Capítulo 24

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-Idiota, eres una idiota- Catra seguía con sus insultos, escondiendo su cara lo más que podía en Adora.

Y cada vez se aferraba más fuerte.

Adora solo sonreía mientras que su mano desperdigaba pequeñas caricias en la cabeza y melena de la menor.

-Idiota- Repitió de nuevo.

La rubia no se molestaba, conocía a la felina y sabía que esa era una de sus enrevesadas formas de mostrar afecto.

El momento fue interrumpido cuando ambos estómagos se sincronizaron para gruñir.

-Tal vez sí sea buena idea ir a comer algo ahora- Rió un poco Adora, incorporándose.

Catra se le quitó de encima -Puede- Rió también, apartando la mirada y con un leve sonrojo.

La felina se levantó y estiró sus brazos hacia el techo, desperezándose.

Sabía que Adora la estaba mirando.

Sus orejas se movieron, la una acompañando a la otra como en un perfecto baile sincronizado, había escuchado pasos que se dirigían a la habitación de Adora.

Pasos rápidos y, por la fuerza de la pisada, parecían emocionados.

Giró la mirada hacia la puerta justo en el momento en que esta se abrió de par en par, dejando entrar a Bow con su gran sonrisa.

-¡Chicaaaaaaas!- Gritó entusiasmado.

- Hola Bow- Adora le sonrió de vuelta, contagiándose automáticamente por su alegría.

Catra solo agitó la mano como saludo.

-¿Qué les parece si hacemos una pijamada?- Su voz rebosaba alegría mientras daba pequeños saltitos.

-¡Sí, eso sería genial!- La plaga de alegría se extendía con dirección a la rubia.

-¿Una qué?- Por supuesto que Catra no tenía ni la menor idea de que era una pijamada.

Bow la miró como si le hubieran salido cuernos o algo así, giró la cabeza hacia Adora y la miró de igual manera antes de hablar para las dos -¿Es que acaso no existe la diversión en la Horda?- Chilló con profunda tristeza y dolor, casi se le saltan las lágrimas.

[...]

-Jaque mate- Catra ganó al ajedrez......otra vez.

-¡¿Qué?! No puede ser, si acabábamos de empezar- Bow estaba incrédulo, Netossa le había comentado que Catra era buena al ajedrez, pero esto le resultaba increíble.

Llevaban casi dos horas jugando y el pobre arquero no había ganado ni una sola vez.

Sin embargo no se daba por vencido, al contrario, cada derrota le alentaba a intentarlo de nuevo.

Catra mantenía una sonrisa socarrona, se sentía satisfecha, aún que no entendía la persistencia del arquero.

A excepción de Adora y aparentemente Netossa, todo aquel que se enfrentaba a ella en una partida de ajedrez desistía tras un par de derrotas o alegaba que Catra había hecho trampas y se marchaba con gran frustración.

Adora y Glimmer les observaban mientras compartían un trozo de tarta que la pelirrosa se había robado de la cocina.

Ambas se reían por la reacción de los jugadores, en especial de las caras de sorpresa que ponía Bow cuando la felina hacía alguna jugada inesperada.

El grupo hablaba y reían de alguna broma o anécdota mientras el juego entre ambos morenos mantenía su maravilloso equilibrio de un cien por ciento de victorias para Catra.

Adora se divertía internamente, pues sabía que nunca jamás nadie había sido capaz de ganar a Catra en una partida de ajedrez.

También la alegraba ver a Catra divertirse tan libremente, e incluso había llegado a chocar los cinco con Glimmer tras alguna que otra victoria magistral.

Adora sabía que el contacto físico era un tema delicado para la morena y verla juntar su mano con la de la pelirrosa como si nada la llenaba de felicidad.

-Psssh- Glimmer llamó su atención -¿Vamos a por más?- Habló mostrando el plato de pastel vacío.

La rubia asintió y las dos princesas se levantaron del suelo, que era donde estaban transcurrido sus actividades.

[...]

La puerta del laboratorio se abrió, sacando a Kyle y a Lonnie de su pequeño trance.

Rogelio y Scorpia entraron completamente empapados de pies a cabeza.

Entrapta saltó de su silla giratoria y corrió hacia la escorpioni, pues era ella quien más parecía ser la que se interesaba por su trabajo.

¡Tenía que contarle su avance!

-Scorpia, Scorpia, la cámara de la insignia de Catra funciona perfectamente- Hablaba rápido y con entusiasmo -Ningún sistema parece haber recibido daño, solo me falta recalibrar un par de cosas y podré restablecer la conexión para....- La inventora se frenó, su amiga no la estaba.

Ella no era una experta en ese tipo de situaciones, pero, según todos sus estudios sobre interacciones sociales, la peliblanca estaba saliendo de un estado de shock, los cuatro jóvenes lo estaba.

-Vi...vimos a Catra en Salineas, estaba con la rebelión- Scorpia se esforzó por que su voz no temblara.

-Nosotros la...la acabamos de ver por el monitor- Kyle hizo el mismo esfuerzo, pero no le funcionó tan bien como a la escorpioni, su voz era comparable con una gelatina.

[...]

Adora había estado distraída durante todo el tiempo que llevaban en la cocina, su cara pensativa daba a entender que sus dos neuronas estaban conectando y pronto le saldría humo por las orejas.

Glimmer la espabilo poniendo una mano en su brazo -¿Adora, va todo bien?- Por supuesto que la pelirrosa se había dado cuenta de la ausencia de su amiga.

La ojiazul sonrió ampliamente y asintió, tratando de disimular y le hubiera funcionado el truco de no ser por que nunca supo disimular.

La menor alzó una ceja obviando que eso no iba a colar -Adora....- La animó a hablar.

Lo que la princesa de Luna Brillante no esperaba fue que Adora la abrazara sin previo aviso -Gracias, muchas gracias de verdad- Murmuró escondiéndose en el hombro de su amiga.

-Eeeeeh..de nada, ¿pero por qué?- Glimmer no tenía idea de por qué Adora debía darle las gracias.

La rubia se aferró con más fuerza -No tienes idea de cuantos años hace que no veía a Catra sonreír así y en verdad creo que nunca la vi tan relajada- Su voz se quebraba un poco por el nudo en su garganta -Muchas gracias por darle una oportunidad- El sentimiento era tan profundo como sincero.

La pelirrosa sonrió y le dió unas pequeñas palmaditas en la espalda, cada día era un poco más consciente de lo importante que era la gata para su mejor amiga.

Se separaron, Adora con los ojos ligeramente acuosos, pero llenos a rebosar de gratitud.

-Sabes, creo que estoy oyendo el estómago de Bow desde aquí, ¿qué te parece si llevamos todo esto?- Señaló a la mesa donde se encontraban una tarta de fresas a la que le faltaba un trozo y un par de bols llenos con palomitas.

En verdad se iban a poner las botas con todo eso.







Y hasta aquí el capítulo, espero que les haya gustado y no olviden votar
<3.




























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~Todo es mi culpa~(Catradora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora