Only Love (Camren)

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Narrador

- Camila... ¿Podemos hablar? - Preguntó Lauren algo desanimada.

- Claro - Respondió Camila con una sonrisa muy notoria.

- Bien...pero…podríamos ir a algún lugar fuera de casa, me gustaría que habláramos en un lugar más…privado - Aclaró con el nerviosismo a tope.

- Seguro, hay una cafetería a un par de calles de aquí, podríamos ir ahí si te parece - Ofreció Camila ya algo dudosa al notar el nerviosismo de Lauren, está solo asintió y ambas salieron de la casa con Lauren conduciendo el coche.

Llegaron al lugar y Camila vio los deliciosos postres que tenían para vender, Lauren no dudo en comprarle uno. Ahora estaban una Camila muy feliz con su postre y una Lauren muy nerviosa por lo que estaba a punto de pasar.

- Y bien.... ¿de que querías hablar?- Preguntó Camila, ella estaba emocionada a decir verdad, esperaba que Lauren diera un paso en su relación pero como siempre dicen; espera lo inesperado...

- Camila...yo...no sé por dónde empezar - Declaró sin dirigirle la mirada, sintiéndose completamente avergonzada.

- Pues solo di o pregunta lo que quieras - Dijo Camila tan ansiosa.

- Camila...lo siento...de verdad no sabes cuánto...pero..... tienes derecho a saberlo – Lauren cerro los ojos, incapaz de ver a la morena – Yo…le pedí a Keana que sea mi novia - Soltó Lauren como pudo, odiándose por completo.
Camila pudo escuchar como su corazón se rompió, la taza con café que llevaba a su boca de pronto cayó al suelo sonoramente haciéndose añicos.

- Déjame explicarte - Pidió Lauren viendo a Camila llorar.

- No no no no, no me tiene que explicar nada señora, más bien...perdóneme a mí...yo...yo me equivoque, usted no me tiene porque dar ninguna explicación. Después de todo…yo…solo soy la niñera de su hija, una empleada más - Decía Camila con el llanto a tope y agarrando sus cosas para salir de ahí.

- Camila…por favor escúchame - Rogó Lauren.

- No, no la quiero escuchar y no quiero que me diga absolutamente nada - Pidió con su voz entrecortada saliendo de ahí.

- ¡Camila, por favor espera! - Pidió Lauren pero Camila ya había salido de ahí.

Lauren llamo al mesero pero no tenía tiempo de esperarlo así que solo dejo el dinero pagando lo que habían consumido y salió corriendo para alcanzar a Camila.

Camila iba tropezando con las demás personas que estaban el lugar, pidiendo perdón por chocar con ellos. Llegó a la fila donde algunos esperaban un taxi pero Camila no podía, no quería tener que hacer una fila y esperar a que Lauren la alcanzará. Rebasó a todas las personas en la fila, algunos murmuraban cosas como; "¡Haz la fila!" "¡Oye! ¡¿Qué te pasa imbécil?!" "¡Espera tu turno idiota!". La morena no hizo caso a ninguno y pidió un taxi con urgencia, la que estaba atendiendo le hizo caso y llamó.
Pudo escuchar a Lauren gritar su nombre desesperadamente pidiendo que la esperase pero ella no podía y no quería esperarla. Sin embargo Lauren logró alcanzarla tomándola del brazo fuertemente.

- Camila por favor no te vayas permíteme explicarte las cosas - Pidió sin soltarla.

- Señora usted no tiene por qué explicarme nada, yo solo soy una tonta empleada que confundió las cosas y...y usted es mi jefa, por favor suélteme - pidió  entrecortadamente.

- No, no eres una tonta empleada por favor no digas eso, escúchame te lo pido - Rogó Lauren.

- Claro que soy una tonta, por haber creído cosas que no son, y si tiene un poquito...un poquito de consideración le pido que por favor me deje ir… - Camila estaba destrozada tratando de soltarse del agarre de Lauren.

