Daisy Falcone y Jason Todd eran mejores amigos, hasta que Joker lo mató y ella se quedó sola.
Desde que Daisy descubrió que Jason era Robin, él le dejaba cada noche margaritas y una nota en su mesa de noche. Después de años de su muerte...
Pasaron los días con normalidad y se acercaba la noche en la que acompañaría a Jason a la fiesta de Bruce Wayne. No estaba segura de si debía ir o si Jason debía estar ahí, pero aun así Diane y yo nos comenzábamos a arreglar.
Me puse este vestido:
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Y Diane se puso un vestido negro muy lindo.
Ambas nos sentamos en la sala a esperar a Dick y Jason.
-No te pregunté qué hiciste con el bar la otra vez- dije con una risa algo nerviosa.
-Le dije a una amiga de la escuela que lo atendiera, igual que hoy- dijo con tranquilidad.
Estuvimos hablando de cosas no muy relevantes hasta que la puerta sonó, abrí y me encontré con Dick.
Dick me saludó con una cálida sonrisa y se acercó a Diane, ambos salieron sin dirigirme la palabra, se encontraban muy perdidos en su conversación.
Estuve esperando a Jason por hora y media pero no llegaba, por lo que le envié un mensaje:
Jay ¿vas a venir?
Todavía no me termino de arreglar...
¿Podrías venir a mi departamento?
¿No se suponía que eran las mujeres las que tardábamos en arreglarnos?
Tomé un abrigo y salí de mi casa con dirección a su departamento. Era de día, así que no corría mucho peligro, ni tampoco me confundirían con una prostituta.
Llegué al edificio donde vivía Jason y me acerqué para después golpear su puerta. No abrió, entonces le envié un mensaje pero tampoco lo vio. Inconscientemente giré la perilla de la puerta, la cual no tenía seguro.
Entré en su departamento, escuché el sonido de agua caer, supuse que se estaba bañando y esperé en la sala.
-Y luego dices que soy yo el que irrumpe tu privacidad- dijo Jason saliendo del baño con una toalla en la mano, secando su cabello.
Jason no llevaba camisa, lo miré unos instantes y depués desvié la mirada sonrojada.
-Lo siento- fueron las únicas palabras que salieron de mi boca, a pesar de que no había sido totalmente mi culpa.
Se terminó de arreglar en lo que yo me comía una manzana que encontré en su cocina.
-No tienes nada de comer- dije dándole otra mordida a la manzana.
-Deja de comerte mi mandado
-Solo tienes manzanas y macarrón con queso ¿a eso llamas mandado?- pregunté divertida.
-Sí
Iba vestido con un traje muy elegante y se veía realmente lindo, algo que hizo que me quedara mirándolo por algunos segundos... o quizá un poco más.
-¿Qué me miras?- preguntó mirándome de reojo.
-Nada- respondí con simpleza, desviando la mirada.
Estuvimos caminando un rato en dirección a la mansión Wayne, pero sería un camino muy largo el que nos esperaba.
-¿Dónde están Dick y Diane?- preguntó Jason.
-Se fueron
Me sentía mal de que Diane y Dick nos hubieran dejado, pero me alegraba de que Diane estuviera feliz con Dick.
Tras un arduo camino, por fin llegamos a la mansión Wayne, donde todo parecía alegre y ameno.
Ya no tenía puesto el abrigo y entramos al lugar, donde estuvimos un rato sin hacer mucho. Pero, de la nada, Jason comenzó a mirarme con atención.
-¿Qué me miras?- dije recordando lo que Jason me había dicho un rato antes.
-Va a sonarte repetitivo pero te ves preciosa- dijo con una leve sonrisa.
Sentí cómo mis mejillas se ponían más calientes y cambiaban su color a uno con tonalidades más rosas. Jason hizo una ligera sonrisa y tomó mi mano, jalándome para bailar con él.
Estuve buscando a Diane con la mirada, estaba algo ebria y bailaba con Dick. Dick parecía buena persona pero algunos intentarían aprovecharse de su estado, eso me preocupaba.
-¿Te puedo pedir un favor?- preguntó Jason, sacándome de mis pensamientos.
-Claro
-Deja de pensar en Diane por esta noche... Dick no le hará nada ni dejará que le hagan lo que te estás imaginando- dijo con un gesto que no creo poder describir con facilidad.
-Claro, lo siento
-No tienes de qué disculparte, florecita
-Solo me he disculpado dos veces hoy y en ambas debía hacerlo
-¿Por qué lo dices?
-La primera vez fue porque entré a tu departamento sin permiso y la segunda...
Jason me interrumpió.
-¿te disculpaste por entrar sin que lo supiera o porque me viste sin camisa?- preguntó con una sonrisa algo coqueta.
-Por ambas- dije sin dejar la tonalidad roja de mis mejillas.
Hola, personitas :)
Espero que les haya gustado el capítulo
Y quiero agradecerles porque esta historia es la número 3 en #batman
También quería decirles que esta historia ya está a relativamente poco de terminar, quizá se termine en menos de 10 capítulos
