Naruto Shippuden: El Secreto De Gaara.

Capítulo #11 "Revelación"

Habían viajado por varios días, sin ninguna palabra o algo que le indicará a donde se dirigían; Suficiente tenía Gariba con tener que estar en deuda con un tipo como él, mientras sus pasos daban una dirección la flor de papel en su mano le indicaba ir al lugar donde alguna vez fue su hogar.
-Hemos viajado mucho, ¿Cual es tu plan?
-Lo sabrás cuando lo veas...
Y al no faltar prácticamente nada, fue cuando la entrada de la guarida de Orochimaru se revelo al igual que la sorpresa de Gariba quien se detuvo. Sasuke la miro, le hizo una señal con la cabeza para que siguiera caminando y con una sonrisa Gariba corrió emocionada sin esperar más.
-¡Papá! ¿Dónde estas?
La guarida era tal como la recordaba pero no veía a su padre por ningún lado, la extraña sonrisa de Sasuke sólo le motivaba a seguir buscando; Fue ahí donde decidió buscar en la habitación de Orochimaru. Al llegar entro con cautela, hasta que lo vio reposando en su cama.
-¿Papá?
-¿Gariba?
-¡Oh papá!
Gariba corrió a abrazar a Orochimaru quien correspondió ese acto de cariño y en ese momento entro Sasuke cuya extraña sonrisa desapareció por completo; Pero eso no parecía importar ya que era ignorado.
-Gariba, ¿Puedes hablar?
-Si, Sasuke logró liberarme y pude volver aquí después de vengarme de la aldea de la arena que me separó de ti...
-Esa es mi niña y que gusto me da verte, mírate, eres toda una señorita...
-Te extrañe papá...
-Oh mi niña, mi pequeña, mi pequeña Gariba, papá también te extraño mucho...
Sasuke repudiaba esa escena, pues sabía el papel que Orochimaru actuaba a la perfección solo para mantenerla contenta, la estaba engañando, eso sólo significaba la muerte de la chica y finalmente obtendría un cuerpo inigualable. Orochimaru logró ver la seriedad de aquel chico pero no quería que Gariba se pusiera nerviosa o algo parecido, por lo que continuó con la charla, haciendo la distracción.
-Pero papá, ¿Cómo fue que caiste en cama?
-Después de lo sucedido aquel día especial que tendrías, mudé de piel varias veces, pero no logré estabilizarme sin ti...
-¿Quiere decir que estas enfermo?
-Si, la verdad me hiciste mucha falta hija...
Gariba sonrió al sentir el cariño de esas palabras y abrazo a su padre una vez más hasta que algo que escucho hizo que mirará al responsable de ello, Sasuke.
-¿Qué fue lo que dijiste?
-¿Ahora eres sorda? Ordené que lo mataras...
-No haré tal cosa, estás loco...
-Escucha, puedes hablar todo lo que quieras, pero el resultado será igual, si no eres tú, seré yo y de todas formas morirá...
La chica lo mira horrorizada por tal petición y cayó en cuenta de que eso era lo que él quería como pago por la deuda. Orochimaru lo mira con el ceño fruncido y logra sentarse en la cama con ayuda de Gariba, suspira.
-Sabía que esto pasaría, tu actitud lo decía todo, Sasuke...
-No puedes hacer esto, míralo, esta enfermo y en cama...
-Y seguirá así hasta que le entregues tu cuerpo, Gariba...
-¿Qué?
-¿Aún no lo sabes?
-¿De que está hablando, papá?
Gariba miro a Orochimaru quien mantenía el ceño fruncido y miraba mal al chico que sólo le sostenía la mirada. El hombre suspiro y cerró los ojos mirando ligeramente hacia abajo.
-De acuerdo, lo diré por ti, este hombre no está enfermo por una enfermedad cualquiera, esta enfermo porque su cuerpo deja de servirle y necesita uno nuevo para seguir con vida...
-Sasuke, tal vez este enfermo, pero aún puedo destruirte si te atreves a retarme...
-Hmp... Tienes razón, tú díselo...
Gariba se alejo de Orochimaru y le miraba esperando una respuesta pero al ver que no era así, Sasuke lo dijo finalmente.
-Te creó como reserva...
-¡¿Cómo te atreves?!
Orochimaru se enfureció mostrando su forma definitiva, aquella serpiente albina gigante con su cabeza y cientos de pequeñas serpientes más incrustadas en su piel.
-¡Papá no, te harás daño!
Sasuke corrió y apartó a Gariba de su camino para apuntar con su Katana a Orochimaru. Gariba desde el suelo miraba la escena y al estar por enfrentar a Sasuke, las palabras de su padre detuvieron sus acciones.
-Es su único propósito...
-Este es tu fin Orochimaru, no dejaré que obtengas el cuerpo de nadie más...
-Gariba, ven aquí...
La chica se puso de pie pero antes de dar un paso, Sasuke comenzó a atacarlo y ahí inició la batalla.
-¡Quédate ahí!
Gritó Sasuke al ver que ella aún estaba de pie con la duda en su semblante, y mientras ellos luchaban ella se apartaba poco a poco al escuchar las palabras de aquel que consideraba su padre.
-¡Pase años buscando un cuerpo que cumpliera las cualidades que quería!
-¡Por eso impregnaste a cientos de personas con tu veneno!
-¡Ella es diferente, es mi creación perfecta y final!
La batalla fue así hasta que finalmente la gigantesca serpiente cayó derrotada pero aún con vida. Sasuke mantenía su katana contra él, listo para dar el tiro de gracia.
-Gari... ba...
-No lo escuches, sólo quiere asesinarte...
-¡Obedeceme!
Con sus últimas fuerzas logró levantarse mirando a la chica con la autoridad que siempre tuvo sobre ella, hasta ahora. Sasuke bajo el arma pues sabía que no le quedaba energía para pelear y tiempo de vida menos.
-Haz lo que quieras...
-¿Qué?
-Haz lo que quieras, si quieres desaparecer para siempre y dejar este mundo, adelante, dale tu cuerpo, nadie te extrañará...
En ese momento miro la flor de papel que traía consigo y se perdió en sus pensamientos; Sasuke la miraba con seriedad obviamente no la dejaría desperdiciar sus habilidades de esa forma por lo que cualquiera de las decisiones llevaría al mismo final; Orochimaru moriría.
-¡Gariba, te ordeno que vengas aquí!
-...
-Ayúdame, ayuda a tu padre...
-Quiero hacerlo, pero no quiero desaparecer... Tengo que ir con él, necesito verlo...
-¿De que tonterías hablas? Yo te di la vida y las habilidades que presumes todo el tiempo, yo te hice inmortal y perfecta...
-¿A cambio de qué? Sólo fui una opción para ti y ahora que estás mal ya no te sirvo porque tengo voluntad...
-Ese es tu único propósito, sólo eso, no estas para tener una vida normal, tienes que ser leal a mi y pagar por lo que te he dado...
-Me has mentido...
Sin más la chica retrocedía hasta la puerta, la decepción y la tristeza marcaban su rostro. Orochimaru no lo iba a permitir tan fácilmente pero al salir ella, Sasuke terminó lo que había empezado.

. . . . . . . . . .

Al salir estaba la chica sentada fuera mirando aquella flor en su mano, se levanto con una sonrisa tras tomar una decisión.
-Tengo que volver...
Al girar chocó contra Sasuke que le miraba serio y le arrebató lo que llevaba en la mano. Gariba borró su sonrisa y fruncio el ceño.
-Llevas esto desde que salimos de la aldea de la arena...
-Damela, Sasuke...
-No estarás pensando en volver, ¿Verdad?
-Y a ti que más te da, nuestra deuda está saldada y haré lo que me plazca...
-¿Eso crees? No te has dado cuenta que soy lo único que te queda...
-¿Ahora de que estas hablando?
-No creas que la aldea de la arena te recibirá después de lo que hiciste...
-¿Eh?
-¿Lo olvidaste? La destruiste casi por completo...
Sasuke aplastó la flor la cual se destruyó y el viento se encargó de llevarse lejos los pequeños trozos; Gariba extendió la mano y consiguió tomar el más grande, el resto los siguió con la mirada y la dirección era la aldea de la arena, en el fondo lo sabía.
-Sé que puedo remediarlo, vale la pena intentarlo...
-Después de lo de hoy, estás sola, sólo me tienes a mi...
-En ese caso prefiero estar sola...
-¿Crees que te perdonarán?
-Tú no conoces a Gaara...
Sasuke la tomó del brazo antes de que se alejara lo suficiente y la regreso mientras la miraba seriamente.
-¿Y tú si?
-¡Claro! Me dejo ir la última vez porque no queria hacerme daño...
Mientras decía eso, Gariba intentaba soltarse a toda costa pero le resultaba imposible y se estaba cansando de eso.
-¡Sueltame Sasuke!
Sasuke se sorprendió cuando lo miro, los rasgos característicos del bijuu comenzaban a reflejarse en su rostro; Los colmillos, los bigotes, las garras pero sobre todo el cabello encrespado, era como ver a Naruto. Sin más la soltó mientras la miraba alejarse para ponerse a la defensiva contrario a lo que llegó a pensar.
-Eres tonta, no desperdicies tu poder por una vida normal, haz algo productivo, puedes ser dueña del mundo si quisieras...
-No reflejes tus deseos en mi, no es mi culpa que seas débil...
-Con tu poder sería muy fácil lograr lo que quieras, ven conmigo, tengo planes para ti...
-Claro, como usarme para revivir a tu clan...
Al escuchar eso fue suficiente, Sasuke corrió hacia ella para darle fin a todo; Gariba ya se encontraba en la fase 4 de su transformación lo que indicaba que iba enserio.