Capitulo 59

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POV CRISTIAN

-Teddy no hagas eso. Tus hermanos están durmiendo y deben descansar. Vamos a dar una vuelta al patio. A lo mejor, si tenemos suerte, podemos ver algunos conejos y también como van las cosas con la construcción de una granja- digo y el me mira fijamente.

Tiene la misma manía que su madre cuando su cabeza esta funcionando a mil por hora. A mi hijo mayor le gusta los libros y los animales. Dos cosas que mi mujer ama mas que nada y si fuera por ella, todos tendríamos ese vicio.

-papi, hay que lleval a Pho- dice y asiento.

-lo se. Vamos a buscar a tu hermana, a Rubio y también Doggis. Sera divertido estar afuera, además hay sol y no hace frio- digo mientras doy un silbido para que aparezca Rubio. Detrás viene corriendo Doggis, el cachorro que nos quedo feliz por salir a jugar, es lo único en que piensa.

10 minutos me demoro en dejar todo listo para salir con mis hijos. Ana esta durmiendo con Nicolas y Liam que tiene ya 2 meses de edad. Hemos pasado por tanto en estos meses y creo que he envejecido varios años en poco tiempo.

El primer mes fue difícil para todos. Liam tuvo una recaída muy fuerte y tuvo que se entubado, ya que algo no dejaba que respirar por su cuenta. Esos días no estuvo en la casa por las noches, ella dividía su tiempo entre los niños y Liam, hasta que tres semanas después, salió adelante y aña colapso en la casa.

No dejaba que nadie la ayudara, hasta que su mismo cuerpo la mando al hospital. El medico dijo qué no tenia las cosas en orden y la mando a ver un psiquiatra para hablar y que sacara todo lo que estaba guardando.

Y lo necesitaba mas de lo que pensaba.

Para ser sincero también tuve una crisis. Sentía que no podía hacer mas de lo que estaba haciendo por mi familia y me hacia sentir molesto. Mi padre hablo conmigo durante dos noches, que no llegue a dormir en la casa. Se que le estaba haciendo daño a Ana, pero ella no estaba y creo que no se dio cuenta de mi falta.

Salvo, que siempre me llamaba por teléfono o me mandaba un mensaje para saber como estaba. Fueron unas semanas largas y complicadas, pero gracias a Dios, mi familia y a mi esposa, todo esta como debería ser.

Con los 4 niños en casa y volviéndonos locos con ellos.

En la entrada de la casa, nos despedimos del guardia y le digo que este al pendiente de la señora por si necesita algo. Llevo en mis brazos a Phoebe y Teddy va de mi mano, pero se que no durara. Los perros ya están corriendo por el lugar y se que mi hijo quiere ir con ellos.

Pasar el tiempo con los perros, es uno de los momentos que mas disfrutamos en la casa y eso puede durar horas. Ninguno de los niños esta yendo al jardín, ya que Ana los quiere en la casa, pero no estoy seguro de eso, ya que Teddy tiene que seguir aprendiendo y casi la tengo convencida para que, por último, Teddy vuelva a la escuela, a nuestra escuela.

-Teddy con cuidado- le digo mientras camino con Phoebe. Ella aun está un poco inestable, pero le gusta caminar por el pasto. En un tiempo más, los zapatos que trae quedaran en cualquier lado, ya que nos ha pasado antes.

Llegamos a donde están construyendo la granja y cada día me enamoro mas de esta casa. En unos meses más, se construirán las caballerizas y llegarán los caballos que compre. Al principio iba a comprar 3, pero viendo imágenes, historias y más, compre 12 de ellos. Algunos nacidos en ese lugar y otros que fueron rescatados de lugares que no los cuidaban como era necesario.

Seguimos por el camino de mi esposa.

También seguimos recorriendo la casa y llegamos hasta los invernaderos y las cosechas que hay. En realidad, nos conseguimos semillas de todo y el sabor que se logra en los productos, no se iguala en ningún lado, salvo si lo comprar directo a la persona que los planta.

60 y mas: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora