—¿Eres...? —interroga Gabriel atónito.
¿Qué? ¿También ve mi alucinación? ¿Todos nos drogamos sin darnos cuenta? Sí, es una ilusión.
—Hubiera sido más sutil —hunde las cejas avergonzada —. Soy yo o lo era.
—¿Todos ven lo mismo? ¡Los fantasmas existen! ¡Ah, su madre! —eleva su voz Gabriel —. Leí en internet que debes prender una vela para ayudarlos a seguir su camino. Las velas son luz.
Ella hace varias risas tímidas.
Darek llama al psicólogo. No pienses locuras.
—¿Si fuera un fantasma podría hacer esto? —inclina el cuerpo. Sostiene un puño de hojas secas. Crujen al contacto de sus dedos. Las lanza en nuestra dirección, unas chocan en mí.
No he bajado del avión, sigo dormido. Estás soñando, Darek.
—En Ghost nos dice que los fantasmas pueden mover cosas.
Siendo precavida camina a él. Extiende sus brazos, lo envuelve en un tierno abrazo.
¿Qué mierda sucede? ¿Es verdad? ¿Mis ojos no engañan?
—Hola, pequeño gryffindor.
Y los espectros no utilizan perfume... ¡Ella está viva!
¿Cómo es posible? ¿Yo vi...?
Abraza a Elam, él como todos estamos intentando liberarnos del shock. No hay mejor palabra para describirnos, estamos en un profundo shock.
—El metalero Elam, hola —similar a Gabriel no mueve ni un músculo. Avanza hacia Azael, alborota su cabellera rubia con una mano, mi hermano reacciona. La envuelve en un abrazo —... Azael, siempre tan galán y encantador. Hola —se posiciona delante de mí, reluce una gran sonrisa blanca —. Hola, Darek Verona.
Presiono mis brazos en su espalda sintiendo el calor, respiración, músculos y huesos. Es irreal, no es verdad. Descanso mi ajetreada cabeza en su cuello. Olfateo profundo. Huele a caramelo y durazno.
Es un sueño muy realista.
—Estás viva —consigo articular impactado.
—Sí —separa el cuerpo. La respuesta crea una descarga eléctrica en mi pecho ¡Fuck, es verdad! Entrelaza nuestras manos —. Tienen demasiadas preguntas, lo sé. Los invito a mi casa y les contaré todo —libera mi mano. Abraza a Hal y Vince.
Vi esta misma anatomía inerte tendida sobre las hojas de otoño. ¿Tenía una hermana gemela y no dijo? No es posible, es Aria.
Aria camina unos pasos, se detiene al no sentirnos cerca.
—Vengan. No voy a violarlos.
—¡Uy, así que chiste! —dice Gabriel. Engancha su brazo al de ella, avanzan.
Rápidamente los alcanzamos.
Sobrevivió. Aria está frente a mis ojos pero no como recordaba, luce distinta. Su cabellera es de un marrón rojizo. La piel impregnada en vida, más radiante y tersa. Aria es hermosa, mucho más de cómo era.
—Todos te vimos —comenta Vince —. ¿Cómo es posible?
—Técnicamente morí unos minutos... Tenemos demasiados temas de conversación. Quiero darles tiempo de asimilar que sigo respirando. Tienen el camino para pensar y no es buena idea hablar aquí —observa a un grupo de personas caminando. Abandona a Gabriel. Avanza hacia una Harley Davidson estilo chopper. Mira a todos lados buscando algo —. ¿Cómo llegaron?
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Eternas cicatrices del otoño 2 🍂
Подростковая литератураLa tragedia hizo acto de presencia destruyendo todo. Algunos salieron del abismo, otros abrieron los ojos y descubrieron esperanza. Nuestra incompleta hermandad continúa lidiando con esos tormentosos demonios, sanar las heridas no será fácil. Intent...