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Los dedos largos y delgados de la rubia con ojos chocolate acomodaban mi corbata con delicadeza, sonriendo alegremente para tratar de animar al novio más fúnebre que se haya visto jamás.

- Todavía estás a tiempo, Win. - Me dijo mi madre a un costado. Sudaba preocupación por cada poro cutáneo. - piénsalo de nuevo.

- No tengo nada más para pensar, mamá. Me voy a casar con Nani. - le respondí luciendo seguridad. - Voy a llevarme este traje, empáquelo, por favor. - le sonreí a la chica que seguía ayudándome.

- De acuerdo, éste será, entonces.

Me quité el saco y se lo pasé, luego caminé hacia el probador para quitarme el resto del conjunto.

Ya había tenido suficiente tiempo para pensarlo y la realidad es que no tenía razón para rechazar su propuesta; ninguna razón, salvo que no lo amaba. Aún así, él lo sabía y no me había forzado a aceptarlo. Además, mis anteriores relaciones tampoco fueron mucho mejor a compartir saliva con Nani.

No creía que se pudiera llegar a sentir algo tan increíble, después de todo.

Romantizamos las cosas para que parezcan más dulces y apetecibles de lo que realmente son, de eso se trata el entretenimiento; pero es tiempo de reventar la burbuja y empezar a velar por otro tipo de intereses que fueran más palpables.

- Tenga un buen día, estoy segura de que se verá muy guapo el día de su boda. - me halagó la chica en recepción una vez más.

- Gracias, igual espero que tengas un buen día. - le sonreí y me salí del lugar.

Claro que me vería guapo, porque yo ya era guapo desde antes de estar comprometido.

Apenas le di a Nani la aprobación para alardear de nuestro compromiso con libertad, ya había cientos de periódicos y revistas que tenían nuestros nombres en el encabezado de sus noticias.

Internet y la televisión abierta no deberían ser muy diferentes.

- Win, te pido que recapacites. - me insistió mi madre mientras se introducía en el auto.

- ¿No dijiste que parecía un buen chico cuando lo viste en mi casa, mamá? Sólo acéptalo. Es guapo, rico y respetuoso. No habrá mejor partido que él. Es todo lo que las madres sueñan para sus hijos.

- Sí, Nani es un hombre increíble y me agrada demasiado, pero me agradaría mucho más si realmente fuera el hombre que amaras. ¡No puedo concebir que mi único hijo esté a punto de casarse por interés! No tienes necesidad, tu escuela va bien, ¿Para qué lo necesitarías?

Mi madre sonaba tan desesperada y me atreví a mirarla sólo para confirmar que sus ojos estaban atiborrados de lágrimas hasta el tope.

Yo mismo sabía que podía parecer una locura, pero más loco iba a estar si me quedaba esperando a que llegara el amor de mi vida desde no sé dónde y me mostrará un mundo color de rosa.

Me había acostado con más de quince chicos diferentes a lo largo de mis veinticinco años y ninguno de ellos se quedó en mi cama más de dos meses.

Estaba aburrido y cansado de esperar por algo como eso. En su lugar, podía solamente preocuparme por mantener mi escuela en buen funcionamiento y llegar a casa a divertirme con Nani como si fuera un mejor amigo.

¿No es eso lo que tu pareja debe ser?
Tu mejor amigo.

Lo oí a menudo.

"Tu pareja debe ser también tu mejor amigo"

Pues bien se ha dicho, no me lo tienen que repetir. Me casaré con Nani y asunto resuelto.

>>Ojalá que mi mamá fuera capaz de entenderlo como yo lo hice. <<

Disuelve Tu Matrimonio. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora