Fragmentos | Destino#2

Capítulo 23

Lamento si la conciencia de estos dos están ausente en este capítulo, mis personajes me hablan cada vez que me centro, respiro hondo y los busco en mi corazón, nunca soy yo, son ellos. Suena raro, lo sé pero es así.
Aún así no están ausente del todo. Estoy pasando por un mal momento y eso mantiene a esos dos un tanto distante.

Ni siquiera elegí las fotos bien para el banner 🤦

Un gran abrazo, saludos y gracias a todx por leer💖

.Eithan Scott.

Tenemos días de haber regresado a nuestro país de hecho lo hicimos con anterioridad porque el libro de Alicia, salió en físico y tenía la firma del mismo.

La acompañe en todo momento, manteniendo un poco la distancia, pero observarla sonreír ante sus nuevos lectores, contemplarla feliz por su logro, admirarla brillar como la mujer espectacular que es. Me hizo sentir orgulloso de ella.

Somos muy afortunado de la mujer que tenemos.

Tomamos la decisión de viajar, encontrarnos con Madison y Liam, debo decir que fue una grandiosa idea.

Despertar con ella durante estos días a mi lado, ha sido esplendido.

La contempló hablando diminutivamente al bebe que conserva en sus brazos, mientras le regala una hermosa cita.
—Eres un bebe precioso.

Mirar esa escena despierta  nuevamente  la idea de tener una familia y juntos formar un hogar.

—...Ya le falta poco a la cena para que este lista  —dice Madison, sentándose a mi lado y entregando una gaseosa.

Observó a mi lado y la veo abrir una gaseosa, tomando.
—Viva la vida fitness.

Elevó la ceja.
—La gaseosa no es buena.

—Dije viva la vida fitness, no quiere decir que yo la este viviendo. Echaba de menos tomar algo de gaseosa, comer comida chatarra. Sentía que moría en cada ejercicio, no entiendo como vos lo haces y mucho menos tu chica.

Niego con la cabeza indignado.
—Te dejaré disfrutar de gaseosa. Ayudare a Liam con la cena —comento y me levanto, deteniendome al instante haciendo que tome asiento nuevamente.

—Quedate quieto, pulgoso. Sabéis que eres la visita.

—Sabeis qué llevamos dos días aquí, dejamos de ser visitas desde que transcurrió la primera hora.

Pone los ojos en blanco.
—Me da igual. Ahora que recuerdo haber visto algo de hace pocos minutos atrás, parece que existen cosas que nunca cambian, ¿No?

La miro confusa.
—¿A qué te refieres? Insoportable.

Me señala con la cabeza hacia donde se ubica Alicia, y me señala con el dedo acusador.
—La seguís mirando con admiración.

Esbozo  una leve sonrisa.
—Y dudo que algún dia deje de hacerlo.

Hace una mueca divertida y toma otro sorbo.
—Jamás pensé escuchar a Eithan Scott, diciendo cosas lindas. Creo que voy a vomitar.

—Jamás pensé que podría llegar a odiarte.

Me golpea por el hombro.
—Vale idiota, me adoras. Soy como una pulgar que nunca abandona su perro.

—Y yo agradezco que seas esa pulga. —La sujeto del hombro y la acuesto en mi pecho.

Madison es la única chica con la cual he podido ser yo mismo. Incluso vio mis peores facetas y se quedó siendo mi amiga fiel, confidente. Nunca le he dicho que la quiero, tampoco creo que haga falta porque entre nosotros sabemos que existe un cariño único.