Nuestro último diciembre | jakehoon

(XXVIII)

Amaneció al fin y Heeseung podría salir del hospital, Kai le había prestado algo de ropa y se había puesto más sobreprotector. 

― Ya dije que estoy bien. 

― Pero ahora hueles a mí. 

― Bien, pequeño celoso. 

― No lo niegues, yo sé que te gusta. 

― Un poco. 

― Bueno, ya están los resultados. 

― ¿Y bien? 

― ¿No prefiere oírlos en privado? 

― Nah, ya que, no es como si me fuera a morir o algo sí ¿Verdad?  

― No, nada de eso. 

― Entonces sólo dígalo. 

― Bueno ―hay que aclarar que el un médico interno el que les estaba dando los resultados, era la primera vez que el pobre chico daba una noticia como esa a alguien―. ¿Cómo lo digo? ―una enfermera iba pasando y el chico la vió―. Enfermera Park. 

― No, es tu responsabilidad decirles, no te ayudaré más. 

― Bien, joven Lee, está en cinta, tres semanas de gestación. 

― ¿Qué carajos? ―Heeseung no escuchó el resto, sólo cerró los ojos y fingió que sí escuchaba. 

Por otro lado, Kai sí que escuchó. 

― Bueno, los dejo solos, el doctor Kim vendrá pronto. 

― Heeseung, no me ignores. 

― Estaba pensando. 

― Estabas ignorando al pobre chico. 

― Era eso o que piense que lo quiero matar. 

― Tu mirada no da tanto miedo. 

― Es porque ya te acostumbraste. 

― Supongo, pero no me cambies de tema. 

― Está bien, sé que no quieres tener hijos, pero mi madre no me dejará abortar, está loca. 

― ¿Le tienes miedo a tu madre? No creo que pueda ser tan mala. 

― No la conoces, amenazó con llevarse a Jake a Australia si abortaba, y eso es sólo algo suave, está loca ―Heeseung miró a Kai al fin―. Bueno, de todas formas no importa, no tiene porqué enterarse, pero si se entera es capaz de mandarme a Australia con su suegra y esa mujer sí que está loca. 

― Oye. 

― ¿Pero qué demonios estoy diciendo? Ya soy un adulto, puedo hacerle frente a mi madre ―Heeseung cerró los ojos―. No, no puedo, si se junta con su suegra es mi fin, con todo, quiero que pongas rosas blancas en mi tumba, rosas blancas y lirios, para darle ambiente, si me voy a morir por lo menos que sea vea lindo. 

― Heeseung. 

― Y si mi padre se une a ella se acabó todo, pero todo sería distinto si la abuela siguiera viva, abuela, tú solucionarías esto sin que la loca de mi madre me mate. 

― ¡Heeseung! 

― ¿Qué quieres? 

― Escúchame. 

― ¿Qué dirás? ¿Qué esto se acabo? Por favor, ya lo sé. 

― No, Heeseung, escucha un momento, por favor. 

― Bueno, ya habla. 

― ¿Quién demonios dijo que no quiero tener hijos? 

― Tú. 

― Bueno, cambias las cosas, si es contigo encantado. 

― Cierra la boca y deja de jugar. 

― No estoy jugando, sabes que no soy así, estoy siendo sincero contigo, si tus padres son el problema entonces preséntamelos, me amarán. 

― Kai. 

― Cuando dije que quiero una vida contigo estaba hablando en serio, me encantas Heeseung. 

― ¿Cómo puedes decir eso? 

― Tal vez es que a mi corazón le gustas. 

― No uses una canción de Ni-Ki y Sunoo para convencerme. 

― Hagamos esto, nadie se enterará hasta que hablemos con tus padres, relájate, seguirás con la filmación y luego vemos. 

― Bueno, sólo quedaba una semana de todas formas. 

― ¿Viste? Confía en mí. 

― Quiero llorar. 

― Hazlo. 

― Eres demasiado bueno para ser verdad. 

― Recuerdo que habías dicho que soy demasiado tonto para ser verdad. 

― Eso también. 

― Si Jake se entera me mata. 

― ¿Y ahora te das cuenta? 

― No lo había pensado, pero es que Jake da miedo, aún recuerdo como me miró en la fiesta, parecía que iba a matarme en cualquier momento, tienen eso en común. 

― Lo sé, cuando éramos niños le dije que jamás debía bajar la mirada ante nadie, nadie debía poder hacerlo sentir menos, siempre ha sido un poco inseguro, ahora ya no tanto, pero cuando era niño era muy diferente. 

― Por suerte te tenía a ti, eres genial. 

― Gracias Kai. 

― ¿Por qué? 

― Por todo, por ser mi amigo y por estar conmigo, te quiero. 

― Y yo a ti.