Hayun
Ignorar a mi madre es más sencillo cuando está ciega de borracha.
-¿Acaso no te da vergüenza?
Mamá me sigue hasta la cocina mientras preparo la comida de Hoon. No tenemos mucho en la alacena así que tendrá que ser un ramen.
-Pareces un payaso con todo ese maquillaje en la cara -dice en tono de burla.
Aprieto los labios y sigo en lo mío.
Aprendí a cubrir mis cicatrices desde los 11 años. Quería ser normal y que no me trataran feo por como me veía. Intentaba agradar a la gente, incluyendo a mamá. Y sin embargo... Eso no funcionó.
-¿En serio crees que puedes engañar a todos? -pregunta mamá, parada en la entrada de la cocina con los brazos cruzados-. Los monstruos no cambian, chiquilla ilusa, simplemente se ocultan en la oscuridad. Como tú, ocultándote bajo esa máscara de maquillaje.
Echo agua caliente en el cuenco y lo tapo.
-Realmente fuiste el error más grande que pude cometer en toda mi vida -continua mamá.
Eso es bastante hiriente, sí. Yo ya estoy acostumbrada. Esta no es ni la primera ni la segunda vez que me lo dice.
-Saldré.
La sigo hasta la salida donde se calza sus zapatos.
-¿A dónde vas? -le pregunto en voz baja.
-No te importa. Cuida del mocoso como siempre haces -menciona a la ligera.
Mis puños se aprietan. Si cuido de Hoon es porque ella nunca lo hace, nunca lo ha hecho en realidad. No lo alimenta, ni se preocupa siquiera por sus necesidades básicas.
Soy yo a quien Hoon llama cuando ocurren problemas. Es a mí a quien le cuenta abiertamente sus pensamientos. Es conmigo con quién duerme y soy yo quien lo acompaña en sus noches de pesadillas.
Eso me hace más madre de Hoon que cualquier persona. Soy su hermana pero sé que que Hoon me ve como lo más cercano a una figura materna.
Mi madre finalmente se larga, posiblemente se vaya a beber o sabrá qué cosas.
Ojalá pudiera irme de esta casa junto a mi hermano, alejarnos de esa mujer. Pero es imposible.
Horas después, mi hermano devora el ramen con impaciencia. Yo juguetero con los fideos mientras pienso.
Sin pretenderlo recuerdo ese momento de esta mañana cuando Jimin me saludó. Bien, se acuerda de mí entre las muchas maquillistas. ¿Pero por qué me saludó? Dijo que le parecía linda. ¿Podría estar interesado en mí?
Niego con la cabeza. Nah, no debe ser eso.
Al terminar nuestros alimentos ambos limpiamos todo y vamos a nuestra habitación. Me comienzo desmaquillar mientras Hoon toma una ducha rápida, y fría, porque lo escucho soltar siseos desde fuera del baño.
-Hoon -lo llamo, tocando a la puerta.
-¿Sí, noona?
-Usa el calentador, unos cuantos wones más que pagar no importan. Es muy tarde y podrías enfermar.
Lo escucho quejarse pero finalmente lo usa.
Por mi parte vuelvo a sentarme frente al espejo. Me quedo mirando fijamente mi reflejo. Como lo odio.
Mi mano se aprieta sosteniendo la mota de algodón con los residuos de maquillaje. Recordando todas las humillaciones. La gente solía asustarse o reírse de mí.
Realmente odio mi rostro. Odio esa horrible cicatriz que rasga todo el lado izquierdo, desde mi frente hasta el mentón.
Recuerdo el momento en el que se formó.
Tenía unos 5 años. Papá y mamá estaban discutiendo en la sala. En una de las esquinas, yo jugaba con un oso de peluche que papá había conseguido para mí.
-¡Nunca haces nada bien! -le gritaba mamá.
-¿Pero mujer, por qué dices eso? Era un regalo para nuestra Hayun.
-¿Hayun? Bien podría esa niña jugar con las cajas de basura. No hay necesidad de gastar el dinero que no tenemos en ella.
Miré a mi osito con un puchero.
-De ninguna manera -había negado papá enérgicamente-. Mi hija no va a jugar con cajas de basura porque no es una mendiga y para algo tiene a su padre.
-Claro, tú eres su padre. ¡Esa mocosa! -murmuró mamá entre dientes.
Deje el oso de lado, que ya no parecía tan interesante, para acercarme a ellos
-Mami, papi -los llamé-. No peleen, me asustan.
Mi madre me lanzó una mala mirada.
-¿Te asustas, Hayun? -preguntó, se acercó y acarició mi cabello. Había algo en su voz que me daba miedo-. Pero ¿sabes por qué tus padres discutimos?
Me tomó de los hombros.
-¡Es por ti, niña del demonio? ¡Por ti! -me gritó, agitándome bruscamente.
Irremediablemente comencé a llorar. Estaba muy asustada. No entendía por qué mamá me decía eso.
-Si no hubieras nacido esto no pasaría. Tu eres la culpable de todas mis desgracias. ¡Maldita seas!
En medio de su ataque de histeria y locura. Mamá tomó una de las botellas rotas que había tiradas alrededor y me la tiró a la cara, cortándome el rostro.
-¡HaeRa! -le gritó mi padre horrorizado, pero no pudo detenerla a tiempo.
Recuerdo mi grito horrorizado y después mi llanto desgarrado. Era horrible, recuerdo vagamente que dolía horrorosamente, mi piel quemaba y la sangre fluía como un auténtico río.
-Hermana.
La voz de Hoon me trae de vuelta al presente. Me doy cuenta que estoy soltando lágrimas, una trás otra. Mi rostro está empapado.
Hoon me abraza y me seco las mejillas.
-No escuches a los demás. Ellos no saben absolutamente nada -me susurra-. Mi hermana mayor es hermosa. ¡Cómo una princesa de cuentos!
Este niño realmente me conoce demasiado bien. ¿En qué momento Hoon ha crecido tanto como para entender este tipo de cosas? ¿En qué momento mi hermano menor se convirtió en un pequeño caballero?
Le devuelvo el abrazo, agradeciéndole sus palabras de consuelo.
Te amo, hermanito. Prometo sacarte de aquí y darte una vida mejor. Ambos merecemos algo mejor que esto.
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N\A:
Amo a Hoon, la verdad. Ese pequeño es un dulce de azúcar.
💝💖Sé que de momento no hay mucha interacción entre la pareja, pero estoy tratando de trabajar en los personajes primero para que los conozcan mejor y puedan conectar con ellos.
Creo que para el próximo capítulo va a pasar algo interesante entre ellos. ¡Lo averiguaremos! 😏
Me despido, tengan bonita noche.
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Fake Girl • PARK JIMIN [✅]
FanficSeung Hayun lleva una vida para nada envidiable. Debe soportar los pesados tratos de una madre que nunca la quiso, hacerse cargo de su hermano menor y tratar de mantener su trabajo de estilista como parte del staff de BTS. Las cosas se le complican...