De cielos grises

Año 3022

Nací en una fábrica, justo cuando los humanos
perdieron la pasión, estaban demasiado ocupados viendo el fútbol los domingos , tenían demasiado poco tiempo para perderlo teniendo sexo así que decidieron crear copias robóticas , muy similares a ellos, con la diferencia, de que yo era mucho mejor en la cama , que mi reflejo humano. Si , soy un robots sexual, el tercero de mi especie los dos primeros tuvieron fallas , debido al calor, la humedad del clima, prendieron en fuego justo después de los preliminares. Formé parte de más de 80 familias, con títulos internacionales , el primero en lograr orgasmos de un límite de tiempo menor a los 5 minutos iniciales , con récord de corridas , y de mujeres complacidas. Pase años analizando a los humanos, enterándome de sus infelicidad e incapacidad de salvarse , y su facilidad tanto de construir, como de destruir. Así que mejoré mucho para hacer más felices a mis amos .Hasta encontré la hora mejor para follar,La mirada correcta y la frase perfecta según el tipo de persona, cubierto de piel sintética, muy similar a la humana, incluso más duradera, una estructura de acero que protegía mis mecanismos internos , sin corazón , sin cerebro, sin se sentimientos , con centímetros ajustables a gusto de su consumo excesivo, hecho para complacer.
Pasaron los años , 200 tal vez ,  fueron envejeciendo mis mecanismos , la última pareja que me alquiló me devolvió al mes debido a algunas fallas en mis sistemas, cada vez me costaba más mi trabajo , los humanos son tan aburridos, que suelen aburrirse demasiado, así que fueron creando robots nuevos, con muchas más funciones, más rudos, más fuertes ,más tiernos, menos humanos, algunos hasta con forma de animales. Estuve bastante solo , hasta que me rompí, algo dentro de mi mecanismo dejo de funcionar,  y se me fueron apagando las funciones.
Estuve años en un rincón oxidado, de la casa sin poder caminar, ni hablar , solo escuchaba cada día a mis amos quejarse de mi, como un bulto de metal inservible, ocupado el espacio donde tal vez pudieran colocar alguna mesa nueva , alguna que otra mierda nueva y, comprendí en mi silencio la incapacidad de los humanos de recordar. Se fue apagando la luz en mis sintético rostro, mis ojos de cristal cada vez más grises, decidieron descansar.
Estuve años en un basurero, abrazado a robots
muy parecidos a mi, igual de rotos e inservibles milagro, quizás, casualidad, si me preguntan por Dios les diría que no existe , pero juro que sentí estar en  el cielo justo en el momento en que sus manos cerraron el ultimo tornillo en mi espalda. Luz !! y pensé en la teoría esa de la luz al final del túnel,
esa que escuché muchas veces en bocas humanas, pero ni siquiera esa luz brillaba tanto, eran sus ojos sobre los míos , muy de cerca . Alma ,se llamaba, me contó sobre su experimento, de colocar partes humanas en cuerpos como el mío, me dijo el nombre de su gato, el año en el que estábamos, me dio una fecha de cumpleaños , una casa, me presento a su abuela, y me dijo que no me asustara si sentía que se apresuraba más el ritmo al lado izquierdo del pecho, se trataba del corazón y me dijo muy poéticamente cómo se refugiaban en el los sentimientos. Eso era muy improbable , pero decidí aceptar su teoría, en un final, era muy poco probable que estuviera de pie, así que acepté en reto de creer y empezar de cero. Ustedes dirán, se enamoraron , era muy obvio, aunque costaba ralentizar mis funciones mecánicas‚ hacer todo más lento, sobre todo besar costo mucho esfuerzo, y entender porque ya no le llamaba sexo a tener sexo , siempre me pedía que le hiciera el amor. No me adaptaba al hecho de quedar desnudo luego del acto , o el impulso de darle un abrazo devastador luego de terminar , aunque se sentía muy bien luego de hacerlo .
Era muy feliz con mi vida nueva. Hasta que
entendí ciertas cosas , que me empezaron a
desgarrar. Miedo, desarrolle ese nuevo sentimiento, miedo de perderla, de no saber amarla, de extrañarla. Estuve varios días deprimido, una noche Alma me encontró ya tarde sentado en el piso  del cuarto , observando fijo el suelo ...
-¿ Que te ocurre ? - me pregunto
y le dije luego de un suspiro
-Los robots son desechados cuando se rompen, pero los humanos desechan cuando están rotos, cuantos humanos no viven estando rotos. En eso nos ganan, aunque somos más fuertes , el órgano más fuerte de sus cuerpos abarca los sentimientos que les hacen más débiles y vulnerables ,Alma ... tú me reparaste , me diste vida, luz ,pero me hiciste débil, colocaste carne donde habían trozos de metal, y sentimientos donde habían solo cables, y ahora no solo está en tus manos la fuerza de mantenerme sano, también está el poder de volver a romperme , y esta vez tendría que seguir caminando incluso estando roto.