𝐂𝐚𝐦𝐚 𝐕𝐚𝐜𝐢𝐚 : ᵈᵘᶜᵏᵒ : FINALIZADA ✅✅

↷✦; 𝖢𝖺𝗉𝗂𝗍𝗎𝗅𝗈 𝖲𝖾𝗂𝗌 ❞

─────── ✿ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧

───────────────────

｜ ｜ .✧.

｜ .✦.

.✧.

Campos regresaba a su casa con una gran sonrisa, caminando con suma tranquilidad hacia su habitación, aunque antes buscaría los resultados con uno de sus hombres.

Que estaban encargados de la salud de Matías y de lo que, posiblemente, estaba creciendo en su vientre.

─────── ✿ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧ ‧

— ¿Y entonces? — Tomás pregunta ansioso, esperando impacientes los resultados.

— Lealo por usted mismo, señor. — el tipo le dice a Campos, quien recibe un sobre blanco, el cual abre de inmediato para leerlo.

« Nombre: ...
Edad: 22 años
Fecha: ...

RESULTADO DE PRUEBA DE EMBARAZO EN SANGRE

Hormona gonadotropina coriónica en sangre*

Resultado : POSITIVO »

Lo había conseguido.

Había embarazado a Matías después de tanto tiempo intentándolo.

— Perfecto, espléndido, maravilloso. — Campos dice con una gran sonrisa. — ¿Y en dónde está Matias? ¿Lo llevaron a mi habitación? ¿Acaso lo drogaron para que no les diera problema?

— Matias se encuentra en su habitación, señor. Y hoy no le dimos nada, porque se encontraba muy cooperativo. — el tipo le informa a Tomás. — De hecho nos preguntó por usted, y parecía estar un poco triste cuando le dijimos que había salido a una reunión.

— Por lo visto ya entendió la situación. — celebró, guardando lo que tenía en sus manos. — Quiero que preparen una buena comida, y que mañana a primera hora venga un médico que sepa guardar secretos. — ordena.

A lo que el otro asiente de inmediato, dejando que Campos siga con su camino. Ya con la victoria en sus dedos, y con la familia que siempre quiso tener.

───────────────────

｜ ｜ .✧.

｜ .✦.

.✧.

— Matias, hermoso. Ya regresé. — Campos anuncia felizmente, entrando sin avisar a su habitación. — ¿Cómo estuviste sin mi, cariño? — cuestionó, sonriendo cuando vio al otro con una de sus camisas entre sus manos.

— Mal. — Spallatti respondió bajito, sin ver del todo a Campos, que se le acerca en silencio. — Me sentí triste. — confiesa sincero.

Y es tanta su sinceridad, que Tomás quiere creer que no tuvo que secuestrarlo, golpearlo, humillarlo y drogarlo, para llegar hasta esta situación de codependencia.

— Lo siento mucho, corazón. Pero tenía que salir si o si. — Tomás responde, besando suave los labios del otro, para después tocar el vientre ajeno con delicadeza. — ¿Ya te dieron la buena noticia? — pregunto bajito, mordiendo el labio inferior del morocho.

— No. — Matias dijo, soltando un gemido cuando el otro le mordió. Sintiéndose completo con la compañía de Campos, a pesar de haberlo odiado a muerte hace semanas.