Capitulo 24

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MARATON 2/?

POV CRISTIAN

Me asusté y me sorprendí mucho cuando Ray me dijo que Ana había comenzado con labores del parto. Esperábamos que nuestra niña fuera puntual, pero simplemente decidió aparecer un poco antes de tiempo. Cuando me di cuenta de que Ray había vuelto con Teddy y que había dejado a Ana sola, me asusté y salí corriendo por el patio hasta llegar a su lado, pero ella me tranquilizó y ahora vamos en el auto rumbo al hospital para poder conocer a mi bebé.

Me asombré un poco cuando que haya decidido ir a tomar una ducha antes de ir al hospital y buscar una ropa cómoda antes de hacer cualquier cosa. No dije nada, simplemente fui lo que se puede llamar un tercer brazo para ayudarla.

Durante el trayecto habla con Taylor, mi madre y conmigo y eso la tranquiliza y es bueno. La distrae un poco de lo que está pasando y lo que va a pasar. Cuando las contracciones se hacen presentes, toma mi mano para buscar un poco de fortaleza y se la doy. Me da lo mismo que me esté torturando los dedos, pero esto no es nada a lo que ella está sintiendo.

Cuando me puse a investigar lo que eran los partos, cuando estabas cerca la llegada de Teddy y después vivirlo, me dio a entender que no es tan fácil como lo pintan. Es un trabajo que dura mínimo entre 4 horas hasta días. La mujer se agota hasta tal punto, que su vagina se tiene que expandir para dejar salir un ser del tamaño de una sandía y eso no se devuelve a la normalidad tan fácil.

También qué el resultado de que el parto no siga el camino habitual y se tenga que recurrir a una cesárea. Pero hay otra cosa más que tampoco dicen los libros, el tema de la crianza. El tema de que el bebé es tan exigente las primeras semanas de vida que tu mujer es como una vaca andante. Eso jamás lo voy a decir delante de una mujer, solamente es un pensamiento, pero tienen que estar con la teta disponible para cuando el bebé quiera y muchas veces o significa despertarse dos o tres o hasta cinco veces en la noche y eso significa que ya no puedo dormir correctamente, por ende, al día siguiente amanece cansada.

Tampoco avisen que hay que tener paciencia para reconocer el llanto del bebé, hacer la conexión a través de la lactancia, tener vigilancia sobre todo si el bebé hace alguna reacción a los pañales o algún producto que se le eche para evitar ciertas cosas, como las rozaduras.

No te explican nada de eso y en realidad la que hace la mayor parte de todo eso es la mujer. Es por eso que encuentro fascinante el tema de poder ayudarle en lo más que pueda, estar con ellos, ser un padre presente, si mi mujer no puede dar pechuga, pues tengo un biberón a un lado con la leche de la mujer para suplir la pechuga.

Aunque sé que trabajo muchas horas al día, intento que el horario laboral no se expanda porque quiero estar con mi familia y eso es lo qué voy a hacer.

Al bajarnos del auto, nos está esperando una enfermera con una silla de ruedas que nos lleva directamente al box de maternidad donde la instalan y así poder acompañar a Ana.

Por un tema de seguridad solamente está mi madre, el jefe de seguridad y estoy yo. Los demás se van a quedar en la casa esperando noticias y como era de esperarse, yo voy a estar en todo momento y jamás voy a dejar a nuestra hija sola para evitar cualquier intento de secuestro o que los idiotas que están detrás de nosotros le puedan hacer algo a ella o a mi mujer.

En este momento necesito estar un pie más adelante que ellos, en este momento somos vulnerables. La llegada de un nuevo integrante te hace vulnerable ante los demás, es por eso que tengo todo vigilado y todo controlado para que nada salga mal.

-esto está comenzando a doler bastante Cristian. Solo espero que la bebé nazca antes que acabe el día, o sino tendremos a dos bebés de cumpleaños para el mismo día- me dice con los dientes apretados. Es cierto, mañana es el cumpleaños de Teddy y es su primer cumpleaños y no le tenía nada preparado.

60 y mas: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora