Capítulo doce

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Relación alumna-profesor

— ¿El tren infinito? ¿Está hablando en serio? — Sus ojos brillaban más que nunca.

— ¡Sí! Estás preparada para ir conmigo — Tomó la cintura de ___ y la cargó sobre su hombro sin ningún problema— Aunque antes iremos con Shinobu.

— ¡Espere! No puedo irme todavía — Lo detuvo.

— ¿Tu misión no era acabar con ese demonio? — Mira el suelo destruido.

— En parte sí,pero debo despedirme de Aiko o se va a preocupar.

Kyojuro quería partir cuanto antes junto con su discípula,convenció a ___ de dejarle una carta a su amiga y rogándole que no se preocupara. Debían caminar mucho para llegar a la finca o al menos a un hospital por lo que Rengoku llevó en su espalda a su compañera durante todo el viaje.

[...]

— ¿Cómo se siente?

— Duele mucho,deje de tocar por favor.

Rengoku dejó la cabeza de su alumna tranquila y se centró en su comida.

— ¿Estás segura de querer empezar mañana? No me importa esperar unos días más.

— Si Okayata-sama se lo encargó no debe ser algo sencillo — Suspiró  cansada — Iré a dormir.

— ¡No lo hagas!

Se asombró ante su tono de voz. Tal vez Kyojuro no quería que se fuera,quería pasar tiempo con ella.

— Rengoku... — Sus lágrimas estaba por desbordarse.

— No puedes dormir segundos después de recién haber comido. ¡Es malo para la indigestión!

¿Qué? ¿Indigestión? ¿De qué está hablando?

— ¿Quiere decir que estaba preocupado porque tuviera una mala...digestión? — Le daba hasta vergüenza terminar la frase.

— ¡Sí!

— Hablas como mi hermana — Soltó sin pensar.

El rubio se quedó en silencio unos segundos mirando curioso el techo. ___ organizó toda la cocina pues Senjuro ya estaba dormido.

— La recuerdo muy bien — Dijo finalmente el chico — Cuando vio que estabas bien no tardó ni un segundo en ir a abrazarte.

— Sí y me dijeron que casi me mata en el acto — Dijo con ironía.

El pilar comenzó a carcajear ya que se había olvidado de esa parte tan graciosa,pero también recordó una muy especial.

— Una niña se acercó a mí prometiendo que algún día se convertiría en una gran cazademonios,y tal parece que va a superarme.

— No diga eso — Ella agachó su mirada triste — Si usted no hubiera estado ahí probablemente hubiera muerto. Así que no ponga tantas expectativa en-... R-rengoku-san...

La tomó desprevenida cuando acercó sus rostros,pudo olfatear con más intensidad el agradable aroma que provenía de ella. En cambio ___ no sabía que estaba planeando su maestro.

Tal vez sea otra broma.

— Rengoku-san.

— ___ quiero que dejes de hacer eso — Dijo serio y ___ se asustó.

— ¿De qué habla Rengoku-san?

— Exactamente sobre eso. No quiero que sigas tratándome tan formal. Como alumna y maestro debemos tener confianza. ¿Si? — Dijo expresando alegría.

Rastro de lágrimas. /𝑹𝒆𝒏𝒈𝒐𝒌𝒖 𝒚 𝑻𝑵/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora