Capítulo 3: Sueños rotos

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Un nuevo día había llegado al país del sol naciente, Japón, muchas personas se levantaron para comenzar con sus actividades cotidianas, pequeños pájaros cantaban muy contentos, las flores empezaban a florecer, era un día magnífico, en días como estos... Esperen, franquicia equivocada.

Si bien era una mañana normal y sin nada destacable para el resto de personas, para nuestro peliverde amigo era diferente, él se había levantado demasiado temprano, no dormía así de bien desde hace años, al parecer hablar con más personas que no fueran su familia sobre sus problemas lo alivió bastante.

Esas personas que le habían hablado, que le dijeron que era útil, que no lo hicieron a un lado, eran Tomura y Kurogiri, ambos villanos, así es, nuestro aspirante a héroe se había sentido a gusto hablando con villanos para él era algo impensable, ni en sus sueños más locos habría imaginado algo como eso, el sueño más loco que el pecoso tuvo era uno en el que All Might por alguna razón le había dado sus poderes.

Izuku se levantó y se estiró preparado para un nuevo día de escuela, noto que esta vez su hermana Izumi no se había levantado primero, él le ganó a Izumi en esta ocasión.

—Le gané a Izumi... —el peliverde miraba la hora sorprendido —¡Lo sabía! ¡Sabía que todo iba a mejorar en este día! —aunque para los demás no sea mucho, para él era una victoria y señal de que todo estaba mejorando.

El peliverde se levantó emocionado, preparó el clásico desayuno de la familia Midoriya y esperó pacientemente a su hermana mientras comía un poco.

—¡Izuku! —un toque en la puerta de su cuarto lo sacó de sus pensamientos —¡Levántate, tenemos que ir a la escuela!

—¡Ya estoy levantado, Izumi! —una gran sonrisa de emoción se posó en el rostro del peliverde menor al ver a su hermana correr hacia la cocina sorprendida.

—¡¿Me ganaste en despertar?! —la mandíbula de su hermana estaba por los suelos sorprendida.

—Te prepare el desayuno, espero que te guste —por primera vez en mucho tiempo los ojos de Izuku estaban muy brillantes, como si la noticia de que no tenía Quirk jamás hubiera existido.

—Te veo muy emocionado, me alegra verte así —Izumi se sentaba al lado de su hermano y comenzaba a comer.

—Quizás todo está empezando a mejorar para mí —Izuku miraba su café bastante emocionado —. Todo comienza con pequeñas victorias.

—¡Así se habla hermanito! —revuelve aún más el cabello de su pecoso hermano.

—¡A-Aún me da vergüenza! —sonrojado se aleja de su hermana.

Ambos comparten una sonrisa por lo que ahora estaban viviendo, decidieron no tardar más y terminaron su desayuno para ir directamente a la escuela.

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—¡Alguien detenga a ese ladrón! —una mujer asustada apuntaba a una extraña criatura hecha de una especie de moco —¡Se robó mi bolso!

El ladrón solo corría lo más rápido posible, todos lo miraban con miedo, nadie podía intervenir para poder ayudar a la mujer.

—¡Intenten atraparme si pueden, imbéciles!

Otros por otro lado se encontraban bastante calmados con la situación, ellos confiaban ciegamente en los héroes y que siempre estarían ahí para ayudarlos.

—Bueno, supongo que hay gente que no sabe qué hacer con su don —un hombre de cabello azabache se encogía de hombros tranquilo.

—Tenemos que esperar a los héroes, ya no deben tardar en venir —señaló un pelirrojo bastante calmado a pesar de haber presenciado un robo —. Los villanos no dejan de salir, parece que nunca dejarán de hacer maldades.

Sin mas opciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora