Sin mas opción

Capítulo 87: Desconectados

Una disculpa por subir el capítulo tan tarde, prácticamente se me fue la luz por todo el dia y recién la pude recuperar... En fin, no me enrollo mas, empecemos :D

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Nuestra protagonista heroica yacía en un colchón algo sucio y conectada a algunos aparatos médicos para monitorear sus signos vitales.

A su lado estaba una mujer que sudaba demasiado y no era para menos, pues tenía al mismo asesino de héroes, Stain, detrás de ella fijándose en que cumpliera exactamente con lo que este le pedía.

—¿Y bien? —bufó un poco molesto el pelinegro jugando con su pequeño cuchillo—¿Cómo se encuentra la mocosa?

—B-Bueno, la-la chica se ha so-sometido a un sobreesfuerzo i-increíble, me sorprende que si-siga viva aún.

La médica vio a un lado del colchón un montón de telas rasgadas y pedazos de metal cubiertos de sangre y barro, esa mujer estaba impresionada por la tecnología usada en ese traje de heroína, sin duda era de gran vanguardia.

—La-Las heridas de sus brazos están bi-bien, se infectaron un poco, pe-pero logré desinfectarlas a tiempo y colocar vendas y yesos en todo su cuerpo... Fue a-algo difícil porque no tenía todos los materiales.

Un cuchillo pasó por enfrente de ella haciendo que diera un gran salto, la filosa daga quedó firmemente enterrada en la pared de madera del lugar.

—No te quejes —bufó Stain mientras caminaba hacia su cuchillo—. Te dije que eso fue lo mejor que pude conseguir, agradece que fue algo.

—¡Cla-Claro que no me quejo! —respondió completamente recta—Co-Continuando con mi reporte, esto... Sus niveles de energía e hidratación se han estabilizado, le coloqué dos sondas para que pueda alimentarse y beber, pero debemos cambiarlas constantemente.

—Tsk, eso ya lo sé... Más te vale no acabar con mi paciencia, idiota —la presencia de Stain y su instinto asesino hacía que la doctora temblara de miedo—. ¿Cuándo despertará?

—Pu-Puede variar, se-señor Stain, por su estado diría que... ¿Dos días? No estoy del todo segura...

—¿Dos días? Mierda, no tenemos dos días.

—¡Qui-Quizás sea en el peor de los casos! —respondió la médica preocupada—¡E-En el mejor se dé-despertará en un día! ¡¿No es fantástico?! —soltó una risa nerviosa por mantener al villano contento.

El asesino de héroes no dijo nada, simplemente se volteó y salió del cuarto en donde Izumi Midoriya estaba descansando tranquila, su respiración era estable y se notaba más calmada, parecía estar en un profundo sueño.

Su cuerpo no era el mejor, pues piernas y brazos, al igual que abdomen, habían sido cubiertos de vendas y algunos yesos para que no se pudiera romper algo.

—¿Cuánto habrá pasado esta joven? —suspiró la doctora más calmada de no tener la presencia de Stain ahí.

La mujer había sido raptada por el asesino de héroes hace unas horas debido a que ella había curado la herida que el mismo villano se había hecho en su nariz, además de que ella le hacía sus chequeos semanales en la prisión Tartarus.

No era estúpida, era más que obvio que no lo hacía por un cariño enfermizo o algo, probablemente solo estaba viva si esa muchacha peliverde lo estaba, si hacía o decía algo que pudiera enojar al volátil hombre, podría irse despidiendo de su vida de una vez.

Al estar cerca del asesino de héroes se sintió un poco afortunada, pues nadie se metería con ella debido a todo lo que aquel hombre representaba, así que tenía una zona segura contra los soldados del Frente de Liberación Paranormal.