El Deseo De Amar Para Siempre

39.-Un cumpleaños diferente 😈

Lucero

—Señor Toño ya sirvo o esperan a alguien más

—Eh no ya puedes servir por favor Carmen

—Enseguida señor

—Lu antes que pasemos a la mesa quisiera darte un regalo más de mi parte

—¿Que es?- respondi un poco dudosa

—Ya verás ven acompáñame - nos dirigimos a mi recámara y me entrego una cajita pequeña.

—Puedes abrirlo

Abrí la caja que me dio Micho realmente mo sabía que podía haber ahí adentro de este hombre se puede esperar todo. Cuando vi que era me sorprendió demasiado.

—Michooooooooooo que es esto- estaba un poco nerviosa.

—¿Te gustó?- me dijo pícaro

—Micho que goloso eres, pero claro que me gustó

—¿Donde conseguiste esto?

—En una tienda muy especial vida, sabía que necesitabas uno así para cuando yo no esté aquí contigo. Pero no es todo mira se maneja con este control que tengo aquí en mis manos, así que estoy a sus órdenes para cuando quiera utilizar el vibrador que te regale- me dijo seductoramente

Realmente tengo muchísimas ganas de estar con el y hacerle el amor como si no hubiera un mañana, en la mañana ambos nos quedamos con las ganas pero sabía que tenía que terminar la canción.

—Emm y si lo utilizamos en este preciso momento amor- le respondí con una sonrisa

—¿Estás segura amor?, aún falta la cena, pero sabes que yo hago lo que tú me pidas vida

—Si amor, estoy segura solo no vayas a vengar a la mitad de la cena solo por qué en la mañana te deje con las ganas

—No nada de eso.

Bajamos al comedor pues ahí ya estaban todos esperandome, incluso la cena ya estaba servida entre pláticas y risas todos estaban muy contentos, y más yo que no cabía tanta felicidad en mi, pensar en que hace un año aún vivía en un infierno.

Los niños terminaron de cenar y decidieron ir a jugar al cuarto de Joss ya la mayoría de invitados se habían ido solo quedaba Toño con su esposa y mis papás.

Cuando de repente sentí como empezaba a vibrar el juguetito en mi clítoris automáticamente me puse muy nerviosa por lo que toño se dio cuenta.

—¿Lucero estás bien?- pregunto Toño un poco preocupado.

—Si todo bien toño- le respondí mientras volteaba a ver a micho.

Ya no aguantaba mas, cada vez era más torturador ya que lo quería tener dentro de mi, en tres ocasiones se me salió pequeños gemidos que espero yo nadie allá notado, así que decidí ir al baño para poder tranquilizarme un momento.

Poco a poco le empezo a subir la velocidad con el control que tenía entre sus manos, pareciera que disfruta verme en esta situación incomoda. En ese momento ya no podía aguantar más así que baje mi mano de la mesa y la puse en su entre pierna en señal de que estaba a punto de llegará mi punto maximo de placer, el solo me sonrió y bajo un poco la velocidad.

Ya no aguantaba las ganas realmente lo necesitaba adentro de mi, ya no importaba quien nos pudiera escuchar, desde la cena ya no podía más solo sentia que en cualquier momento se me iba a salir un gemido enfrente de todos y claro como era de esperarse así fue salieron tres gemidos involuntarios de mi boca no pude aguantar más, incluso mi braga estaba toda mojada.