El Renacer ~¿Un Mate? 2

🍀Cap11🍀

Aliss

Lo admito, al principio matar a alguien se me hacía algo horrible, pero ahora la muerte no parece algo tan malo, mucho menos si eso es lo que le espera a todos estos imbéciles, a ellos no les tiembla el pulso para apuntarle a una mujer o a un niño, no les importa quitarle la vida a una persona inocente.

Por lo que una vez empiezo, no les tengo piedad, admito que disfruto ponerles una bala en su cabeza a cada uno de los malditos que me hicieron la vida difícil en este puto infierno.

Algunos de ellos son buenos, y me la ponen difícil, otros con un golpe los sacó de mi camino. Claramente segundos después de haber empezado a deshacerme de ellos, la alarma empezó a zonar, por lo que sé que el muy idiota de Frederick debe estar en algún lugar escondido, no lo e visto tratando de impedirme salir.

Ellos realmente se ven desesperados en tratar de detenerme, y por un momento creo escuchar que buscan a los traidores por lo que intuyo que no tienen idea de que solo somos Ashly y yo en esto, pero pronto veo que en realidad no somos las únicas en esto, puesto que veo a algunos de los que Frederick amenazaba peleando contra los cazadores.

Por que si, esa es su manera de conseguir más guerreros, tanto hombres como mujeres, los amenaza con sus familias o con sus parejas, con lo mínimo que tenga para poder amenazar, el lo hará, y lo utilizará en tu contra.

Así que si no tengo piedad con ninguno, ¿por qué tener piedad con él?

Una vez logró llegar a los aposentos de Frederick, Wisonn se me atraviesa, impediendome la entrada. El me mira con rabia, asco y burla. Como voy a disfrutar que en ese rostro, lo único que se vea sea el dolor.

— Vaya, vaya. —se burla — Mira que yo le apostaba a Jonas, por un momento creí que el te podía ganar.

Jonas es el idiota que me enfrentó en la arena, el fue el inicio de todo este show, fue el primer voluntario para poder comenzar con todo esto, y quiero que todo termine con el idiota que esta detrás de esa puerta.

En mi mano derecha tengo una calibre 45, mientras que en mi mano izquierda tengo una navaja. Aprieto mi agarre en la navaja.

» Tal vez le ganaste a Jonas, pero eso no significa que me puedas vencer a mi, solo eres una niña.

— Hablas mucho, cierra la puta boca.

Antes de que se de cuenta paso la navaja por su mejilla izquierda, su grito de dolor viene acompañado con un pequeño gemido de dolor, con uno de sus puños, trata de golpearme, pero lo esquivo fácil mente y otra vez pasó la navaja desde su hombro hasta su mano derecha, otro grito. No pierdo el tiempo, con la pistola apuntó a su mano, no dudo en disparar, haciendo que el suelte el revolver que tenía sujeto, le doy una patada haciendo que choque contra la puerta, aprovecho de su debilidad y llevo mi mano con la pistola a su cabeza, mientras la mano con la navaja perforó su mano izquierda, a la que no le había disparado, un grito  de dolor más fuerte brota de su garganta.

El me mira con odio y desprecio puro, cosa que me importa una mierda.

— ¿Seguro que está niña no te puede ganar? — muevo un poco mi mano con la navaja, haciéndole más daño — ¿Eh Wisonn?

— ¡Ah!

— Te hice una pregunta, Wisonn.

— ¡Maldita perra!

— Esa no es la respuesta.

Nuevo más la navaja, el grita. Una pequeña idea cruza por mi cabeza, así que la llevo a cabo. Apuntó la pistola a uno de sus pies, disparo.