Capitulo 34

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POV CRISTIAN

-no Ana, mi respuesta sigue siendo la misma. No vas a salir con esa ropa a esa cena para que otros hombres te vean. No hagas que el Cristian celoso aparezca, ya que no me hago responsable de lo que pueda pasar si eso ocurre. Sabes que no soy bueno tratando con mis propios celos y mucho menos cuando veo que otro hombre te desea, por ende mi respuesta sigue siendo no- digo molesto cuando aparece ante mí con un vestido hermoso de color verde, que llega un poco más arriba de la rodilla.

Ese no es el problema.

El gran problema es que en la parte delantera tiene un escote en v, el cual muestra sus muy apetecible pechos. Y aunque ella ocupe sostenes que le ayuden a disminuir el volumen de estos, con ese vestido se ven grandes y tentadores. Y para los hombres eso es algo tentador y no quiero que llame la atención de esa manera. Ya suficiente tenemos con la atención que siempre captamos como para que ella tome más atención de los hombres y más aun estando sola.

-soy tu esposa Cristian, no soy tu esclava. Puedo decidir qué colocarme y me gusta este vestido. Deberías estar acostumbrado a que lo que tengo como delantera siempre va a ser llamativo para los demás, ya que son grandes y son naturales. Aunque si este vestido te molesta deberías ver el vestido rojo que me regaló tu hermana. Ese sí sería un problema para tus celos- dice y frunzo el ceño al no entender lo que está diciendo. Hasta que me indica con un dedo el recibo que está colgando en el clóset.

Y antes veía las cosas de color negro ahora literalmente estoy viendo rojo. El vestido es precioso largo entallado para mostrar las curvas de una mujer el problema radica que el escote que tiene es en forma de U y los costados desde escote son con encaje transparente. Al darse cuenta que lo estoy examinando Ana lentamente da vuelta el vestido y es cuando pierdo mi parte racional. El escote en la espalda llega a unos cuántos centímetros por sobre su trasero, si no fuera porque el vestido es bello y Ana no se vería mal, juraría que ese vestido es casi sexual.

-quémalo. Ese vestido está hecho para que un hombre pierda la cabeza por culpa de la lujuria y lo juro por Dios Ana, si te lo pones, vas a ganar unos cuantos azotes en ese trasero y lo disfrutaré y te follaré hasta que pierdas la conciencia por sacar los celos a flote. Tengo aguante y tengo paciencia, pero eso es un límite difícil para mí- digo con los dientes apretados y Ana tiene la genial idea de tentarse de risa delante de mí y eso no ayuda a que el enojo se vaya.

-Cristian conoces mis gustos y ese vestido no es para mí. Así que deja tu hombre de las cavernas guardado y hablemos del vestido que tengo puesto. No me voy a cambiar de ropa porque piensas que es llamativo para los hombres. Es más esto no estaría ocurriendo si hubieras aceptado venir con nosotros a esa cena y dijiste que no, pero me obligaste decir que sí a mí ¿O quieres que te recuerde esa escena?- me pregunta y dejó salir un suspiro pesado porque no es necesario.

Unas de las mejores amigas de mi madre estaba haciendo una cena en beneficio de mujeres que han sido afectadas por la sociedad tanto en el sentido de violaciones, robos, violencia, no tener trabajo, no contar con el apoyo de su familia entre otras cosas. Cómo era una causa de familia, insistió que fuéramos todos los que componemos la familia Grey, pero en esa fecha dije que no porque tenía cerrar un negocio importante, pero dije que Ana podía ir en lugar.

Obviamente lo dije cuando Ana no estaba en el lugar y cuando volvió a la mesa y se enteró de que estaba invitada y que había aceptado por ella, no lo hizo mucha gracia, pero para no hacer una gran pelea confirmó su asistencia.

Así que como un idiota tengo que aguantarme la idea de que otros hombres la puedan ver y tener pensamientos pecaminosos con la imagen de mujer. En este momento me hago a la idea de que tomar una decisión sin hablar con esa persona antes para escuchar sus argumentos, provoca este tipo de cosas.

60 y mas: Cristian y AnastasiaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora