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La confusión reinaba en su sistema, dejándolo completamente confundido y descolorado ante todos los acontecimientos que golpeaban su mente conforme recuperaba la conciencia de sus actos mismos que fueron inducidos por su celo descontrolado, dejandole un amargo sabor en la boca del estómago al darse cuenta de la falta de control e irresponsable que actuó su lobo mientras su lado razonable quedó segado por su otra mitad. La verdad sobre todo lo acontecido y que aparentemente significaba la realidad de sus actos.Estaba metido en un gran problema, uno muy grande.
Los recuerdos vagos que se arremoliban en su mente conforme todo se aclara le advierten que fue él el que provocó lo sucedido, fue si lobo el que inicio la situación comprometedora en la que se encontraba. Recuerdos claros de lo sucedido bajo la ducha y otros más que acontecieron en mármol del baño para proseguir a la habitación que compartían, despertando un sentimiento de calor en su cuerpo.
Reprendiendose cada segundo por aprovecharse del Omega que ahora portaba su marca; Taehyung era el Omega más inocente y puro que pudo conocer en su vida, sin techo no hogar, ni familia que lo responde, sin nada. Se siente pero por lo que le hizo, por lo que les hizo a ambos, un lazo era algo demasiado fuerte y difícil de deshacer, no había una solución fácil se contrarrestar sus efectos. Ni siquiera sabía si había la posibilidad de deshacer la marca.
Estaba confundido.
Su cuerpo seguía caliente y un poco sensible por los efectos del celo que aún seguía enredado entre las piernas contrarias bajo las sábanas de la cama. Taehyung permanecía durmiendo a su lado, boca abajo sin ocultar nada de su cuerpo ni de lo que sufrió su piel, marcas moradas de sus dedos pintando sus caderas y muslos, sabiendo perfectamente que el culpable de todo eso era él.
Aunque sin duda Taehyung era poseedor de un cuerpo apetecible, firme y fuerte como nunca se hubiese imaginado podría tener, las pocas veces que se acostó con alguien, especialmente mujeres, lo sentido diferente. La piel de Taehyung se sentía diferente al tacto, sabía diferente y era diferente.
Las curvas delineadas de un Omega estaban ahí, su aroma era fuerte pero no abrumador como otros que mantuvo cerca, el calor de su cuerpo se sentía diferente a cualquier otro.
Era diferente en todos los sentidos y eso le asusta demasiado, se siente un aprovechado, un rufián por tomar algo que no debía y arruinó la inocencia de alguien que fue criado y educado de una manera conversadora, poco habitual hoy en día pero que si existía.
Más aún de comprender la magnitud de las circunstancias, su propia madre estaba enterada ya de todo y parecía necesitar una explicación pronta de lo sucedido. La realidad de verse enlazado tan pronto y tan joven de esa manera no era lo que deseo para él.
Grupo frustrado llevando las palmas de sus manos a su alborotado cabello tratando de, alguna forma, contrarrestar la incertidumbre que le provocó la situación, la habitación olía a sexo, feromonas y más sexo por todos lados haciendo que la ventana fuera insignificante para apaciguar tal olor.
Las almohadas y otras sábanas estaban esparcidas por la habitación dejando en evidencia lo descontrolado que fue todo.
¿Qué era lo que debía decirle? ¿Cómo debía explicarle lo sucedido? ¿Acaso había explicación para lo que hicieron?
— ¡Demonios! — gruño con furia sintiéndose el cabron más grande del mundo por haberse aprovechado de un tipo como Taehyung.
Se asusto inevitablemente ante los sutiles movimientos de Taehyung sobre la cama, despertándose de su sueño, ¿Cómo lo vería a la cara? No se atrevía a mirarlo después de lo ocurrido.
— ¿Q–qué hora es? — parpadeó confundido ante la pregunta de Taehyung, un cuestionamiento que no le pasó por la mente fuera lo primera que preguntara.
Su voz ronca pero suave le causo escalofríos.— Las dos.— susurro sin atreverse a mirar el rostro contrario. Aterrorizado, esperando una reacción alterada del Omega frente a él.
— Ya es tarde..— lo miro removerse hasta quedar sentado sobre sus rodillas a su lado, desnudo y con más marcas de lo sucedido por su cuerpo, la mordida roja y fresca le provocó escalofríos por lo profunda que se veía en cuello de Taehyung.
