Aarón
Me siento vacío a pesar de que lo tengo todo, sé que el vacío dentro de mi es por ella, las cosas con Emma no han estado muy bien que digamos, aunque ella no me lo diga, sé que las cosas no están bien entre nosotros, no tengo idea de porqué, pero se que es así, me evita y me habla solo si es necesario, todo esto viene pasando hace tres semanas. Suspiro, hace más de media hora que la esperaba para cenar, pero aún no llega y me estoy empezando a preocupar, no conozco muy bien Bogotá, así que no es como si solo tomará mi auto y la fuera a buscar, ni siquiera se en donde está.
Me doy por vencido y decido darme una ducha, entro al baño de la habitación, me desnudo y me meto a la ducha, siento el agua recorrer mi cuerpo, me quedo un rato bajo el agua, después de unos minutos salgo de la ducha, tomo una tualla y la coloco alrededor de mi cadera, salgo del baño y es cuando la veo, sentada sobre la cama, parece cansada, pero no puedo evitar preguntar
— ¿Dónde carajos estabas, Emma? — ella se gira y me mira
— No tengo ganas de pelear Aarón, pero para que lo sepas, estaba con unos socios de uno de mis clubes aprovechando que estoy en Bogotá — contesta a la defensiva
— Tampoco tienes que estar a la defensiva, Emma.
— Bueno, tu empezaste — se encoge de hombros
— Solo me preocupo por ti.
— Bueno, puedes estar tranquilo, estoy bien.
“Necesito mi abrazo y mi dulce mentira, Aro” el recuerdo de Aliss diciéndome eso llega a mi mente, recuerdo siempre decirle “Yo nunca te negaría un abrazo, Aliss” recuerdo abrazarla y decirle su dulce mentira “Todo va a estar bien” Siempre que Aliss necesitaba desahogarse le decía eso.
— Eso no es cierto. —hablo
— ¿Ah?
— No estas bien, yo tampoco lo estoy, nosotros no estamos bien Emma, tú y yo sabemos eso
— ¿De qué hablas?
— Hablo de que hace días que me evitas, ¿Qué pasa, Emma? — me atrevo a preguntar
— No pasa nada...
— Eso no es verdad, ¿Hize algo que te molestó?
— ¿Qué? ¡No!
— Entonces dime por qué me evitas, ya no me hablas, no te comunicas conmigo, y cuando vas a trabajar llegas a media noche, por que ¿si viste la hora, no? Son más de las doce y media de la noche, Emma.
— Aarón...
— Dime que es lo que pasa, Emma, ¿Qué sucede?
— Aarón... Yo, no.... — tomó su cilencio como respuesta, asiento y camino hacia mi maleta para sacar lo que me pondré.
No la obligare a decirme si no quiere, pero tampoco voy a estar de lame votas. Sin importarme que ella esté detrás de mi me quito la tuaya, de todos modos ella ya me a visto desnudo, tomo un bóxer y me lo pongo junto con buso, suelo dormir sin camisa, camino directo a la cama, una vez me acuesto del otro lado de la cama, me envuelvo en las sábanas, dispuesto a dormir.
Unos minutos después, la siento moverse, la miro de reojo y veo como camina hacia su maleta, cuando empieza a desnudarse dejo de mirarla, se que si la miro perderé el control.
¡No te atrevas a caer Aarón! Me grita kira, mi demonio
Los demonios solemos ser algo rencorosos y vengativos, las personas nos tachan como moustros y destructivos. El mundo nunca entenderá que el cielo está lleno de seres hermosos. Pero en el infierno abundan seres irresistibles.
Un claro ejemplo somos mi hermano y hermana. Aliss es hermosa, obviamente yo sé que estoy más bueno que barrita de nutela, y Jack sigue mis pasos, así que no me sorprenderia si más de una chica sale con el corazón roto.
Admito que antes de conocer a Emma, fuy un maldito puto, pero eso quedó en el pasado el día que la conocí.
Emma camina hasta la cama, la miró de reojo, solo lleva una de mis camisas como pijama, no caigas Aarón.
