Capítulo 2.

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— Entiendo...— Dice volviendo a esa postura. — Bueno, entonces que se queden con todo. Sí eso ayuda a los omegas de aquí, entonces no me molesta. El dinero no es problema para mi. — No hace más preguntas ni comenta al respecto. Revisa sus uñas mientras esperan.

Cuando todo queda listo, Geumhyun sale de la Oficina. Hasta el momento, el acompañante de la alfa ni siquiera había volteado a ver al Omega. Los 3 caminan aunque Jisung lo hace a una distancia más prudente.

— ¿Hay alguien en este lugar de quien quieras despedirte? — Pregunta ella de pronto. — ¿Algún amigo o algo? Porque te advierto que, una vez que salgamos de aquí posiblemente no vuelvas a ver a nadie. — Menciona. Aquello era algo de lo que los omegas debían estar consientes. Una vez que los Alfas pagaban por ellos, dejaban de ser de sus padres para ser de quien los adquiere. Sin embargo y pese a que el no tenía padres, Ella le estaba siendo muy permisiva. — Te llevaré a mi manada, Esta en una reserva protegida... Tendremos casi todo el bosque para nosotros solos... Bueno, Nosotros y nuestra manada. —

—Si usted lo permite, me gustaría despedirme de Felix, él es mi único amigo y es menor de edad así que no particó hoy, debe de encontrarse en los salones de arte que están cerca a los dormitorios. ¿Podría por favor despedirme de él? —

Geum asiente. Era lo menos que podía concederle de momento.

Yang estaba completamente consciente de la posición en la que se encontraba, ahora era propiedad de la jóven pero al tener la oportunidad de despedirse del omega menor, lo haría. No lo había hecho esa mañana ya que pensó seguiría en la escuela como había pasado en años anteriores.

Félix era dos años menor que él y era a sus ojos, el omega ideal, Contrario a todo lo que se decía de su personal. Todo lo que los estándares buscaban: amaba los niños, excelente cocinero y todo lo demás como atender a un esposo, mantener limpio un hogar o simplemente ser bueno para parir cachorros.

Pese a lo perfecto de aquel omega, Lee jamás le habia tratado de forma despectiva como los otros y otras, incluso le había ayudado varias veces en sus clases aun siendo menor que él.

— Te daré unos 10 minutos o menos, Debemos irnos rápido pues el camino a casa es largo. — Advierte ella. Ambos comienzan a caminar por el lugar.

— Yo tengo 23 Años... No me equivoqué al pensar que eras menor. — Dice mientras él le guía. — Me gusta tu cabello... Es bonito. —

— Descuide, no la haré esperar.

Una vez pudieron retirarse comenzó a guiar a la alfa al lugar mencionado, en esa area se encontraban los omegas de penúltimo año. Sonrió levemente por aquel alago, al menos físicamente parecía ser bonito para ella.

— Es aqui. ¿Quiere ingresar conmigo?

— ¿Cómo te haría sentir más cómodo? — Pregunta. — Quizás quieras privacidad así que mejor te espero aquí. — Menciona. La Alfa era tan bonita, Tenía una belleza poco común y un cuerpo bonito, Su porte era Fino y elegante pero a la vez firme como el de cualquier Alfa puro. Y poseía un fresco aroma a menta.

—Muchas gracias, no tardaré...

Sonrie y dándose media vuelta finalmente ingresa a la sala, dirigiéndose directamente a la penúltima puerta, la habitación de su amigo.

Inmediatamente al ingresar y ver al chico se lanzó a los brazos de este para abrazarlo con fuerza, le extrañaría, fue la única persona que siempre le apoyo en ese lugar y el unico que le tenía fe.

—¡Lix! me escogieron hoy, ¿Puedes creerlo? Finalmente me eligieron y me iré con nadie más ni nadie menos que con la alfa del Clan Kim.

El omega menor reaccionó primeramente sorpresa y después con una sonrisa, feliz de ver a su amigo tan ilusionado. Finalmente lo habían elegido pero no sólo era eso sino que el mayor había conseguido un gran partido y hasta Félix lo sabe pues varios conocian de aquella alfa, enseguida comenzó a hacerle preguntas. — ¿Qué? ¿Es en serio?  He odio hablar de esa familia... Son muy poderosos y son conocidos por tener a la única Alfa Hembra del Reino en su clan. — Menciona. — Dice que será la heredera pues pese a ser la menor, ella es la única alfa aunque también se rumora que tiene un carácter bastante difícil... ¿Es cierto? —

— Ah, bueno... no hemos hablado mucho pero conmigo ha sido amable. — Comenta encogiendose un poco de hombros, si habia sido bastante firme con los demás,  pero con él fue bastante suave. Incluso se atrevería a decir que cariñosa. — Ella me permitió venir a despedirme. — Agrega con una sonrisa.

— Los altas nunca dejan hacer eso a sus parejas... Supongo que es buena señal. — Sonríe levemente y suspira. — ¿Entonces ya debes irte? — El pelinegro asiente por lo que Lee se acerca y lo abraza. — Mucha suerte y por favor, nunca olvides que eres un gran Omega. — Dice aceptando que su amigo ya debía irse.

Jeongin sonrió levemente y correspondió al abrazo con fuerza, haciendolo durar mas tiempo. —Eso espero. Gracias por todo Lix, en verdad voy a extrañarte... Pero sé que estarás bien con tu alfa cuando llegue tu momento, yo debo irme con la mia, prometi no hacerla esperar. —

⋅•⋅⊰∙∘☽༓☾∘∙⊱⋅•⋅

Jisung se encarga de colocar las pertenencias del Omega en la cajuela de la camioneta, las cuales a decir verdad no eran muchas.

Solo unas cuantas  prendas que el chico recibía gracias a los donativos del orfanato y algunos cachibaches que conservaba por el valor sentimental que para él significaba.

Mientras tanto la mujer tecleaba algunas cosas en su teléfono y Jeongin... El solo estaba parado a su lado mientras esperaba quieto y en silencio. Ni siquiera quiere levantar la cabeza por vergüenza.

No vergüenza de que lo hubiera elegido una Alfa hembra sinó que, A pesar de haberse arreglado muy bien dándose un buen baño y poniéndose su mejor ropa, al lado de ella parecía ser un 0 a la izquierda.

Nada comparado con esa elegante y muy empoderada loba.

— Listo, Señorita Kim... — Menciona Han Cerrando la cajuela.

— Gracias. — Esta guarda su teléfono en su bolso para después mirar a su nueva pareja. — ¿Qué se supone que estás haciendo? Me está irritando demasiado... —

Jeongin salta en su lugar por la repentina llamada de atención. — ¿Me habla a mi, Alfa? —Pregunta  tímido.

— ¿Y a quien más le voy a hablar? — Responde seria. — Deja de mirar al piso como si fuera lo más interesante  que hay en tu vida, eso me irrita bastante. Entiende que ahora tu lugar es el de ser mi compañero así que te quiero seguro de ti mismo y muy orgulloso. — Sin pedir permiso ella le levanta el mentón para hacerlo elevar la cara. — No le debes nada a nadie así que ojos al frente. —

— Lo siento, Alfa. — Tal y como lo ordenó, Este se mantiene con el rostro en alto.

— Ahora entra. Mi territorio queda algo lejos así que debemos partir ahora para llegar pronto. — Índica la Alfa.

A Jeongin le hubiese gustado poner en práctica sus modales, demostrarle a la chica que era un muchacho caballeroso y cederle el paso pero al escucharla imponer su autoridad, Jeongin solo obedece sumisamente introduciéndose de una en el asiento trasero, siendo seguido por ella que también entra cerrando la puerta  y sin más, La camioneta arranca.

Mi Dulce Omega.  ©    [Yang JeongIn]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora