¿Como as llegado aquí? [Tsukkishima kei x tn]

-18-

Iba dando pequeños saltos de emoción cuando vi que Nishinoya me esperaba, al igual que ayer.

--Holaa-- Salude.

--¿Algún avance?

--¿Como avance?

--Ya sabes... Una roce, un abrazo... Algo DAME CHISME-- Se puso a gritar.

--Shhh callaaa, me a dado su número.

El se emocionó y comenzó a saltar sin formular ninguna palabra completa.

Reí y comencé a saltar con el. Cuando ya pasó todo nos pusimos a caminar mientras hablábamos y el, varias veces, sacaba el tema de que dormiría en la misma habitación que el.

Caminamos hasta casa y me encerré en mi habitación para viciarme a la consola. Pero en un momento me quedé pensando.

--Ostia, pues sí que me parezco a Kenma-- Pensé en voz alta.

Después, salí un rato de mi habitación para cenar y preparar las cosas para el día siguiente.

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Sonó la alarma, me preparé y salí con Noya para dirigirnos al instituto.

Al llegar me senté con Tsuki y Yams y estuvimos hablando ya que la profe no vino la primera hora. Paso el tiempo y, como siempre, no nos separamos. Llegó el entrenamiento y me pidieron ir a rellenar las botellas de agua.

Estaba llegando a la fuente cuando veo que Tsuki viene hacia mi. Yo me quedo un poco extrañada pero sigo llenando las botellas. Cuando él llega a mí aparta la botella que estaba llenando.

--Perdona, me muero de calor-- Dijo mientras se mojaba las manos para pasárselas por la nuca y volver a dentro.

Yo me quedé mirando su pelo rizado rubio y trataba de evitar las ganas que tenía de acariciarse lo.

Cuando acabe de llenarlas, entre en el gimnasio y les entregué una botella a cada uno de ellos. Todos me daban las gracias, excepto Tsuki, que se quedó callado.

Yo lo mire levantando las cejas. Cuando terminó de beber me miró extrañado.

--Ahora que te pasa?-- Pregunto.

--Pues no se, un gracias o algo ¿No?-- Le dije cruzando los brazos.

--Que pasa te has enfadado?-- Dijo mientras se reía un poco y se lo tapaba con la mano.

--¿Enfadada? ¿Por ti? En tus sueños.-- Dije para tratar de quitarle la botella, pero el levanto el brazo para que no llegara a agarrarla.

--No llegas enana?-- Dijo el riéndose.

--Enana no soy que mido más que Hinata.-- Dije tratando de llegar a la botella. Hinata se giro.-- Si, ya sabemos que aunque no seas bajito puedes saltar, pues demuéstralo y agarra la botella.

Tsuki estaba que no se aguantaba mas la risa.

--Ya sé como llamarte a partir de ahora, enana.-- Dijo y se agachó para poner su cara a mi altura.

-- Sere enana, pero sigo siendo más inteligente que tu-- Dije para apoyarme en su hombro y saltar impulsando me en el. Le quite la botella y la lleve con las otras. El me miró sorprendido y medio molesto.

Cuando acabó el entrenamiento, ayude a recoger y me quede fuera esperándoles.

Primero salió Hinata.

--Mañana ya es sábado, iremos al viaje, que guay-- Dijo alegremente.