«¡No puedes caer!» Vuelve a hablar kira
«Tenemos que admitir que luce hermosa así» habla Max, mi lobo
«No ayudas, ¿sabes?»
Siento como la cama se unde de su lado, después es cuando siento como trata de abrazarme, pero antes de que pueda hacerlo me levanto de la cama, ella me mira sorprendida.
— ¿A dónde vas? — pregunta cuando me ve caminar hacia la puerta
No contestó, solo salgo del cuarto, camino hacia las escaleras y bajo directo a la cocina, necesito alejarme, miro a mi alrededor.
Bueno, supongo que me tocará estrenar el sofá.
Camino dispuesto a acostarme sobre el pero escucho como alguien baja las escaleras, miro hacia dicha zona.
— ¿Seguro que quieres dormir en el sofá?
Me encojo de hombros y sigo caminando, ella empieza a camir hacia la habitación, vaya, mucho le importó que duerma aquí, me acuesto y tomó una de los pequeños almuadones, ahora que lo pienso, debí traer algo para cobijarme, Emma vuelve a bajar, la veo con dos almuadas y la sabana de la cama.
La miro confuso, ¿Qué piensa hacer?
— ¿Qué piensas hacer? — pregunto
— Dormir — responde encogiendose de hombros
Ella camina hasta mi y se sienta a mi lado, pone las almuadas por detrás de nuestras cabezas, luego nos cobija a ambos con la sabana, no digo nada, ella se gria hacia mí y me abraza, me quedo quieto.
— Lo siento, he estado tan estresada con el trabajo y tú no tienes porque pagar los platos rotos, lo lamento mucho.
Le devuelvo el abrazo, beso su cabeza.
— Sabes que puedes hablar conmigo de lo que sea Emma, tal vez no siempre diga lo que necesitas, pero siempre estaré para ti, siempre que necesites alguien para hablar o solo para ser escuchada, yo estaré ahí para ti Emma.
— ¿Estarás aquí a pesar de todo? — ella me abraza más fuerte, me extraña su pregunta.
— Por supuesto que si, lo prometo.
Nos quedamos en silencio unos minutos, solo me consentro en ella, pero admito que también me consentro en que ella no caiga del sofá. Otra cosa que no marcha bien es Jack, pronto será su cumpleaños, el mes que viene para ser exactos, se que le duele mucho que Aliss no esté aquí, para el, Aliss era su sentro de inspiración y motivación, a pesar de que el ya arreglo las cosas con mamá, sé que todavía necesita mucho de Aliss, hace como un mes, cuando llegue a casa para visitarlos, cuando fui a su cuarto, lo encontré con los ojos y nariz rojos de tanto llorar, pero aún así no me quiso decir nada, y no lo forze a decirme nada, así que solo lo abraze.
Todos la extrañamos, claro que para Dimitri las cosas fueron un poco más complicadas, para que el no se debilitara mamá tuvo que hacerle un echiso, si un alpha ya encontró a su mate, y no está con su luna, el se debilita, aunque no es como si la manada le importara mucho en ese entonces, por casi un año fue Kane quién se tuvo que encargar de la manada.
— Aarón — me llama Emma, ajena a mis pensamientos
— ¿Si?
— ¿Y si volvemos a la cama? — suelto una carcajada
— Si, volvamos.
Nos levantamos y volvemos a la habitación, sonrió, al verla correr hacia la cama, ella deja salir un suspiro, se voltea y me mira, camino hacia ella y me quedó al frente de la cama, me entra algo de duda, se nota que me quiere decir algo pero no sabe cómo, así que espero pacientemente, hasta que decide hablar.
— Aarón, yo... Tengo que decirte algo.
— ¿Qué sucede? — Ella vuelve a suspirar
— Estoy embarazada.
ESTÁS LEYENDO
El Renacer ~¿Un Mate? 2
WerewolfMiles de recuerdos llegan a mi mente, su voz, su sonrisa, sus ojos verdes. Fueron muchos los momentos en los que disfrute con ella, y la odio, la odio por querer protegerme, ese es mi deber, cuidar de ella, entonces uno de los recuerdos que más me d...