Capítulo XXVI: Un Último Reto antes de una Aventura

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La primera luz de la mañana brillaba desde el cielo del amanecer. Iluminando débilmente el borde exterior de la ciudad.

La deslumbrante luz surgiendo de la cresta de la montaña lentamente reveló la figura y la reflejó. La cara parecía ser de color rojo brillante.

Faltaba poco tiempo para que terminara.

Mientras que nuestras armas se enfrentaban ferozmente sobre las paredes circundantes, entendí eso.

A partir de esa persona, cuyo cabello dorado se mecía, un ataque implacable fue liberado.

Los continuos ataques de su sable eran constantemente rechazados por mi espada. Al mismo tiempo, el tema que impuso era la parte final del entrenamiento. En este último día de entrenamiento, un día antes de tener que irnos de Expedición a los <Pisos Profundos>, demostrare los frutos de mi duro entrenamiento.

Invocando sobre mis brazos un par de guanteletes de color rojo y blanco, bloquee con uno de ellos el sable que sobrevolaba.

Estreche mis ojos ligeramente, usando mi propia fuerza para empujar a Aizu con mi espada, levantando mi brazo derecho antes de lanzarme a atacar.

--<Gran Dragón del Caos, devora el Tiempo y el espacio>.

Aplicando el <Canto Concurrente> hábilmente mientras me movía a gran velocidad y esquivaba o bloqueaba los ataques de Aizu, recité ese canto corto mientras que la joya color azul de mi guante derecho brillaba tenuemente.

-- ———

Mientras que podía sentir como mi cuerpo comenzaba asentirse más vulnerable, y mucho más lento, valientemente me defendí.

Mientras bloqueaba otro, y otro golpe, que de vez en cuando traian un nuevo corte sobre mi cuerpo, sostuve fuertemente a <Bahamut> en mi mano, y luego de unos 5 largos segundos, ataqué.

--¡<Reload on Fire>!

Cuando rompí mi postura defensiva, todo mi cuerpo aceleró ferozmente contra Aizu.

--¡......!

Ella ni siquiera logró reaccionar.

Uno, dos, tres... Innumerables cuchilladas a súper alta velocidad que rompían completamente la barrera del sonido llovieron sobre Aizu antes de que siquiera pudiera darse cuenta. Aunque dirigí todos mis ataques intencionalmente a las zonas de su cuerpo que estaban cubiertas por su armadura ligera, todos mis golpes lograron desequilibrarla en un instante.

El ataque solo duró 5 segundos, y cuando ese tiempo terminó, me alejé para crear un poco de distancia entre nosotros mientras recuperaba mi compostura después de realizar ese veloz ataque.

Frente a mí, quien trataba de estabilizar mi cuerpo después de esa repentina aceleración que tuve, Aizu me miraba completamente en shock.

De repente, una luz brillante descendió del sol de la mañana. Bajo esa luz cada vez más intensa, era difícil abrir los ojos.

Después de ese momento, en el lado opuesto de la luz, tuve la sensación de que esa persona sonreía felizmente.

--Definitivamente, eres un verdadero prodigio para esto......

Aizu tranquilamente murmuró para sí misma.

De las paredes circundantes, se podía ver claramente una parte del sol que había salido de los cielos del este. Esa era la señal que declaraba el final de este entrenamiento de una semana.

Gire mi rostro hacia a un lado temporalmente y observe el paisaje. Luego, cuando mi mirada se cruzó con la de ella, quien también estaba viendo el mismo paisaje, mostré una pequeña sonrisa.

Danmachi: El Aventurero DragonicoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora