My Heart Belongs To Daddy💋 daddy kink💋 | L. Hemmings

💋Love The Way You Lie💋

—¿Estás ocupada?—pregunté cuando Emy contestó la llamada.

—Depende para qué...

—Quiero verte

—¿Me extrañas ya?

—No tienes ni idea—la escuché reír.

—Vale, salgo en una hora del trabajo...tráeme algo rico aparte de ti—eso me hizo reír.

—En un rato voy a buscarte—Colgué la llamada y terminé de vestirme.

Mis encuentros con Emy se habían vuelto regulares.

Ya llevaba dos fines de semana en los que me quedaba con ella en su departamento, me gustaba la atención que me regalaba y a ella le gustaba que le regalara cosas.

Ambos ganábamos.

—¿A dónde vas? —preguntó mi papá al verme entrar en la casa principal, tenía un trago en la mano y se veía muy ebrio

—Voy a salir

—Es la tercera noche consecutiva que sales

—¿Pero quién te entiende?. No te gusta que traiga gente, pero tampoco puedo salir.

—No tienes disciplina—me señaló mientras se terminaba el trago—Vas a ser un fracasado toda tu vida

—Mientras no termine como tú está bien para mi

—¡Oscar!—Natalie lo llamó justo cuando intentó abalanzarse sobre mi para golpearme y bajó corriendo las escaleras.

Estaba tan borracho que no calculó bien y si no fuera por mis reflejos habría sufrido una caía bastante fea.

El vaso se cayó de las manos haciéndose pedazos en el suelo mientras él intentaba empujarme.

Lo sostuve en mis brazos hasta que logré enderezarlo.

—Ayúdame a llevarlo a la cama

Subí las escaleras llevándolo casi que arrastras, no había perdido el conocimiento, aún seguía insultandome pero igual me costó subirlo.

Dejé escapar un gran bocado de aire cuando por fin lo dejé sobre su cama.

Se veía muy mal, nunca lo había visto de esa forma

—Te lo agradezco Luke—dijo Nat mientras intentaba le quitarle la ropa—Estábamos en un evento y no me di cuenta de que estaba bebiendo hasta que comenzó a meterse con los invitados—bufó cuando logró quitarle el saco y aflojó el moño de su corbata

—Con tres tragos ya se borra. El alcohol nunca ha sido su amigo

—Le he dicho que no beba pero él no escucha a nadie—comenzó a quitarle los zapatos—El doctor le prohibió beber más de dos copas porque altera su presión

—Él nunca se había emborrachado así...—la miré mientras le quitaba el otro zapato—¿Por qué quiso hacerlo ahora?

—Lo de Paris lo afectó mucho—me miró por un momento—Sabes lo consentida que la tiene—suspiró mirándo a papá—Aparte tiene algunos problemas con una inversión que hizo, ya sabes...lo de los vinos