Obsesión Mortal

Capitulo 26

Ya ha pasado una semana y el profesor Máx aún no me ha llevado con mi padre, pero alguien interrumpe mis pensamientos salgo a ver quién toca el timbre tenía esperanza de que fuera Luisa o mi papá pero no fue así eran los amigos del profesor, sentía curiosidad por saber lo que decían así que me escondí detrás de la pared para poder escuchar un poco su conversación.

— Perro, rata quiero que maten al padre de Annelise.

— Porque quieres que lo matemos?

— Para que Annelise se olvide de su padre y no quiera irse.

— Ella ya sabe que tú eres el asesino de estudiantes?

— Aún no se lo he dicho.

No quise escuchar más me fuí corriendo silenciosamente hasta la habitación el profesor Máx les está diciendo a sus amigos que maten a mi padre, la teoría de Peter era cierta, el profesor Máx es el asesino de estudiantes, no puedo creerlo y yo que confíe en el.

— Annelise te ocurre algo?

— Tú eres el asesino de estudiantes, tu mataste a Peter, no mientas más.

— Escuchaste nuestra conversación?

— Sí y quiero irme a hora mismo.

— Eso no se va a poder, tú te quedarás aquí conmigo, tú eres mía, eres mi nueva droga, por ti no he matado estás dos semanas.

— Estás loco, eres 9 años mayor que yo.

— Eso no importa tú lugar es estar aquí a mi lado y aún que no quieras te vas a quedar.

— Pero quiero irme con mi padre.

— Olvídate de tú padre, porque muy pronto estará muerto.

Salió rápido de la habitación y me encerró en ella el solo iba a llevarme comida, en la noche dormía conmigo pero la puerta estaba cerrada, una vez intente quitarle la llave pero no puede, los días pasaron y no sabía sí mi padre estaba vivo o muerto,por más que le ruego al profesor Máx de que me deje ir, siempre me dice que no, no me maltrata, pero igual quiero irme, no se cuánto tiempo ha pasado pero solo se que son días, pero tengo un plan para escapar de aquí me voy a esconder debajo de la cama para que crea que me ido así saldrá rápido sin cerrar la puerta solo tengo que esperar a que salga de la cabaña.

— Annelise aquí está la cena, Annelise en donde estás? Annelise, mierda.

Mi plan funcionó a penas sentí que la puerta de afuera se cerró sin cuidado tomé una pequeña mochila que había escondido y en donde guarde un poco de comida, me fui hasta la sala, abrí la puerta y asome mi cabeza mira a los lados para asegurarme de que no había muros en la costa y comenzé a correr lo más rápido que estás piernas puedan correr, después de alejarme considerablemente de la cabaña empecé a caminar no se en donde estoy ni a dónde me dirijo.

Camina como por dos días ya en la mochila no me quedaba nada, hasta que a lo lejos vi una carretera así que comenzé a correr hasta llegar a ella, simplemente camine siguiéndola a ver a dónde me llevaba hasta que ví una gasolinera, entre y estaba un señor de barba algo blanca.

— No quiero indigentes aquí, fuera!

— No señor se confunde soy estudiante de la universidad y me secuestraron llevo días caminando.

— La secuestraron dice?

— Sí señor.

— Quién fue hija?

— El asesino de estudiantes.

— El asesino de estudiantes, ¿como es que sigues viva ? Esto es un milagro.

— Tiene algún teléfono en donde pueda llamar a mi padre?

— Te sugiero que llames a la comisaría.

— Sabe que lugar es éste?

— No te preocupes la ciudad está a dos horas de aquí.

— Está bien puede porfavor...

— Claro toma el teléfono y llama a la estación.

— Estación de policía.

— Discúlpeme pero necesito hablar urgente con el oficial Spencer.

— De parte de quien?

— Dígale que es de su hija.

— Es usted Annelise Spencer?

— Si señora soy yo.

— En donde estás a hora cielo?

— En una gasolinera a fuera de la ciudad.

— No te muevas de allí tú padre va para allá.

— Está bien solo deseen prisa porfavor.

— Dime el nombre de la gasolinera en donde estás?

— Gasolinera The Hope.

— Muy bien cielo solo quédate hay y oculta te mientras van para allá no querrás que tú secuestrador te vuelva a ver.

— Sí muchas gracias.

— Todo bien? Ya vienen para acá?

— Sí, me dijeron que me ocultara.

— Ven entra a mi oficina aquí nadie te verá pero podrás escuchar a todo el que entra y sale de la tienda, cuando escuches una sirena sales corriendo hasta a donde está la policía y si vienen preguntando por ti no te he visto, pero eso sí no salgas escuches lo que escuches, solo hazlo cuando sepas que es la policía.

— Está bien muchas gracias señor.

— Yo tenía una nieta.

— Y que le pasó?

— El asesino de estudiantes eso fue lo que pasó, ella fue la primera chica cuando cambió su preferencia para matar, pero gracias a ti se que lo van atrapar muy pronto.

— Lamento la perdida de su nieta.

— No te preocupes, haz lo que te dije así estarás a salvó.

El tiempo pasaba lento y sin un reloj era un martirio el no saber cuánto tiempo pasaba me senté debajo de un escritorio cuando escuché que alguien entro en la tienda.

—Buenas tardes señor en qué lo puedo ayudar.

— Ha visto a esta chica?

— No, pero es muy linda, porque la busca?

— Está desaparecida y su padre me contrato para buscarla.

— Claro un investigador privado.

— Me retiró cualquier cosa que sepa me avisa aquí está mi tarjeta.

El hombre se fue y estoy segura de que era un amigo del profesor.

Profesor

— Gracias a Dios que ustedes no se fueron de vacaciones.

— Fuimos y vinimos rápido al principio pero suerte que no nos quedamos.

— Porque no mataron al padre de Annelise?

— Nunca salía de la comisaría ni siquiera para darse un baño en su casa.

— Tienen que ayudarme a buscar a Annelise.

— Como se te escapó esa chica?

— De verdad que no lo sé pero hay que encontrarla antes que la policía.

— Tienes razón.

— Rata averiguaste algo?

— Pregunté en todas las gasolineras pero nadie la ha visto.

— No puedo ir muy lejos rata.

— Lo sé Máx pero ya no tenemos en donde buscar, al menos que sigamos buscando en el bosque.

— Lo que sea rata y perro pero hay que encontrarla rápido.