Olivia Black 𝙸 [Cedric D.]

12 | Á N I M O

-¡Mirá este lugar! Sirius, es perfecto.

-La inquilina anterior tuvo una panadería de poco éxito. Dicen que su pan era como piedra. Nos venderá sus máquinas a muy buen precio.

-¿Y el alquiler?

-No habrá alquiler. Esta propiedad es tuya. Arriba hay un gran departamento de dos pisos, si quieres ver.

-¡¿Qué?! ¿Estás loco?

-Loco de amor por tí. - Dijo tocando el abultado vientre. - Quiero asegurar el futuro de ustedes, si algo me pasa...

-Sirius ¿Qué te puede pasar?

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𝓒𝓪𝓹𝓲𝓽𝓾𝓵𝓸 12 :
ÁNIMO



─ ¿Segura que estás bien? ¿La enfermera te revisó la cabeza? ─ Le preguntó Anthony cuando salieron de la enfermería.

─ Sí, sí. ─ Respondió Olivia cabizbaja, su cara larga preocupaba aún más a su compañero. ─ Solo quiero ir a la cama.

Caminaron en silencio hasta la entrada de la sala común. Livy estaba a punto de golpear el barril, la forma de entrar era golpeándolo al ritmo de Hufflepuff, pero él se lo impidió deteniendo su mano.

─ Mejor, lo hago yo. No me apetece bañarme en vinagre. 

─ ¿Crees que lo haré mal? ─ Dijo desafiante, a ella no le gustaba que la subestimaran.

─ Con tu ánimo actual, tal vez.

Olivia golpeó el barril mirándolo desafiante, y sonrío cuando la puerta se abrió.

─ Tu baño en vinagre tendrá que ser otro día. ─ Anunció riendo.

─ Parece que estás de mejor ánimo. Supongo que no eran las heridas lo que te afectó.

─ No seas metiche, Tony.

─ ¿Tony? ─ Preguntó sorprendido. ─ ¿Ahora somos amigos?

─ Me salvaste de darle una explicación al profesor Flitwick. ─ Explicó mientras se inclinaban para pasar por la puerta redonda de hobbit. ─ Por cierto, te debo una, gracias.

─ Comienzo a pensar que realmente te debiste haber golpeado la cabeza.

─ ¡Sólo acepta mi amabilidad! ─ Lo golpeó en el hombro riendo.

En la sala común, había muchas personas, seguramente hubo algún festejo por ganar el partido.

─ Me llaman mis amigos. Nos vemos luego, Livy. ─ Dijo enfatizando lo último.

─ Adiós, Tony.

─ Livy ¿Dónde has estado? ─ Bonnie se le acercó molesta, estaba junto a Cedric y Tessa. ─ Te hemos buscado por todos lados antes de que la profesora Sprout nos dijera que te lastimaste buscando la escoba de Harry.

─ ¿Estás bien? ─ Preguntó Cedric.

─ Sí, solo un esguince en el tobillo y un hombro dislocado. Nada que la enfermera no pueda arreglar fácilmente.

─ ¿Cómo pasó eso?

─ Ya saben... ─ Miró al rededor para que ellos entendieran la indirecta. ─ Tropecé encima de una roca.

─ Qué bueno que no fue más grave. ─ Dijo Cedric y las demás asintieron.

─ ¿Has visto a Harry? ─ Tessa intervino para cambiar de tema.