- No está en discusión, Jimin - apretaste los ojos después de hablar. Tus puños estaban temblando bajo la mesa.
El rubio soltó aire , se burlaba de ti.
- Ya veo - frunció el ceño y alineó sus labios seriamente mientras jugaba con la taza de café. - Tu padre es un metiche , eso de ser un solteron y además a su edad - alzó las cejas mientras se reía .
Lo fulminaste con la mirada , tu rostro estaba hacia un lado , viendo a la ventana. No hacia mucho tiempo desde que llego a la cafetería para reunirse contigo.
Las bebidas calientes estaban intactas en la mesa. Sabías muy bien que Jimin no bebería de la taza a menos que lo hicieras a su par.
- Entonces - se acercó a ti por encima de la mesa , estirando sus brazos para tocar los tuyos , apenas pudo y te apretó , soltaste un chillido- ¿Estás terminando conmigo? ¿Con Park Jimin? - preguntó con su aura superior.
- Si - dijiste firmemente.
Su rostro palideció de repente. Su agarre se suavizó. Pareció desvanecer en su asiento.
Un suspiro desalentador salió de sus enrojecidos y abultados labios.
- P-pero... ¿Por qué? - aún mirando la ventana con desgano lograste oírlo. - ¿Estas jugando verdad? Tu no , tu no puedes dejarme , tu me amas. Yo te amo bonita.
Al borde de las lágrimas giraste para verlo a la cara. Estaba helado y podías sentir que estabas haciendolo molestar mucho.
- Te amo , pero tú no sabes amar Jimin. No quiero volver a verte, no me escribas ni tampoco me llames , y-...
Se levantó de la silla furioso. - Te vas a arrepentir de esto , mocosa idiota - dejo un par de billetes en la mesa.
Lo viste salir , un escalofrío recorrió tu cuerpo. Sollozaste al escuchar sus pasos tronar contra la madera del establecimiento.
Comenzaba a tornarse hiriente su relación, sus palabras y acciones te hacían daño. De igual modo , no podías continuar con su relación, claro que podías soportar aquello , pero tu padre no aprobaba que salieras con tu jefe , y además Jimin era mayor que tu.
La cafetería estaba solitaria. Jimin siempre buscaba lugares asi para verte, sin que nadie los molestará o viera juntos. En realidad , sentía inconformidad y disgusto con tu persona. Aún así , le gustabas demasiado, te amaba.
Regresar a casa después de su reunión, fue melancólico. Tu padre sonrió amablemente cuando le contaste lo sucedido. - Es lo mejor.
Dijo mientras que soltabas algunas lágrimas. El calor de la chimenea te reconfortó un poco. Era navidad. Lo único que pasaba por tu mente , eran los momentos que con alegría y amor pasaste a su lado.
Volver a la oficina. Subiste los escalones temerosa. Tenías en manos algunos documentos y también una carta.
Entraste al elevador. Jimin no te llamó, ni tampoco te escribió como pensaste. Creiste que ambos buscarían una solución al respecto, pero no dió indicios de tejer interés en arreglar las cosas.
Mientras ibas subiendo , pensaste en una y mil maneras de hablar con el. Pero sabías que todo se borraría de tu mente apenas lo vieras a los ojos.
Cuando la campanilla sonó, parpadeaste rápidamente saliendo de tus pensamientos. Pásate saliva y acomodaste tu cabello.
Tus compañeras de trabajo solo te vieron con incomodidad , sin responder a tus saludo. Caminaste lentamente a la oficina principal.
- ¿Qué hace aquí? ¿El señor Jimin no le avisaría que ya hay alguien ocupado su lugar? - Taehyung carraspeo apenado.
