Corre

Capítulo 7

Desperté esa mañana con un fuerte dolor de cabeza, mi vista estaba nublada y mi garganta seca, seguro era un desastre para la vista de los demás.

Me adentré al baño del dueño de la casa y me bañé de pies a cabeza tratando así de mejorarme, seguro durmió en el sofá porque no lo vi por ningún lado.

Salí del departamento por varias razones, no quería un sermón por el desastre que no deseaba limpiar y debía cambiarme de ropa, a pesar de haberme duchado, apenas logré conseguir algo de ropa suya que me quedara así que debía ir a casa antes del trabajo.

Me prepararía algo de comer, algo pesado que me ayudara con la resaca y luego de quizás lograr descansar 5 minutos en la comodidad de mi cama ir al trabajo.

Tomé un taxi y cerré mis ojos mientras iba en el, de esa manera descansaría la vista y despejaría mi mente, hablé mucho con Hoseok anoche, le conté que estaba saliendo con alguien, que me gustaba, mucho. No le dije quien era por obvias razones pero me escuchó todo lo que desee hablarle.

-Hola- había llegado a mi departamento, quien se encontraba perdido se veía campante en la cocina desatando el pedido de lo que por el olor supongo es sopa para resaca.

¿Solo eso diría?¿Hola?

Continué con mi camino en silencio hacia la habitación y escuché sus pasos tras de mi, lo miré fijamente sin decir nada cuando tomé asiento sobre la cama.

-Se presentó algo- asentí, no porque estuviera satisfecha con su excusa, porque ni siquiera eso era, una excusa decente. Sino porque no tenía ánimos de portarme como una perra cuando no tenemos nada.

Quizás yo he malinterpretado todo, quizás ni siquiera le gusto y es simplemente por alguna razón extraña que está aquí, no puede ser por sexo, quien se ha negado es él.

Dinero tampoco es, si tiene dinero para hospedarse en un hotel como en el que trabajo no tiene nada que buscar conmigo.

-¿Donde trabajas Jungkook?

-¿Perdón?

-La empresa para la qué haces la investigación de mercado. ¿Como se llama?

-Jenny- llamó como si no lo notara, lo miraba a los ojos, ¿como no iba a notarlo?, -Estás molesta, lo se. Debería irme, darte espacio.

-Deberías si- le mostré la puerta y no hizo más que mirarme incrédulo.

-No puedo decirte porque me fui, pero no hacía nada malo, solo...- suspiró -Solo son cosas personales

-Estoy algo cansada, deberías irte.

-Bien, hablaremos a la noche cuando salgas del trabajo- negué

-Necesitaré más tiempo que eso.

-Jenny- repitió

-Te pierdes y me dejas llenando tu teléfono de mensajes, no respondes para al menos decir que estás vivo y ahora llegas diciendo "Hola"- dije con molestia.

-Estuve algo ocupado- asentí

-Deberías ir con tus ocupaciones entonces.

-Te estás comportando como si fueras mujer casada a la que su esposo dejó durante meses- se quejó. Y ese hecho me cayó como balde de agua fría, no somos nada, eso es lo único verdadero que tenemos. Nada.

-Es cierto, no somos nada, no deberías volver aquí- sus palabras me dolían y no debería dolerme tanto pero eran como dagas enterradas en mi pecho.

-No quise decir eso Jenny, escúchame

-¿Ves mi ropa? Estuve con otro hombre anoche, así de poco comprometida estoy contigo, así que puedes largarte.

¿Porque mentir?

Estaba herida y soy una inmadura de mierda, también estaba molesta y me sentía rechazada, ni siquiera podía irme, era mi casa. Solo esperaba a que se largara él antes de que empezara a llorar frente a él.

-No estuviste con nadie- dijo con convicción. -Me iré, hablaremos al salir de tu trabajo- dijo saliendo por la puerta.

No me permití llorar, ¿Porqué habría de hacerlo por él?

Ni siquiera entendía como era que este se había colado tan rápido entre mis huesos, no soy una persona sentimental, todas y cada una de las personas que me interesan me han abandonado, se lo que es eso sentimiento de pérdida, he vivido con él toda mi vida.

Evitar un daño mayor no va a perjudicarme.

Salí a la cocina luego de un rato, encontré sobre el mármol la sopa que había traído, me sentí mal por un momento pero luego aleje el sentimiento.

Lo perdonaría si dejaba que mi corazón se adueñara de la situación y si lo hacía acabaría aún pero cuando un día dijera simplemente que debe marcharse.

Que no volverá

O cuando simplemente desaparezca como lo hizo desde ayer, que no deje rastro para saber  al menos que está bien.

No conocía nada de él, solo su nombre y estaba más colada por ese hombre que por cualquier otro a lo largo de mi vida.

Se mostraba como cordero, tenía mirada de cordero y sonrisa tierna, pero un presentimiento había en mi.

Quizás era cazador y el cordero era yo.

Se nos indignó la Jenny🙃
Le dije a una jungunista que la haría sufrir, llegó tu diciembre 😂

.