa y el periódico? No importa a dónde huyas, te encontraré.

-No es eso. Busco propiedades. Quiero que nuestro bebé crezca en una casa grande en un bonito barrio.

-Creí que te gustaba mi departamento de un cuarto en el sector más barato de Londres.

-Me gusta cualquier lugar que venga contigo adentro.

-Buena respuesta.

          
         
        

    

      

──────── ✪ ────────   
𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 11 :
LO QUE MATÓ AL GATO

──────── ✪ ────────   𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 11 :LO QUE MATÓ AL GATO

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


            

─ ¿Qué le pasa a Potter? ─ Preguntó Anthony, su voz temblaba al igual que todo su cuerpo.

─ Creo que no puede ver nada con sus anteojos mojados. ─ Dijo Olivia mirando al muchacho, mientras descendían. El capitán de Gryffindor había pedido un tiempo muerto.

Una vez que sus pies tocaron el suelo, se dio cuenta de que casi no los sentía. Hacía mucho frio, y estaba completamente empapada por la lluvia.

─ Voy a morir de hipotermia antes de que alguno encuentre la snich.

─ Gracias por tu fe, Livy. ─ Dijo Cedric bebiendo del termo que le ofrecieron. ─ Muy bien, escuchen...─ Empezó a darles indicaciones, que básicamente eran reiteraciones de lo que hablaron antes del partido.

─ ¿Quién es esa? ─ Le preguntó Anthony a Livy.

─ Grenger, la amiga cerebrito de Potter. ─ Dijo viendo a la encapuchada acercarse al equipo de Gryffindor. ─ Parece que le está haciendo un encantamiento a los anteojos de Potter

─ Debe ser para repeler el agua.

─ ¿Están escuchando? ─ Les habló Cedric molesto.

─ Creo que perdiste tu ventaja con Potter. ─ Dijo Anthony.

─ Mejor, así el juego será más justo. ─ Cedric siguió dándoles instrucciones ignorando a Olivia y Anthony, que rodaron los ojos exasperados.

─ Tu novio es como una tarjeta de felicitaciones viviente.

─ Y que lo digas. ─ Respondió bebiendo de su termo, casi se atragantó cuando se dio cuenta de lo que dijo. Le susurró molesta. ─ ¡Espera! No es mi novio.

Olivia Black 𝙸 [Cedric D.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora