Confusión de vida -Yoontae-

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Nonrecordaba muchas cosas de lo sucedido en la fiesta pero sus amigos se encargaron de refrescarle la memoria con lujo de detalle las estupideces que hizo desde que perdió el control de su alfa por el alcohol y la furia después de ser testigo de la forma en que Taehyung estaba siendo tratado por su hermano, perdió los estribos y eso casi le cuesta la vida, especialmente al Omega que estuvo a punto de tomar.

Ese Omega que cada día le complicaba la vida y las cosas entre ellos, el chico no tenía la culpa de los sucesos desafortunados que le sucedían pero que con sus acciones le provocaba dolores de cabeza, como ahora mismo.

Verlo actuar tan extraño y sumiso a su alrededor le ponía ansioso y tal vez molesto pero que no sé atrevía a decirle algo porque ese Omega no tenía la culpa de lo sucedido esa noche. Le ponía de mal humor verlo tan acometido acomodando sus cosas, limpiando por aquí y por allá apesar que tanto su madre y él le dijeron que no lo hiciera, siendo más notable sus esfuerzos por agradarles algo que su madre noto al instante y que apenas tuvo oportunidad le pregunto al respecto.

No entendía como su progenitora se dada cuenta al instante de lo sucedido entre ellos, porque se lo dijo, le aseguro que algo paso en la fiesta y lo interrogó para saber al respecto, algo que no pudo ocultar fácilmente al tener al Omega más sumiso de lo normal en el alrededor.

Confesó ocultando ciertas cosas de las que se avergonzaba tratando no ser demasiado estúpido como para recibir un golpe de su madre quien para nada oculto su descontento al entenderse de que estuvo por aprovecharse del Omega mientras estaba borracho, le recordó que si realmente lo quería de otra manera debía hacer las cosas diferentes y si no lo hacía que dejara de ilusionarlo, que dejara de alterar su paz para que pudiera buscar un alfa que le diera lo que buscaba, la idea le pareció razonable y quiso ponerla en práctica pero termino fallando cuando entraba a su habitación y respiraba el aroma de ambos mezclados en el aire, la clara diferencia de gustos en la habitación y las cosas de ambos haciendo contraste de fondo, le pareció extraño porque antes de esa fiesta poco le importaba como se viera su habitación o lo que tenía dentro, hasta después de esa noche en qué la presencia del Omega era más notable y más presente.

Verlo actuar tan familiarmente dentro de esas cuatro paredes le causo desconfianza de si mismo, de inconcientemente, estarse acostumbrando a la presencia de ese chico, a su aroma y su peculiar forma de comportarse a su alrededor.

Más de una vez se quedaba observandolo por largos minutos sin que pudiera evitarlo y eso le asustaba.

La mañana siguiente a esa fiesta ninguno de los dos comentó algo especto a lo sucedido esa noche, nadie se atrevió a mirarse a la cara y preguntar por lo sucedido por vergüenza, quizás, o por miedo de decir algo que pudiera provocar más conflictos entre ellos.

Cómo ahora mismo, Taehyung se encontraba haciendo su tarea en silencio sobre su cama, sin emitir sonido alguno algo que le puso incómodo sin saber porque o tal vez si sabía pero se negaba a aceptarlo.

No podía concentrarse en terminar sus trabajos pendientes por estar pensando demasiado en ese Omega que parecía muy concentrado en su cuaderno, verlo mover el bolígrafo de un lado a otro o simplemente escribir algunas cosas en el papel le parecía hipnotizante. Verlo sereno le molestó porque él no lo estaba, no podía estar tranquilo después de lo que estuvo a punto de hacerle, casi lo toma y lo reclama como su Omega, su alfa era posesivo con las cosas que quería y por alguna razón se estaba encaprichando con ese Omega, ya ni siquiera pensaba en Ji-eun desde que ese chico apareció. Y ella parecía a verse alejado completamente de él porque ahora poco le hablaba y rechazaba sus invitaciones.

Hasta sus amigos se pusieron hostigosos con él después de lo sucedido esa noche, más de uno le hacía bromas con Taehyung y algunos otros no dejaban de preguntar por el chico que le robo el corazón. Ni siquiera podía aclarar aquello porque el rumor de que estuvo con un Omega de la universidad esa noche se esparció por todo su salón, todos sabían que ya estaba ocupado y que ese Omega vivía con él, un grave error que cometió NamJoon en una de sus estúpidas bromas que fue escuchada por sus demás amigos y compañeros.

Era estúpido aclarar algo que no entenderían y que poco le importaba lo que dijeran, pero si le molestaba que metieran al Omega en sus conversaciones.

Boto el libro lejos de él al no lograr concentrarse en su actividad académica asustando al Omega que le miró con curiosidad desde su lugar.

— Lo lamentó.— se disculpo de inmediato al sentirse demasiado tonto con su actitud.

La mirada curiosa de Taehyung le removió el estómago y su alfa se inquieto en su interior recordando vivamente aquellos escenarios obscenos de la fiesta con Taehyung desnudo debajo de su cuerpo y sus gemidos roncos ante sus caricias, provocando que el calor se instalará en su cuerpo.

Se levantó de golpe al sentir su cuerpo reaccionar a las imágenes eróticas en su mente saliendo rápidamente de la habitación.

¿Se excitó ante los recuerdos? ¿Por qué?

Últimamente se sentía extraño con su alfa y eso le hacía provocar estupideces de las que se arrepentía después, como lo sucedido momentos atrás.

— ¿Todo bien? — se asustó al escuchar la pregunta de su progenitora en alguna parte de la pequeña sala.

La busco con la mirada encontrando la sentada en el mesón de la cocina mientras bebía de su taza.

— S-si. — contesto odiando el titubeo que salió de los labios.

— ¿No es ya demasiado tarde como para que estés así? — su cara se puso roja ante eso y la forma en que su madre le miró.
¿Acaso sabía de lo que le pasó? ¿Acaso sabe que está..?

— No se de qué hablas, mamá.— se apresuró a contentar yendo a recostarse al sofá donde dormiría esa noche, una rutina que llevaba haciendo últimamente y que por ningún motivo se atrevía a romper.

— Bien, ya sabes lo que pienso al respecto.