Nuestro último diciembre | jakehoon

(VIII)

Jake comprendía ahora los celos que había sentido Sunghoon con aquel alfa. 

― ¿Ya entiendes? ¿Viste que no estaba loco? ¿Viste? 

― Di lo que quieras, no estoy celoso. 

― Está bien sentir celos, pero depende de como lo tomes, los celos son algo normal en una relación, pero si te dejas cegar por dichos celos terminas tirando todo a la basura. 

― Que profundo te escuchaste. 

― ¿Verdad? No sé de donde salió eso. 

― Como sea, estoy celoso, sí, pero no me pondré a pelear con Yujin, confío en ti, claro si se pasa de intensa le recordaré su lugar, no es nuestra amiga siquiera. 

― Jamás le haría caso, no es mi tipo. 

― Salgamos hoy. 

― Hoonnie oppa. 

― ¿Qué quieres? 

― Escuché que es bueno en Literatura ¿Podría ayudarme con eso? Tenemos lección y no entiendo bien algunos temas. 

― ¿Cuándo? 

― Esta tarde, la lección es mañana. 

― No puedo esta tarde, estoy ocupado, tal vez en otra ocasión. 

― ¿De verdad tiene algo más importante que ayudarme a estudiar? 

― Sí, es mucho más importante que ayudarte a estudiar, pero mira, puedes pedirle ayuda a Gaeul, es muy bueno también. 

― Oppa, pero yo de verdad quiero que usted me ayude, Gaeul noona me da miedo, es muy seria y creo que yo no le agrado. 

― Gaeul es seria con todos, pero si le pides ayuda no se negará, no te preocupes. 

― ¿Está seguro de que no puede ayudarme? Por favor oppa, le juro que soy buena estudiante. 

― Si lo fueras no estarías rogándome que te ayude. 

― Pero oppa ―Yujin estaba llegando muy lejos, Sunghoon no era del tipo que tolera el contacto físico, lo odiaba en realidad, sólo Jake podía acercarse tanto a él―. Por favor. 

― No me toques, ya te dije que no te ayudaré, vete. 

― Oppa. 

― Yujin, vete. 

La chica tuvo que irse, Jake no retrocedería, pero ella tampoco se quedaría de brazos cruzados. 

― Jake. 

― Un poco de respeto no te vendría mal ¿O es que quieres una clase de modales? 

― No me importa si estoy siendo grosera, en realidad estoy harta de fingir que me agradas. 

― Bueno, deberías practicar más tu actuación, tu rostro debería ser más neutral como mínimo. 

― ¿Te crees mejor que todos por ser bueno en matemáticas? 

― No, a diferencia de ti, yo sí me esfuerzo. 

― No lo entiendo, tu cuerpo no es el mejor, tus rasgos faciales no son tan atractivos y luces muy intimidante para ser omega, además de que eres algo alto. 

― ¿Y eso qué? No vivo de lo que la gente vaya a decir sobre mí, a menos que me haga modelo o alguna clase de figura pública, las opiniones no me dan dinero. 

― Es confuso, quiero decir, tienes una considerable cantidad de alfas haciendo fila por ti, no es una gran cantidad, pero de todas formas. 

― Querida, escucha esto y quiero que lo comprendas bien, si tú tienes más alfas que yo queriendo algo contigo es porque te consideran fácil, no eres un corazón difícil de conquistar y tampoco un cuerpo complicado de poseer, es cruel oír algo como esto, pero alguien debía decirte en la cara lo que todos dicen en los pasillos sobre ti. 

― Eso no me interesa, la gente siempre habla. 

― ¿No te importa que te llamen zorra, puta y ofrecida? Vaya, que poca autoestima tienes, yo destrozaría a cualquier persona que se atreviera a decir algo así sobre mí. 

― No me importa mucho, soy famosa, estoy en la boca de todos, no me importa la razón. 

― Que triste forma de ver la vida. 

― Te tengo una pregunta. 

― Anda, pregunta ¿Qué quieres saber? 

― ¿Cómo conquistaste a alguien como Hoon oppa? ¿Qué hiciste? ―Jake contuvo la risa ya que estaban en la biblioteca―. ¿Por qué te ríes? ¿Dije algo gracioso? 

― Sí, muy gracioso, disculpa, no eres la primera persona que me pregunta eso, pero respondiendo a tu pregunta, no tengo ni la menor idea. 

― ¿Cómo que no? Algo tuviste que haber hecho. 

― Te diré algo y serás de las pocas personas que lo sepa. 

― ¿Qué cosa? 

― Cuando le pedí que sea mi novio le di una rosa y se lo dije así sin más, si alguien me dijera que hizo algo parecido me reiría en su cara, es algo ridículo y vergonzoso, pero como ves, dijo que sí. 

― No lo entiendo. 

― Ni yo, tampoco lo sé, tampoco sé que es lo que le gusta de mí, pero sé que le gusto, sé que me elegiría antes que a nadie, sé lo importante que soy para él. 

― Tiene tantos omegas rogando por pasar un rato con él ¿No tienes miedo? ¿No sientes un poco de celos? 

― Tal vez un poco de celos, pero miedo no, la verdad es que no, confío en él, bastante la verdad, es un buen alfa y es una de las razones por las que me gusta tanto. 

― ¿No tienes miedo de que pueda quitártelo? 

― Si Sunghoon llegara a engañarme contigo, cortaríamos enseguida, pero sé que eso jamás va a pasar, porque en primer lugar, no lo conoces, no sabes lo que le gusta, no sabes que es lo que quiere en su futuro, no sabes nada sobre él, y en segundo lugar, sólo te interesa por su dinero y su físico, así no tiene ningún caso. 

― Yo sería mucho mejor que tú. 

― No lo creo. 

― Hagamos esto, competiré contigo para ganarme su amor ¿Qué dices? Que gane el mejor. 

― Esto no es una competencia porque Sunghoon no está en juego. 

― Eso no lo sabes. 

― Mejor ve y agradécele a Gaeul, no sabes las cosas que te harían si no fuera por ella. 

― ¿A qué te refieres? 

― ¿No lo sabes? ¿De verdad no lo sabes? Vaya.  

― No tengo idea de a que te refieres. 

― No puedo creerlo, todo el mundo lo sabe, Gaeul fue la que golpeó a esos chicos que apostaron por ver quien se acostaría contigo primero, Gaeul le dejó en claro a todo el colegio que si alguien hacía esa clase de comentarios acerca de ti cerca de ella otra vez, eso sería lo último que haría en su miserable vida, no puedo creer que no lo sepas, todos en el colegio hablan sobre eso, creo que hasta los profesores lo saben. 

― No tenía idea. 

― Me sorprendes cada vez más, bueno, ahora ya lo sabes, adiós.