No pude evitar fruncir el ceño al escuchar aquellas palabras salir de la boca del mayor, separando ligeramente los labios para responderle, sin embargo, un chico de cabellera rubia me interrumpió.
– ¡Chicos! ¿Os apetece uniros al juego de la botella?– Preguntó Ni-ki sin haberse dado mucha cuenta de que estaba interrumpiendo nuestra conversación.
Heeseung se limitó a mirarme con una ceja levemente arqueada, sonriendo genuinamente. – Claro, suena divertido, vamos Yae.
El pelinegro tomó mi mano sin previo aviso y ambos nos dirigimos hacia una habitación apartada de aquel lugar, ya que la música estaba algo alta y no podríamos escucharnos los unos a los otros.
– Por fin estamos todos, podemos comenzar.– Dijo un Jay aliviado, poniendo la botella de vidrio en el centro de todos.
Nuestra versión del juego de la botella era diferente a lo tradicional.
Consistía en que uno giraba aquella botella de vidrio y una vez hecho, tiene que preguntarle al que le había tocado cualquier cosa que se le viniera a la cabeza. Si el elegido no quería responder, tendrían que girar la botella de nuevo y besar a la persona que le tocara.Curioso ¿verdad?
– Bien, empiezo yo.– Dijo Jungwon decidido, tomando la botella entre su mano derecha para darle un gran giro a esta.
Después de unos cortos segundos, finalmente paró en Jake, el cual alzó ambas cejas sorprendido.
– Bien, veamos... ¿Alguna vez te ha gustado alguna persona de esta habitación?
El australiano tragó en seco, fijando su vista en el suelo durante un corto periodo de tiempo para finalmente tomar una pequeña bocanada de aire y responder. – Sí.
Todos abrieron su boca expectantes, mirándose unos a otros.
Yo, sin embargo, sólo lo miré algo nerviosa porque ya conocía la respuesta a la pregunta de quién era esa persona.
– Bien, ya me encargaré de averiguar de quién se trata.– Murmuró Jungwon para sí mismo, extendiendo su mano hacia Jake en señal de que debía girar esta vez él la botella.
El rubio repitió la acción anterior dicha, terminando por señalarme a mí. Sonreí algo nerviosa, mirando al chico pensar en alguna pregunta.
– ¿Alguna vez te has besado con alguien de aquí?
Esa pregunta me heló completamente la sangre. ¿Acaso no recordaba lo sucedido horas antes? Además, estaba mi hermano delante.
Ese chico era realmente idiota.
– Yo no... – Dije claramente nerviosa, haciendo que Ni-ki me mirara con una sonrisa burlona.
– Si mientes también te toca cumplir con la penalización.– Dijo este mismo chico anteriormente mencionado. Le dediqué una mirada fulminante, guardándole aquel comentario para devolvérselo en otro momento.
– Las reglas son las reglas, qué se le va a hacer.– Dijo Jungwon con un tono divertido, mirándome expectante. – Te toca girarla Yae, estás penalizada.
Con un gran nerviosismo, tomé aquella gran botella entre mi mano y la impulsé hacia la izquierda, haciendo que girara con rapidez.
Mientras observaba cómo giraba con una nube de nervios en mi cuerpo, pude notar que Heeseung la miraba con algo de ansias.Finalmente, después de unos segundos que se hicieron eternos para mí, la botella se detuvo. Para mi sorpresa, el extremo de la botella apuntaba hacia el pelinegro. Sí, Lee Heeseung.
Este sonrió ladinamente, ignorando las miradas de aquellos emocionados chicos, todos menos dos. Por una parte se encontraba Sunghoon, el cual no estaba del todo de acuerdo con aquella idea, y por otra Jake, el cual sólo miraba algo molesto aquella escena.
Heeseung se aproximó hacia mí con lentitud y tomó mi mejilla delicadamente, acercando su rostro al mío mientras mantenía su mirada puesta en mí.
