Tentaciones Prohibidas

Capitulo 2

Dean.

Fama.
Te la pintan como lo mejor que le puede pasar a alguien, pero en realidad apesta. Cuando empecé con mi carrera creí que sería divertido ser reconocido, pero los acosadores, los paparazzis, y la poca privacidad me tienen hastiado. Todos se creen con el derecho de opinar o controlar mi vida, todo tiene que ser perfecto, y con el más mínimo error que cometas, te hacen polvo.

Mi único escape de todo eso es mi casa, me he encargado de hacer que la maldita barda supere la altura normal para así evitar gente indeseable merodeando mi privacidad. Me pregunto si los paparazzi no se cansan de acosar todo el tiempo, ¿no tienen una vida o algo además de joder?.

Me recuesto en una de las camillas tejidas de color negro que están a la orilla de mi piscina iluminada por las luces del fondo, suspiro y trato de relajarme un poco ya que toda la maldita semana ha sido un total caos, tengo a todos sobre mi por los rumores de mi próxima película, y no es para menos; estaré trabajando con Jhonny Deep en ese proyecto. Cierro los ojos dejando que la brisa fresca de la noche me abrace, pero.....

El sonido del timbre de la entrada me arruina el momento, logrando que mi genio se transforme al instante. Me pongo de pie a regañadientes y camino hacia el interior de mi casa para ir a ver quien carajos se a atrevido a molestarme.  Abro la puerta de golpe y Justo cuando creí que no podría ser algo peor....

— Amor — la voz chillona y llena de emoción de Kiara me pone peor de lo que ya estaba.

— ¿Que quieres? — espeto de mala gana y me doy media vuelta para irme lejos de ella. Odio a los paparazzis, pero odio mas las malditas tácticas de marketing que mi managger crea para hacerme quedar bien ante todos y Kiara es una de esas tácticas, pero ella no lo sabe y si lo supiera, todo se iría al carajo.

Camino hacia la cocina para tomar un vaso de agua, me recargo sobre la encimera para beber, pero Kiara aparece para invadir mi espacio personal con sus personalidad extrovertida y cabello rubio.  — ¿Estas de malas? — pregunta haciendo un mohín con los labios mientras me rodea la cintura con sus brazos

— Estoy tenso y solo quiero un momento de paz — la aparto y me muevo hacia otro lugar de la casa. — ¿No ibas a salir con Kendall Jenner?

— Sip — responde con entusiasmo mientras me sigue el paso como perrito tras la pelota — pero antes quise venir a verte

— Ya me viste — me detengo y me giro para mirarla

— ¿Puedo hacer algo para arreglar tu humor? — pregunta con tono insinuante — Tal vez podría cancelarle a Kendall, y así pasar la noche contigo...

— Tengo planes — miento

— ¿Que tipo de planes? — frunce el ceño

— ¿Ahora tu también controlas todo lo que hago? — espeto

— No, pero.....

— Debo prepararme — le corto el rollo — y tú ya has perdido mucho tiempo, no hagas esperar a tu amiga — me doy media vuelta y me dirijo a las escaleras pero su voz me hace detenerme en seco.

— Se la verdad — confiesa — se que no me quieres y que solo estas conmigo por apariencia — continúa mientras que sus ojos se llenan de lágrimas

— Felicidades — digo con sarcasmo — ahora ve y cuéntaselo a todos.

— Jamás te haría eso — me mira — se que te destruiría y yo nunca te haría algo así — asegura — me importas, mis sentimientos por ti son reales... y aunque tú no me quieras, yo..... — camina hacia mi — yo se que puedo hacer que me quieras de verdad.... Que todo esto sea real. — dice y suelto una risa amarga.