*El destino que nos unió*

6- "¿Una cita?"

Al despertar no pude evitar recordar la noche anterior, Thiago dijo que me amaba y yo le correspondí, pasé toda la noche soñando con sus ojos turquesa que me observaban con amor y sus labios sobre los míos.

Me levanté y tomé una ducha para luego bajar a preparar el desayuno. Al llegar a la cocina ahí estaba Asli haciendo unos waffles para desayunar se veían deliciosos.

Clara: ¿necesitas ayuda?- dije mientras me acercaba hasta su lado.

Asli: ya esto está casi listo, si puedes ve a poner la mesa.

Tomé los platos y comencé a poner la mesa hasta que sentí un olor familiar a mi lado

Thiago: te ayudo- dijo mientras tomaba uno de los platos y los ponía en su lugar.

Gracias- le dije.

Thiago: Clara yo quería preguntarte si ...

Fue interrumpido por los chicos que venían bajando las escaleras.

Ya está el desayuno- dijo Marcos mientras tomaba asiento.

Aquí lo traigo- dijo Asli entrando al comedor y poniendo los waffles en la mesa.

Yo traeré el jugo- dijo Naty.

Desayunamos todos entre risas y luego entre todos levantamos la mesa y limpiamos todo lo que ensuciamos.

Estaba en mi cuarto viendo una película hasta que sentí que tocaban la puerta de mi habitación. Fui a abrir y me encontré con...

Clara: hola Thiago, necesitas algo.- le pregunté con una sonrisa.

Thiago: quería preguntarte si quieres venir conmigo al parque que abrieron nuevo.

Clara: Claro pero deberíamos decirle a los chicos para ir todos juntos.

Thiago: Si dile a las chicas yo le diré a los chicos.

Luego de los chicos confirmar la salida quedamos en salir al día siguiente.

Al día siguiente:

Luego de desayunar nos fuimos al auto. Aunque era un viaje muy largo no fue nada incómodo por el fallido intento de los chicos al cantar hasta llegar al nuevo parque de diversiones. Compramos las entradas y luego nos separamos en parejas.

Thiago: a donde vamos primero.

Observe todo el lugar era muchas atracciones no sabía por donde comenzar.

Clara: no lo sé... las sillas voladoras.

Claro vamos- dijo mientras tomaba mi mano y me guiaba hasta la fila.

Pasamos luego por la Noria donde pude observar la ciudad desde lo alto, la montaña rusa, la atracción de agua donde nos mojamos un poco, el paseo oscuro donde estuve gritando cada que aparecía un fantasma y otras más.

Thiago: te parece si comemos algo- me señaló hasta un puesto de bocadillos y helado.

Clara: si claro me apetece un helado de chocolate.

Pidió los helados para luego caminar con nuestras manos entrelazadas hasta un banco cerca del lugar. Luego de un rato de hablar de cosas triviales fuimos hasta un puesto de juegos donde tienes que disparar a botellas y si caen te dan un peluche. Luego de Thiago disparar unas seis veces al fin logro un gran pingüino de felpa que tenía entre sus manos las palabras te quiero.

Al cabo de unas horas salimos fuera a esperar a los chicos.

Asli: ¿que tal chicos?- pregunto mientras se hacercaba con Marcos.

Todo bien- dijimos Thiago y yo al unísono.

Marcos: Bueno es hora de el picnic solo hay que esperar a...- no terminó de hablar ya que venían Brian y Naty acompañados de un oso panda gigante de peluche.

Naty: mirad chicos lo que ganó Brian mientras jugábamos a tirar botellas.- dijo con una sonrisa.

Asli : Si como no verlo esta gigantesco- dijo mientras alargaba la a y luego se acercó y tomó el peluche en sus manos- bueno chicos, creo que ya que estamos todos debemos ir hasta el parque a hacer el picnic.

Esta bien- dijimos mientras nos encaminamos al auto para partir al parque que estaba cerca de aquí.

Cerca de media hora llegamos hasta el parque, nos bajamos y enseguida fuimos hasta debajo de un árbol donde había sombra. Tomamos la manta y la expandimos en el suelo, luego nos sentamos todos y sacamos la comida y bebida de la cesta, comimos entre risas y bromas recordando cuando éramos niños. Luego de unas dos horas regresamos a casa. Al llegar iba a subir a mi habitación pero la voz de Thiago me detuvo

Thiago: clara quieres ir al cine conmigo está noche-dijo mirándome fijamente.

Clara: claro nos vemos esta noche.-vi como sonreía como niño chiquito y subí a mi habitación sin esperar una respuesta de su parte.

Al llegar arriba fui directamente a tomar una ducha y luego me dirigí a buscar que ponerme. Luego de un rato de buscar me decidí por un vestido negro que me llegaba por encima de las rodillas con un hermoso corte en uve unos tacones negros que combinaban con el vestido, me maquille lo más sencillo posible no me gustaba maquillarme mucho. Baje las escaleras encontrándome con un Thiago concentrado leyendo un libro en el sofá. Al verme me dio una de sus sonrisas encantadoras y tomó mi mano para dirigirnos a su auto -tenemos el auto familiar y además los chicos tienen cada uno un auto propio- luego de irnos en silencio para nada incómodo llegamos al cine nos dirigimos al cartel donde decían las películas que darán y elegimos una comedia luego de comprar las entradas resfrescos palomitas de maíz con mantequilla entramos y tomamos asiento justo cuando iba a dar inicio la película. La verdad fue una buena elección partimos en risa en muchas ocasiones y Thiago ríe algo alto por lo cual algunas personas se molestaban y nos tiraban palomitas. Al acabar la peli salimos del lugar con nuestras manos entrelazadas.

Thiago: te gustó la peli- dice mientras caminamos al auto.

Clara: si estuvo muy divertida.- le dije mientras subía al auto..

Thiago: no tienes hambre podemos ir a por pizza o helado.

Clara: la verdad si con todo lo que comimos y todavía tengo hambre- dije a lo que reímos.

Thiago: pues entonces vamos por pizza y luego helado.- dijo mientras arrancaba el auto.

Al cabo de unos veinte minutos llegamos a una pizzería que estaba abierta, entramos y pedimos pizza de pepperoni con queso y unas malteadas, luego fuimos por helado de chocolate mi favorito, todo estaba muy delicioso, al ver la hora ya eran pasadas las dies y decidimos volver a la casa. Llegamos pasadas las once y todo estaba oscuro los chicos seguro ya dormían, Thiago abrió con su copia de la llave ya que cada uno de nosotros tiene una copia y luego entramos silenciosos para no despertar a nadie. Thiago me acompañó hasta la puerta de mi habitación y se despidió de mi con un beso suave cargado de amor que hizo temblar todo mi ser, al salir de mi trance entre a mi cuarto, me despoje de mi ropa para luego ponerme mi pijama y al tocar la almohada al instante caí rendida a los brazos de Morfeo.