– Si no quieres hacerlo dímelo, no estás obligada a nada.– Susurró a unos centímetros de mis labios, erizando mi piel por completo.
– Quiero hacerlo.
El pelinegro se limitó a sonreír genuinamente, juntando ambos labios en un lento, pero fogoso beso. Seguí su ritmo al instante, como si nos complementáramos el uno para el otro. Su mano se movió hacia mi nuca, la cual utilizó para intensificar ligeramente aquel beso, ignorando completamente el hecho de que teníamos a todo un grupo de chicos mirándonos.
– Eh... Creo que ya habéis cumplido la penalización... – Sentenció algo incómodo Jay mientras se rascaba la nuca, haciéndome entrar al mundo real de nuevo.
Rápidamente, me separé de los labios del mayor con un notorio sonrojo sobre mis mejillas, mientras evitaba cualquier contacto visual con alguno de aquellos chicos avergonzada.
– La penalización era un pico, no enrollaros aquí delante nuestra.– Dijo Jake claramente molesto, mirando al pelinegro, el cuál sólo se encogió de hombros como si nada.
– Vaya... Esas cosas deberían avisarse ¿no crees?
– ¿Avisarse?
– Sí, aunque... A ti qué te importa.
– Mucho, ¿por qué?
Jungwon se puso entre aquellos dos chicos, poniendo ambas manos sobre los pechos contrarios con intención de separarlos antes de que llegara a más. – Chicos, sólo es un juego. ¿Acaso estáis borrachos ya?
El menor de los chicos rió ignorando completamente la obvia tensión que se había formado en el ambiente, mirándome con una sonrisa divertida. – Oye Yae, yo también quiero un beso.– Dijo el rubio mientras abultaba sus labios hacia mí, haciendo reír a los demás, yo incluida.
– No digas tonterías, mejor pídele el beso a su mejor amigo.– Comentó Jake entre risas, intentando recordar el nombre del chico al que se refería. – Kim...
– Kim Sunoo.– Respondió Ni-ki con rapidez, sonrojándose levemente y apartando su mirada.
– ¿Cómo? ¿Contexto?– Dije completamente confundida, mirando a los dos rubios esperando alguna respuesta.
– No es nada, sólo se está inventando cosas, como siempre.– Dijo el menor intentando evitar el tema mientras bebía de su vaso casi vacío.
Sin duda, nada más despertar me encargaré de llamar a Sunoo, no puedo quedarme con el chisme en el aire.
El tacto de una persona sobre mi hombro me sacó de mis pensamientos, haciendo que girara mi cabeza hacia el sujeto proveniente. Era nada más y nada menos que el pelinegro, ¿se había quedado ahí durante todo este tiempo?
Expecté curiosa como quitaba un pequeño hilo de mi vestido con cuidado, mirándome con esos ojos oscuros que tanto me gustaban. El mayor aprovechó que me había quedado hipnotizada con su mirada y colocó un mechón de cabello detrás de mi oreja, lo cual funcionó para sacarme de aquel pequeño lapsus.
– Te estaba tapando el rostro aquel mechón.– Comentó relajado, regalándome una pequeña sonrisa para intentar volver a la conversación de los demás chicos.
De nuevo, aquel cosquilleo en el estómago.
No pude evitar llevar mi mirada hacia mi hermano, percatándome de que sólo se encontraba ahí sentado, en silencio, y con una mirada fulminante hacia su amigo el pelinegro.
Suspiré algo exhausta, rezando para que no me bombardeara con preguntas al llegar a casa.
Me espera una pequeña charla...
...
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𝐁𝐋𝐄𝐒𝐒𝐄𝐃; Heeseung
Fanfic𝐁𝐋𝐄𝐒𝐒𝐄𝐃 || Con solo un toque me volviste loco, me hiciste volar más alto de lo que alguna vez he ido... ¿Entiendes todo lo que siento por ti? Me siento bendecido de estar en tu vida, porque tú salvaste la mía. ... 𝐈𝐍𝐅𝐎 » Historia Heterose...