Blue (Jenlisa)

Capítulo 28

Lisa vio como los ojos de Jennie parpadearon de regreso a la realidad, de inmediato buscando en la habitación a la familiar chica de ojos mieles. Jennie se encontró con la mirada de Lisa tentativamente, buscando alguna señal de enojo o peligro. Cuando solo se encontró con pura adoración, Jennie se movió rápidamente hacia delante y echó sus brazos alrededor de Lisa.

—Lo intenté—murmuró, apretando los ojos y metiendo la cabeza en el hueco del cuello de su novia. La pequeña chica contuvo la respiración para contener las lágrimas.

—¿Qué?—susurró Lisa, agarrando los hombros de Jennie y separándose—¿De qué estás hablando?—ella observó cómo las lágrimas nublaban los ojos de Jennie. Lisa se movió hacia delante para tirar de su novia en otro abrazo, pero Jennie la detuvo, sacudiendo la cabeza.

—Quiero hablar—Jennie susurró, secándose los ojos. Lisa odiaba ver Jennie luchando, pero la chica de ojos mieles se contuvo. Jennie respiró hondo.

—Y-yo te hice algo malo, ¿no?—susurró Jennie. Antes de que Lisa pudiera hablar, Jennie negó con la cabeza y continuó hablando—No... no me acuerdo de lo malo. Pero... lo intenté, Li—ella levantó la mano y trazó la mandíbula de Lisa con su dedo índice, dejándolo en su cara por un momento.

—¿Lo intentaste?—dijo Lisa suavemente. Ella puso una mano sobre el brazo de Jennie, tratando de aliviarla para que continuara. La pequeña chica asintió furiosamente.

—Las cosas que ellas dijeron...—ella negó con la cabeza—Ellas eran malas—Jennie no comprendía gran parte del significado de lo que recordaba, pero podía saber con solo el tono de las voces de las chicas que eran cualquier cosa menos agradable para Lisa. Y la enfureció.

—Lo intenté, Li, lo intenté—Jennie se mordió el labio—Yo no quería que te dijeran esas cosas, ¡yo no quería!—tiró las manos a los costados, frustrada por su incapacidad para expresar sus palabras.

—Hey, hey—Lisa negó con la cabeza, agarrando las muñecas de Jennie y obligándola a mirar hacia arriba—Respira—susurró, frotando los brazos de Jennie para calmarla—Toma tu tiempo.

—Yo... yo intenté detenerlas—Jennie levantó la mano para rodar su labio inferior entre sus dedos, mirando hacia el suelo.

—¿Lo hiciste?—preguntó Lisa, algo sorprendida con las palabras de Jennie. La chica de ojos café asintió suavemente.

—Esas cosas no eran buenas para ti—susurró Jennie—Me duele saber que no podía ayudar—bajó la cabeza, decepcionada con su propio pasado. ¿Cómo podía haber sido tan fría?

—Me trajo hasta aquí, ¿no?—Lisa apretó la mano de Jennie. La chica levantó la vista confundida.

—Quiero decir, sí, fue un poco malo en el momento. No voy a mentir—Lisa se encogió de hombros y se mordió el labio—Pero, ¿y si no hubiera sucedido? ¿Cómo sería mi vida? ¿Estaría aquí contigo? ¿O estaría en otro lugar?—observó los ojos de Jennie brillar al darse cuenta—No me gustaría volver y cambiarlo y correr el riesgo de nunca conocerte.

—¿Tú... tú no lo harías?—Jennie levantó la vista con incredulidad. Lisa se rió suavemente y sacudió la cabeza.

—Ni en un millón de años—besó la frente de Jennie y extendió la mano para ajustar su moño—Estoy bastante feliz con las cosas tal como son. Y voy a ser aún más feliz cuando todas estas cosas malas...—hizo un gesto por la habitación—Estén detrás de nosotras.

Jennie asintió suavemente. Su mente estaba por todo el lugar. Apenas podía enfocar sus ojos en un solo lugar. Nada de eso tenía sentido, pero todo eso lo hizo. Estaba confundida, sin embargo, completamente contenta. Fue una sensación inexplicable.