Sintió quedando anonado por lo que sus ojos estaban viendo, había estado compartiendo habitación con Taehyung por meses y jamás se había dado cuenta de que poseía una atractiva belleza, un aura de inocencia y timidez lo rodeaba. Su rostro pequeño y fino mostraba a un Omega claramente cuidado y joven acompañado de un claro sonrojo en sus mejillas, los ojos un poco hinchados por el suelo y unas muy visibles ojeras, el cabello demasiado despeinado.
Su cuerpo se tenso inmediatamente en que el menudo cuerpo contrario se recostó sobre el suyo, no se esperaba tal acción del Omega; colocándose sobre su pecho casi ronroneando contra su oído, el contraste de pieles fue demasiado cálido y reconfortante con el toque haciendo que su lobo se sintiera demasiado cómodo para su gusto.
— ¿E–estás bien? — la pregunta encubierta de susurro le confundió aún más de lo que ya se encontraba. Taehyung le estaba preguntando si se encontraba bien después de lo ocurrido, quizás ni siquiera era consiente de lo que realmente sucedió entre ellos.
— ¿Tú lo estás? — inquieto pregunto, mientras alcanzaba la pastilla que su madre le dio tiempo atrás. — Tómate esto, es necesario.
Taehyung le miró con curiosidad pero no sé atrevió a decir algo obedeciendo a lo que le dijo que hiciera, por alguna extraña razón sus ojos no dejaban de ver el cuerpo contrario; de observar su piel y las cuevas de su cuerpo como si nunca hubiese visto algo igual, ciertamente no miró muchos cuerpos, los pocos que vio y tocó le parecieron sencillos y simples, nada fuera de lo común pero por alguna confusa razón, en ese mismo momento, no podía dejar de mirar el cuerpo delgado de Taehyung, tenía curvas de Omega muy en contra de lo que veía diariamente, sin los suéteres y pantalones anchos y tallas más grandes.
— Sobre lo ocurrido.. es algo que.. es complicado de explicar, difícil de dirigir sin decir algo que suene mal.— balbuceó tratando de explicar lo sucedido, de tratar de explicar el gran problema que cometió. — Te marque durante mi celo Taehyung.. y eso es algo demasiado fuerte y complicado de entender.
— Lo se.. eres mi Alfa. Me gusta. — quedó sin palabras a lo que Taehyung le dijo no logrando logrando entender lo fácil que comprendió la situación, pareciera ser que era algo que sabía iba a suceder o debía suceder así.
— ¿Por qué? — exigió mirándolo a los ojos tratando de contener su frustración y enojo consigo mismo.
Quizás Taehyung tenía la ilusión de tener un alfa, especialmente alguien que lo cuidara y protegiera como él lo hizo cuando se conocieron, tal vez se trataba de agradecimiento encubierto de sentimientos que no diferenciaba por ser está la primera vez que estaba col alguien.
Su educación conservadora era la culpable de ello.
— A mi Omega le gusta tu alfa, se siente cómodo y seguro con su compañía. Es la primera vez que mi Omega se siente en calma cuando se encuentra en presencia de un alfa... Mis padres jamás me dejaron estar tanto tiempo a solas con un alfa por lo que podría suceder pero también lo hicieron porque ni lobo rechaza la presencia de cualquier alfa que se intente acercarse a mi.. educación se dio el casa y cuando salí para la universidad los alfas que me rodeaban me provocaban angustia y miedo.. pánico al sentir su aroma demasiado cerca de mi.. incluido tu aroma cuando nos conocimos, pero con todo lo sucedido y la forma en la me ayudaste desinteresadamente se le hizo mucho más fácil a mi Omega aceptar a tu alfa.. a aceptar que podría existir algo entre nosotros.. que fueras mi alfa, me gustas mucho.
— Y–yo. — quería decir algo, escusarse, negar o despotricar a lo que escucho pero no pudo, su alfa aceptó aquella declaración sin permitirle negar nada. Sabiendo que lo sucedido estaba fuera de sus manos y que no habría forma alguna de cambiarlo.— Está bien.
Quizás, podría funcionar, debía funcionar porque no había forma de deshacer una marca de enlace hecha durante el periodo de celo.
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Confusión de vida -Yoontae-
FanfictionYoongi simplemente no debió quedarse esa precisa noche en la casa de Kim Taehyung, su compañero de clase. #Yoontae #Yoongi #Taehhyung #Amor #Historia 100 original #Prohibida su copia y/o adaptación sin mi autorización