- Camila te lo suplico…

- Señora por favor...por lo que más... - Suspiró - Por lo que más quiera…suélteme - Logró soltarse del agarre de Lauren.

- Está lloviendo, por favor toma mi abrigo al menos - Ofreció Lauren.

- No, señora...no quiero nada de usted - Dijo para por fin dejar a Lauren sola y ella salir del lugar. No quiso esperar al taxi así que decidió irse caminando a donde sea que sus lágrimas se lo permitieran.

Después de algunos minutos caminando se permitió llorar debidamente, no pudo aguantar más así que solo se sostuvo de un poste que encontró en una orilla del camino por donde iba.
A su mente lo único que pudo llegar fue el deseo de que su mamá estuviese con ella.

- Mamá, si estuvieras aquí todo sería diferente. Como te necesito en estos momentos... - Dijo en voz alta sentándose en una banca que encontró.

Después de algunos minutos sollozando siguió su camino y sin darse cuenta llegó a su casa.
Cerró la puerta sonoramente y se sentó en el sofá que estaba en la sala. Dinah iba saliendo y vio a su amiga llorar desconsoladamente, rápidamente acudió a ayudarla.

- Chancho ¿Qué demonios pasó? ¿Te hicieron algo? Estás empapada, voy por una toalla – Decía en estado de shock al ver a su mejor amiga en ese estado. La abrazo y dejo un beso tierno en su frente - Mira tus venas están hinchadas y tus ojos también - Dijo preocupada - Voy a hacerte el té que te ayuda cuando te pones así ¿Okay? Solo dame un momento… - Informó.

- No Dinah, no me dejes...te necesito más que nunca, olvida el té y abrázame como si mi vida dependiera de eso, te lo suplico - Exclamó Camila a como pudo.
Dinah obedeció y la abrazó cariñosamente, Camila reposaba su cabeza en el hombro de la rubia manchando su blusa de lágrimas.

- Ahora dime... ¿Qué fue lo que paso? ¿Quién te hizo esto? - Preguntó Dinah después de ver a su amiga un poco más calmada.

- Lauren...Lauren me dio la peor noticia que pude recibir jamás - Dijo limpiando lo que quedaba de sus lágrimas.

- Pero...si apenas unos días estabas hablando maravillas de ella - Dijo asombrada.

- Dinah no ayudas - Exclamó Camila.

Minutos después Camila le contó todo a Dinah, esta quería ir y dejar sin dientes a Lauren por causarle daño a su muy enamorada amiga. Trato de consolarla pero nada servía, nada ayudaba. Camila solo se resignó a todo y le pidió a Dinah que dejase el tema.

- ¿Y piensas volver ahí? - Preguntó Dinah refiriéndose a que si Camila volvería a la mansión.

- Hoy no, no quiero y no estoy en condiciones - Respondió Camila - Pero...tengo que volver, no puedo dejar a mi Ale sola. Ella odia a Keana y conociendo a Keana le hará la vida imposible así que no la puedo abandonar, no ahora que más me va a necesitar - Finalizó Camila pensando en cómo reaccionaría Ale a la noticia de que su mamá iba a ser novia de Keana.

Dinah asintió a las palabras de Camila, pase lo que pase siempre la apoyaría en lo que ella decidiera, se lo prometió un día y las promesas se cumplen.
La rubia se dirigió a la habitación de Camila para sacar un pijama y una toalla.

- Date un baño, te ayudará a calmarte un poco, mientras yo te haré un té ¿Está bien? - Ofreció Dinah. Camila asintió y se dirigió al baño.

Después de la ducha y tomarse el té, logró quedar dormida, Dinah la acompaño hasta que eso pasara, estaba a punto de salir de la habitación cuando Camila le hablo.

- ¿Puedes quedarte conmigo hoy? - Pidió adormilada.

Dinah solo asintió con una sonrisa en su rostro y se acomodó abrazando a su amiga. Ambas dormían profundamente ahora.

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:'(