Profesor.
Salí de la facultad con ganas de divertirme esa conversación con Anneliese hizo que tuviera a punto de cometer una locura pero no podía exponerme de esa manera, fui a mi apartamento y me cambié de ropa algo más elegante, salí y anduve caminando sin un rumbo fijó hasta que entre a un bar y ví a Luisa pero no logré reconocer a su acompañante entre decidido a esperar que se fuera para divertirme con ella yo sé que le atraigo y no se va a resistir a una invitación mía, me senté en una mesa que daba de frente a ella pero su acompañante me daba la espalda pedí una botella de vino, al pasar 20 minutos ya la botella se había acabado y tenía dos chicas en mi mesa coqueteando me pero a veces miraba a Luisa que vestía muy provocativamente dí otra de mi mirada cuando su acompañante volteó y me di de cuenta de que era Annelise en ese momento casi me ahogó con el vino ella se levantó de dónde estaba sentada, despedí a mis dos acompañantes, se acercó y se sentó justo delante de mi.
- Profesor no esperaba encontrarlo en un bar.
- Y yo mucho menos señorita no es usted menor de edad?
- Sí pero con una identificación de la universidad que no dice mi fecha de nacimiento me dejaron entrar.
- Usted no parece que tuviera 16.
- Entonces que edad pensó que tenía la primera vez que me vió?
- Seré sincero yo creía que usted tenía 14 años señorita.
- Eso ya es una ofensa pero que venga de usted lo pasó, me podría invitar una copa de vino?
- Sí hago eso me meteré en serios problemas señorita.
- No se preocupe yo me echaré la culpa de todo.
- Solo con esa condición.
Luisa se acercó a nuestra mesa y se despidió de Annelise me pidió que la cuidara mucho y le prometí que lo haría después de que Anneliese se tomará varías copas de vino comenzé a preguntar cosas personales ya que en la mañana siguiente no iba a recordar nada.
- Señorita cuénteme sobre sus padres porfavor.
- Mis padres divorciados, vivo con mi papá que es policía pero se la pasa en el trabajo porque el asesino anda suelto y su jefa lo quiere en la cárcel lo más rápido posible.
- Y en donde vive usted señorita?
- En el vecindario de las personas que tienen dinero creo.
- Ya sé de cuál me habla usted y en qué casa vive?
- En la única casa blanca que hay en ese lugar.
- Señorita puedo hacerle preguntas un poco más personales?
- Porque no me dice Annelise todo el tiempo me dice "usted" o sinó "señorita"
- Es como que usted dejé de decirme profesor no lo cree?
- Tienes razón.
- Pero a hora responda a mi pregunta porfavor.
- Sí profesor usted puede hacerme todas las preguntas que quiera pero porfavor sea directo porque en estos momentos no creo poder adivinar acertijos.
- Está bien, señorita es usted virgen?
- Yo? Claro que lo soy lo único que me importa en esta vida es estudiar.
- Me recuerda a mi a su edad.
- En serio? Que casualidad.
- Y dígame a qué hora llega y se va su padre de la casa?
- Siempre sale temprano pero antes me deja en la Facultad y llega muy tarde lo más temprano que ha llegado a sido a las 10.
- Que triste que no pueda pasar mucho tiempo con su padre.
- Lo sé pero las clases me mantienen muy ocupada.
- Por cierto ya es un poco tarde no debería irse a su casa seguramente su padre debe estar preocupado señorita.
- El trabaja toda la noche hoy además mañana es sábado el llega a la casa a las 11.
- Pero igual debe irse, yo la llevo hasta su casa voy a buscar mi auto al estacionamiento de mi residencia y regreso no se valla a mover porfavor.
- No yo voy con usted no me deja aquí sola.
- Está bien voy a pagar y la llevo hasta su casa.
Pague la cuenta y nos fuimos del bar pero Annelise insistió en ir a mi apartamento a buscar el auto pero no llego a la puerta del estacionamiento cuando se callo la levanté y la cargue hasta mi apartamento la dejé sobre mi cama me cambié la ropa a una más cómoda, me puse unos pantalones pero cuando fui a mi recámara a buscar una camisa Annelise se despertó y me vió.
- Profesor usted se ve muy bien sí camisa.
- Señorita usted está bajo la influencia del alcohol así que porfavor recueste se un rato y descanse.
- Ya le dije dígame Annelise.
- No puedo usted es mi estudiante y yo soy su profesor.
- Y sí no fuera su estudiante que pasaría, me llamaría por mí nombre?
No respondí a su pregunta, anduve buscando mi camisa pero me di de cuenta de que estaba encima de la cama me acerque, pero Annelise la tomó y no me la quería devolver forcejeamos un poco pero terminé encima de ella me aleje pero mi cuerpo no quería alejarse de ella, me levanté de la cama y camine hacía la puerta.
- Profesor no se valla.
- Me iré si no me devuelve la camisa señorita.
- Está bien hay está.
En el momento en que iba a tomarla Annelise me sujetó por los hombros y me hizo perder el equilibrio y caer encima de ella de nuevo se acercó a mi y me beso no quería detenerme pero me aleje.
- Me retiró señorita usted necesita descansar con urgencia.
- Profesor porque usted es tan estricto? Solo fue un pequeño beso.
- No pensaba que fuera usted cómo las demás chicas señorita.
- Tiene razón soy diferente creo que le debo una disculpa a mi profesor, porfavor perdone mi comportamiento inadecuado y gracias por traerme a su apartamento a hora voy hacer lo que usted me pidió voy a descansar un rato, sí es usted tan amable de apagar la bombilla porfavor.
- Está bien señorita.
Apague la bombilla y cerré la puerta me acosté en el sillón pero no podía dormir, los acontecimientos de hace un momento rondaban mi cabeza, la tenía en mi habitación, sí yo quisiera la haría mía podría ser el primer hombre en su vida pero eso arruinaría mi diversión porque si hago eso tendré que matarla y ese es un precio que no estoy dispuesto a pagar.
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Obsesión Mortal
Roman d'amourUn profesor de 25 años acostumbrado asesinar a estudiantes, le afectará la llegada de una nueva alumna, Anneliese una chica de 16 años que se muda a una nueva ciudad con clima lluvioso conocerá al profesor Max quien se enamora de ella hasta el punto...